5 pero a Ana le dio una porción especial porque ella era la que él amaba. Sin embargo, Jehová no le había dado hijos a ella.*6 Y la otra esposa, su rival, siempre se burlaba de ella para hacerla sentir mal porque Jehová no le había dado hijos.
24 Unos días más tarde, Elisabet su esposa quedó embarazada, y estuvo cinco meses sin salir de su casa. Decía: 25 “Esto es lo que Jehová* ha hecho ahora por mí. Se ha fijado en mí para liberarme de mi vergüenza”.+