18 Pues bien, tan pronto como acabó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, Dios le dio las dos tablas del Testimonio,+ que eran dos tablas de piedra escritas por el dedo de Dios.+
10 Entonces Jehová me dio las dos tablas de piedra escritas con el dedo de Dios. En ellas estaban todas las palabras que Jehová les había dicho en la montaña, desde el fuego, el día que el pueblo se reunió.*+