25 De modo que por la mañana resultó que ¡pues, era Lea! Por consiguiente, él dijo a Labán: “¿Qué es esto que me has hecho? ¿No fue por Raquel que serví contigo? Entonces, ¿por qué me has embaucado?”.+
39 El animal despedazado no te lo llevaba a ti.+ Yo mismo sufría la pérdida de él. Si uno era hurtado de día o si era hurtado de noche, de mi mano lo demandabas.+
15 En su día debes darle su salario,+ y el sol no debe ponerse sobre este, porque él se halla en apuros y está alzando su alma a su salario; para que no clame a Jehová contra ti,+ y ello tenga que llegar a ser pecado de parte tuya.+