18 ¡Oh, si realmente prestaras atención a mis mandamientos!+ Entonces tu paz llegaría a ser justamente como un río,+ y tu justicia como las olas del mar.+
20 Somos,+ por lo tanto, embajadores+ en sustitución de* Cristo,+ como si Dios estuviera suplicando mediante nosotros.+ Como sustitutos por Cristo rogamos:+ “Reconcíliense con Dios”.