Riquezas y felicidad
● Por lo general se cree que el acumular riquezas hará a uno feliz. Pero vez tras vez esto ha resultado ser una falacia. Una actriz de Hollywood recientemente lo explicó así:
“He experimentado lo que es ser rica y tener todo lo material. Eso de nada vale. Con cada piscina de natación que hay aquí también hay un siquíatra, además de los divorcios e hijos que aborrecen a sus padres.”—Sunday News de Nueva York del 28 de noviembre de 1976.
Las riquezas de por sí jamás producirán felicidad. Se necesita algo más. Hace mucho un sabio identificó lo que falta como “devoción piadosa junto con el bastarse con lo que uno tiene.” Dijo adicionalmente, según se registran sus palabras en la Biblia:
“Porque nada hemos traído al mundo, y tampoco podemos llevarnos cosa alguna. Teniendo, pues, sustento y con qué cubrirnos, estaremos contentos con estas cosas. Sin embargo, los que están determinados a ser ricos caen en tentación y en un lazo y en muchos deseos insensatos y dañinos, que precipitan a los hombres en destrucción y ruina. Porque el amor al dinero es raíz de toda suerte de cosas perjudiciales, y haciendo esfuerzos por realizar este amor algunos han sido descarriados de la fe y se han acribillado con muchos dolores.”—1 Tim. 6:6-10.