Nota
b Los romanos tenían la costumbre de clavar o atar a un madero a los condenados mientras todavía estaban vivos. Jehová permitió que su Hijo muriera de esta manera.
b Los romanos tenían la costumbre de clavar o atar a un madero a los condenados mientras todavía estaban vivos. Jehová permitió que su Hijo muriera de esta manera.