2 Y no dicen a su propio corazón+ que toda su maldad ciertamente la recordaré.+ Ahora sus tratos los han cercado.+ Enfrente de mi rostro han llegado a estar.+
15 No es, por lo tanto, gran cosa el que sus ministros+ también sigan transformándose en ministros de justicia. Pero su fin será conforme a sus obras.+
16 Declaran públicamente que conocen a Dios,+ pero por sus obras lo repudian,+ porque son detestables y desobedientes y no aprobados+ para obra buena de clase alguna.