“La bolsa de la vida”
■ La discreta Abigaíl le dijo a David: “Cuando se levante un hombre para ir en seguimiento de ti y para buscar tu alma, el alma de mi señor ciertamente resultará estar envuelta en la bolsa de la vida con Jehová.” (1 Sam. 25:29) En la antigüedad, se envolvían las cosas de valor en bolsas para protegerlas. David, cual posesión preciosa, estaría bajo el cuidado protector de Jehová cuando lo amenazaran sus enemigos. Como si estuviera en una bolsa, la vida de David como persona estaría en las manos de Dios.