14 De modo que la Palabra vino a ser carne+ y residió* entre nosotros, y tuvimos una vista de su gloria, gloria como la que pertenece a un hijo unigénito+ de parte de un padre; y estaba lleno de bondad inmerecida y verdad.+
33 que Dios la ha cumplido enteramente para con nosotros los hijos de ellos* al haber resucitado a Jesús;+ así como está escrito en el salmo segundo: ‘Tú eres mi hijo, este día he llegado a ser tu Padre’.+