¿Vacío en los ideales?
En el Daily News de Chicago del 29 de julio de 1954, bajo el título “Estrictamente Privado,” salió un artículo escrito por Sydney J. Harris que invitaba a pensar seriamente. El escritor hizo la pregunta: “¿Quiere usted saber lo que América cree?” Entonces contestó: “Cree que todo el mundo debe tener tanta educación como sea posible—pero que las personas que hablan y actúan como personas instruidas son intelectuales sospechosos. Cree que Rusia es un estado sin dios y materialista—pero que está bien que nosotros adquiramos cuantas posesiones materiales podamos agarrar. Cree que el medio ambiente crea a la mayoría de los criminales—pero gasta miles de millones de dólares en encerrar criminales, y casi nada para cambiar su medio ambiente. Cree que todo hombre tiene derecho a su opinión—pero que no cuesta ningún esfuerzo o conocimiento o razonamiento cuidadoso el distinguir una opinión de un mero prejuicio. Cree que los niños deben conseguir casi todo lo que ellos piden—pero que se debe culpar a los padres si los niños se hacen malcriados y voluntariosos debido a ese mimo. Cree que no hay lugar para el sistema de castas en una sociedad democrática—pero que el tamaño y precio del auto que uno maneja es una indicación de su posición relativa en la sociedad. Cree que no es posible engañar a la gente en toda ocasión—pero que se les debe respeto a los políticos y promotores que logran hacerlo en la mayoría de las ocasiones.”