BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • w63 15/4 pág. 255
  • Preguntas de los lectores

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • Preguntas de los lectores
  • La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1963
  • Información relacionada
  • Los ángeles: “espíritus para servicio público”
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 2009
  • Los ángeles—mensajeros espíritus de Dios
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1961
  • Los ángeles: ¿cómo influyen en nuestra vida?
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 2006
  • ¿Es afectada su vida por ángeles?
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1966
Ver más
La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1963
w63 15/4 pág. 255

Preguntas de los lectores

● ¿Es incorrecto que un animal doméstico sea operado para impedir que tenga prole?—R. M., EE. UU.

La ley de Moisés prohibía específicamente a los israelitas el ofrecer como sacrificio cualquier animal que hubiera sido operado de esta manera: “Un toro o una oveja . . . que tenga los testículos exprimidos o aplastados o arrancados o amputados no deben presentarlo a Jehová, y en su tierra no deberían darlos.” Aunque esa ley no prohibía enteramente a los israelitas que efectuaran tal operación en sus animales domésticos, la voz de la tradición judía indica que esta ley fue interpretada así. Y bien puede ser eso, porque el hecho de que tal animal no podía ofrecerse como sacrificio pudiera servir como cosa que disuadiera. Interesantemente, en conexión con esto, cuando algunas traducciones de la Biblia aluden al buey como animal para sacrificio, es una traducción errónea, puesto que el buey es un animal castrado. La traducción correcta es “toro.”—Lev. 22:23, 24; 7:23, 25; 27:26; Deu. 18:3.

Sin embargo, lo que hicieron los israelitas no es obligatorio necesariamente a los cristianos, puesto que los cristianos no están bajo la ley sino bajo bondad inmerecida. (Rom. 6:14) El hombre tiene dominio sobre los animales inferiores y, aunque no debe abusar de ese dominio, ya sea matándolos por deporte o haciéndolos sufrir innecesariamente, queda de él determinar exactamente cómo pueden servirle de la mejor manera, muertos o vivos, con sus facultades reproductivas o sin ellas.—Gén. 1:28.

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir