5 Después de eso partieron, y el terror de Dios vino a estar sobre las ciudades que estaban en derredor de ellos,+ de modo que no corrieron tras los hijos de Jacob.
6 En aquel tiempo, en lo que respecta al rey, su expresión misma se cambió en él, y sus propios pensamientos empezaron a asustarlo,+ y las coyunturas de sus caderas estuvieron aflojándose,+ y sus rodillas mismas daban una contra otra.+