Entrenamiento “sin una palabra”
1 “Pero, me da pena decir algo en son de consejo cuando trabajo con otro publicador.” Seguramente muchos publicadores maduros se retraen de dar sugerencias a sus compañeros en el ministerio, por no estar seguros de cómo será aceptado el consejo. ¿Ha sentido esto usted?
2 Pero, ¿sabe que puede entrenar sin decir NI UNA PALABRA? Recuerde que la esposa cristiana puede ganar a su esposo incrédulo “sin una palabra” por medio de su conducta cristiana diaria. (1 Ped. 3:1-5) Al trabajar de casa en casa con usted su compañero puede aprender mucho, sea usted hombre, mujer, joven o anciano.
3 Una de las primeras cosas que se observa es el vestido. Su vestido puede influir en su entrenamiento. Si es hombre, al usar un vestido nítido, moderado en cuanto a estilo, dará más peso a su declaración de que es ministro de los testigos de Jehová. En las ciudades especialmente el vestido apropiado incluirá el usar una corbata y en muchas ciudades un saco es de buen gusto para el ministro. Su compañero sabrá también que usted visita la peluquería con regularidad.
4 Si usted es mujer tendrá el debido cuidado de usar una falda de largura correcta para mujeres cristianas. Su compañera va a recibir una lección necesaria en su entrenamiento al observar su manera modesta de vestir. Estrechamente relacionado con el vestido está el maquillaje. El observar que usted es una mujer moderada en este sentido, poniendo más énfasis sobre cualidades espirituales y una personalidad bonita que extremos en el maquillaje animará a su compañera a copiar su buen ejemplo.
5 Su equipo también se pone bajo escrutinio en los momentos cuando su co-ministro le está “juzgando” y aprendiendo. Nota su Biblia, bien usada pero nítida. Su maletín, por más sencillo que sea, refleja su interés en tenerlo presentable. El equipo que su maletín incluye también es testimonio “silencioso” al ministro que le acompaña. El registro de casa en casa, hojas de suscripción, hojas sueltas para las reuniones en el Salón del Reino, papel, lápiz, diferentes libros para colocar, revistas limpias, todo este equipo es observado y grabado en la mente del hermano que trabaja con usted. Cuando usted ofrece la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras y el libro Verdadera paz y seguridad... ¿de qué fuente? en diciembre y entonces en enero la suscripción a La Atalaya es posible que tenga la oportunidad de decirle por qué, explicando que usted usa la oferta del mes.
6 Cuando usted habla, su presentación flexible y su sermón sencillo causará impresión profunda en su compañero que quizás se ha acostumbrado a ofrecer revistas o presentar la literatura sin abrir la Biblia. Pero su presentación sencilla con un texto bíblico cambia todo esto. Él ya ve que no es tan complicado este asunto de dar un sermón en las puertas.
7 Una vez una hermana tuvo una agradable experiencia cuando su compañera en el servicio le preguntaba si siempre llevaba su pequeño hijo de casa en casa. Desde entonces la publicadora observadora ha estado haciendo lo mismo, llevando a su hijo con ella.
8 No solo somos “un espectáculo teatral” al mundo sino también estamos siendo observados por nuestros hermanos compañeros en el ministerio. Pero, ¿no es cierto que nos trae satisfacción cuando podemos entrenar a otros “SIN UNA PALABRA” por nuestro ejemplo correcto? Primeramente por medio de haber aceptado los consejos publicados por la organización teocrática y después al haberlos puesto por obra. Una rica bendición le espera a usted si puede participar en el ENTRENAMIENTO “SIN UNA PALABRA.”