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  • Una sombra oscura atraviesa la Tierra

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  • Una sombra oscura atraviesa la Tierra
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  • Nuestro eclipse de 1976
  • Un espectáculo grandioso
  • Una variedad de respuestas
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¡Despertad! 1977
g77 22/9 págs. 16-19

Una sombra oscura atraviesa la Tierra

Por el corresponsal de “¡Despertad!” en Australia

ERA el 28 de mayo de 585 antes de la era común. La escena era un campo de batalla en Asia Menor. Los lidios y medos se hallaban en medio de un conflicto tenaz. De repente, el Sol se oscureció. Aterrados por ese espectáculo, los combatientes prontamente terminaron su guerra de seis años.

¿Qué causó esa oscuridad aparentemente ominosa? Resultó de un eclipse de Sol.

Nuestro eclipse de 1976

Aunque en siglos pasados muchas personas quedaban aterradas cuando un eclipse oscurecía el Sol, millones de personas esperaron con interés la oportunidad de ver un eclipse total de Sol que se había predicho para el 23 de octubre de 1976. La senda de totalidad, una faja que tenía aproximadamente 160 kilómetros de ancho, empezó cerca del lago Victoria del África Central y pasó rápidamente a través del océano Índico, volviendo a encontrar tierra en la punta del sudeste de Australia. Pasó sobre el estado de Victoria, incluso su ciudad capital de Melbourne, donde el pueblo tuvo el privilegio de ver un eclipse total de Sol por primera vez en más de 140 años. Después de atravesar la costa meridional de Nueva Gales del Sur, el espectáculo se acabó en el Pacífico.

Hubo muchos astrónomos profesionales y aficionados en los que experimentaron este acontecimiento celestial a eso de las 4:30 de la tarde el sábado 23 de octubre de 1976. La fase total del espectáculo duró unos tres minutos. Se calcula que dos millones de residentes de Victoria vieron el eclipse en los televisores.

Los testigos de Jehová estaban reunidos en tres lugares para asambleas cristianas ubicados directamente en la senda del eclipse. Puesto que las sesiones de la tarde estaban en progreso al tiempo que ocurrió el eclipse, pocos asambleístas lo vieron directamente. Como la mayoría de los residentes de Australia, lo contemplaron con interés en sus televisores más tarde ese mismo día.

Tal vez usted haya visto un eclipse total de Sol. En tal caso, ¿sabe usted lo que causa ese espectáculo? Quizás haya oído que es peligroso mirarlo directamente. ¿Es cierto? Además, ¿proviene algún beneficio de esos eclipses?

Un espectáculo grandioso

En términos sencillos, un eclipse de Sol ocurre cuando la Luna se interpone directamente entre el Sol y la Tierra. Si la Luna no oculta el Sol enteramente, el eclipse es parcial. Un eclipse total de Sol ocurre cuando la Luna oculta el Sol completamente. Un eclipse parcial de Sol puede ocurrir y ser visto en varios lugares de la Tierra hasta cinco veces al año. Pero rara vez se ve un eclipse total de Sol en cualquier lugar de la Tierra.

La Luna produce dos sombras durante un eclipse total de Sol. Una, que se llama la umbra, es la sombra total y tiene la forma de un cono puntiagudo. La punta, o vértice, está en la superficie de la Tierra y la base del cono es la circunferencia de la Luna. La sombra menor o media sombra, que se llama la penumbra, se extiende en la dirección opuesta. Su extremo pequeño se dirige hacia la Luna. La penumbra se ensancha en una zona mucho mayor que la umbra a cada lado de ella. En esta zona, los observadores ven un eclipse parcial, puesto que la Luna traslapa al Sol solo a grados variados.

¿Por qué es tan fascinante un eclipse total de Sol? Bueno, durante la primera hora y cuarto muy poco ocurre, mientras la sombra de la Luna se mueve lentamente a través de la haz del Sol, que gradualmente asume la forma de un creciente de luna. Sin embargo, a medida que este creciente adelgaza, empieza a oscurecer. ¡Entonces, de repente, el Sol desaparece! El cielo azul se “desvanece,” la temperatura baja, la oscuridad desciende, las estrellas aparecen y empieza la fase total del eclipse. ¡De nuevo, la Luna ha borrado el Sol!

Enseguida se puede ver la corona, la envoltura gaseosa exterior del Sol, con su aspecto de un hermoso nimbo blanco unas dos veces mayor que el tamaño del Sol y cercando el disco oscuro de la Luna. ¡Realmente es un espectáculo inolvidable! Por unos cuantos segundos, al principio y al fin de la fase total, parece que hay una sarta de pequeñitas cuentas alrededor del Sol. La luz brillando por los valles de la Luna causa este fenómeno. A estos puntos relumbrantes de luz se les llama el rosario de Baily, habiendo recibido su nombre del astrónomo inglés Francis Baily que registró su aparición durante un eclipse de 1836. Aunque disminuye muchísimo el resplandor del cielo diurno, la apariencia general del paisaje se asemeja mucho a lo que se observa bajo una Luna llena. No está completamente oscuro.

