Implantando la Palabra
1 El discípulo Santiago, después de instarnos a desechar toda maldad moral, nos dice que ‘aceptemos con apacibilidad la implantación de la palabra que puede salvar nuestras almas.’ Y eso es lo que queremos hacer, ¿verdad? No solo queremos conocer la palabra, sino conseguir que esté profundamente implantada en nosotros. Entonces haremos como sigue diciendo Santiago, ‘llegaremos a ser hacedores de la palabra, y no solamente oidores.’ De modo que las buenas nuevas que hemos recibido tienen que penetrar más profundamente que en nuestra mente. Tienen que estar en nuestro corazón, para que las apreciemos y actuemos en armonía con ellas.—Sant. 1:21, 22.
2 Teniendo nuestro corazón lleno de las buenas nuevas, podemos implantarlas en otros cuyos corazones estén dispuestos a recibirlas. Cuando hablamos desde el corazón lo hacemos con entusiasmo, con sentimiento, de modo que los que nos escuchen se den cuenta de la importancia de lo que decimos. Sin embargo también hablamos con apacibilidad para que a ellos, también, se les ayude a ‘aceptar con apacibilidad la implantación de la palabra.’
3 Como sabemos por experiencia, el progreso en ‘implantar la palabra’ por lo general es más rápido cuando conducimos con regularidad estudios bíblicos de casa con las personas que muestran interés. Fue maravilloso saber que 1.097.237 de esos estudios bíblicos de casa se condujeron por todo el mundo el año pasado, y los resultados se manifiestan en los grandes aumentos que ha habido en la cantidad de alabadores de Jehová. Este rasgo de nuestro ministerio debe continuar recibiendo énfasis.
4 No es difícil colocar el libro La verdad, y continuaremos haciendo esto durante agosto. Pero también debemos hacer gran hincapié en efectuar revisitas a cada persona que obtenga el libro, con la mira de comenzar estudios bíblicos de casa. Si hay hogares en los cuales usted ha colocado el libro pero no ha revisitado, lo instamos a hacer las revisitas ahora, aunque hayan pasado varios meses. Entonces, al visitar, explíqueles cuidadosamente acerca de nuestro arreglo gratis de estudiar la Biblia por seis meses, y, si es posible, demuéstrelo, comenzando con el primer capítulo. De este modo usted puede ayudarlos a familiarizarse con Jehová, aprender la verdad de su Palabra, y salir libres de Babilonia la Grande mientras todavía hay tiempo.
5 Tal como hicimos durante el año pasado, continuaremos encargándonos de los estudios de manera progresiva. Desde el mismo principio, enseñe a los interesados a preparar sus lecciones. Anímelos a leer otra literatura. Invítelos a las reuniones. Si en seis meses no están dando pasos positivos para responder debidamente a lo que están aprendiendo, entonces usaremos ese tiempo para ayudar a otros. Pero si están respondiendo, será un placer el ayudarlos pacientemente, aun después del bautismo, a llegar a ser siervos maduros de Jehová.
6 Durante agosto, las congregaciones que están trabajando territorio no asignado continuarán dándole su atención especial. Esfuércense por llegar a toda casa. Y entonces continúen mostrando interés personal en los que manifiestan interés. Si pueden hacer revisitas, háganlo; u ofrezcan estudiar con ellos por correo. Ha habido muchos excelentes resultados por hacer esto.
7 Con corazones movidos por la Palabra de Dios, pues, continuaremos adelantando celosamente con nuestra obra, y ‘el Dios de amor y de paz estará con nosotros.’—2 Cor. 13:11.
Aprecie profundamente las cosas sagradas de Jehová.