Más o menos al momento de la totalidad, cuando la Luna oculta la brillante haz o fotosfera del Sol, la cromosfera, o esfera de color del Sol, de color rojo rosado, relampaguea por solo unos cuantos segundos y se asemeja a un arco alrededor de la Luna oscura. Algunos científicos llaman esto el “espectro relámpago” y se debe a una envoltura enrarecida de gas luminoso situada inmediatamente por encima de la brillante superficie del Sol. Un segundo relampagueo ocurre al fin de la totalidad. Justamente antes y después de la totalidad, cuando solo está visible un creciente delgado del Sol, bandas de luz y sombra aparecen en el suelo y en las paredes de los edificios. Ondulan como olas y van moviéndose en línea perpendicular a su longitud.

¡De repente, el Sol vuelve a aparecer como un delgado creciente! La luz del día vuelve como lo hace en el alba. El creciente del Sol se ensancha gradualmente hasta que, después de una hora y cuarto, la Luna se aparta del disco del Sol. Así vuelve la plena luz del día.

Una variedad de respuestas

Es tan pavoroso el eclipse solar que algunos pueblos primitivos creen que es el desmayo del Sol, o hasta su enfermedad y muerte. Ciertos esquimales y habitantes de las islas Aleutianas han creído que durante este suceso el Sol y la Luna salen de sus posiciones normales a fin de obtener una vista mejor de los asuntos en la Tierra. ¡En Tahití algunos han explicado que los eclipses solares son el apareamiento del Sol y la Luna, que supuestamente produce las estrellas!

En el campo de la realidad, este oscurecimiento temporáneo del Sol también perturba a las aves y animales. Durante la semioscuridad del eclipse, las abejas dejan de zumbar y los pájaros de gorjear, se ha sabido de gallinas que se van a dormir y de ganado que se posa cómodamente en el campo como lo haría a la puesta del Sol. ‘Se acuestan’ por una “noche” que dura posiblemente tres minutos.

Mirando un eclipse solar exentos de peligro

Por varias semanas antes del eclipse solar del 23 de octubre de 1976 en el sudeste de Australia, se le advirtió a la gente de continuo por todo medio noticiero que no mirara a este espectáculo directamente. Se les animó a todos los que vivieran a lo largo de la senda del eclipse a quedarse en la casa y contemplar el fenómeno en sus televisores más bien que correr el riesgo de dañarse los ojos permanentemente ya sea mirando al eclipse mismo o fotografiándolo. Se establecieron comités especiales para advertir a todos los interesados respecto a los peligros envueltos en observar este suceso celestial.

Durante la totalidad (los minutos en que el Sol está completamente borrado), hay menor probabilidad de dañarse uno los ojos. Pero durante la media hora antes o después de la totalidad, les resultaría en daño irreparable a los ojos de uno si mirara al eclipse directamente o lo fotografiara sin un lente protector especial.

Conocimiento obtenido de eclipses solares

Se han recogido muchos hechos interesantes de los eclipses solares. Por ejemplo, considere la corona del Sol. Durante un eclipse total se le ve como una niebla blancuzca de luz que sale erráticamente del ahora oscurecido disco solar. ¡Realmente una vista hermosa tras el fondo del cielo azul oscuro! Los científicos miden la polarización de las partículas en las zonas interior y exterior de la corona para determinar dónde termina la atmósfera del Sol y empiezan las partículas de luz refractada del espacio sideral.

Las protuberancias de color de rosa, o sea, las inmensas llamas de gases incandescentes que se extienden del Sol por miles de kilómetros han provisto otra información. Estas protuberancias llameantes impresionan a uno con el papel beneficioso que el Sol desempeña... el de un fuego ardiente que emite su calor radiante al espacio frío que lo rodea. En 1868, al examinar estas llamas solares, se descubrió por primera vez el anteriormente desconocido elemento químico helio.

La exacta alineación del Sol, la Luna y la Tierra al tiempo de un eclipse total de Sol también hace posible que lleguen a medidas exactas de la superficie de la Tierra dentro de la zona general abarcada por un eclipse. Entonces se hace una comprobación con las medidas aceptas. Sin embargo, esta información carece de utilidad debido a que los eclipses totales de Sol ocurren raras veces y en diversos lugares.

El eclipse total de Sol más largo de tiempos modernos ocurrió en las Filipinas el 20 de junio de 1955. Duró por 7 minutos y 7,7 segundos. Pero esto fue un tiempo corto cuando se compara con las tres horas de la oscuridad que cayó sobre Jerusalén desde alrededor del mediodía hasta las 3 p.m. el día en que murió Jesucristo, el viernes 1 de abril de 33 E.C. El relato del evangelio de Lucas indica que cayó la oscuridad “porque falló la luz del sol.” (Luc. 23:44-46) Sin embargo, aquella oscuridad no pudiera haber ocurrido simplemente debido a un eclipse solar puesto que ocurrió al tiempo de la Pascua, cuando la Luna está llena. Los eclipses solares solo pueden acontecer al tiempo de la Luna nueva. Este acontecimiento singular y extraordinario asociado con la muerte de Jesús demuestra aptamente el poder de Jehová Dios sobre la luz del Sol.

A Dios también debe atribuírsele el crédito por el pavoroso espectáculo del eclipse solar. Él fue Aquel que creó el Sol, la Luna y las estrellas, “el cielo y las cosas que hay en él.” (Rev. 10:6) Jehová también es responsable de las leyes por las cuales operan los cuerpos celestes. Muchas personas recuerdan eso cuando consideran el pavoroso eclipse solar que arroja una sombra oscura a través de la Tierra.

[Ilustración de la página 18]

Etapas del eclipse

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