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¡Despertad! 1978
g78 22/4 págs. 6-11

¿Qué hay de la superioridad racial?

¿QUÉ opina usted sobre las razas? ¿Considera usted a los blancos innatamente superiores a los negros? Prescindiendo de su respuesta verbal, ¿qué revelan sus actitudes y acciones?

A menudo la gente dice que no tiene prejuicios raciales. Pero, la realidad es que los puntos de vista racistas han sido dominantes por largo tiempo. Por eso el punto de vista persiste entre muchos de que los negros son innatamente inferiores a los blancos y que nacieron para ocupar una condición inferior.

¿De dónde se originaron estas ideas? ¿A qué se debe que persistan tanto?

El papel de la religión

La idea moderna de la superioridad innata de los blancos se originó con la conquista y esclavitud de los negros africanos. Se hizo necesario justificar la trata de esclavos, especialmente porque los participantes afirmaban ser cristianos. Charles de Secondat Montesquieu, jurista y filósofo político francés, explicó cómo razonaban los traficantes: “Nos es imposible suponer que estas criaturas sean hombres, porque, si se concediera que son hombres, seguiría la sospecha de que nosotros mismos no somos cristianos.”

También en los Estados Unidos los que decían ser cristianos precisaban justificación de la esclavitud, porque la economía de los cultivadores de algodón del Sur estaba basada en la esclavitud de los negros. Así, un historiador dice:

“El Sur escudriñó las Escrituras en busca de apoyo bíblico para la práctica. . . . El Sur arguyó de continuo que la Biblia aprobaba la esclavitud y que, de hecho, mandaba que la hubiese, y que era una institución divinamente asignada y especialmente beneficiosa para los negros.”—“A Complete History of the United States,” por Clement Wood, págs. 217, 337.

Las iglesias llevaron la delantera en la justificación de la esclavitud. Se enseñó que los negros son una raza maldita, lo cual explica por qué su piel es negra. En 1844 los metodistas se dividieron en Norte y Sur debido a la esclavitud. Los bautistas se dividieron en 1845, y la iglesia presbiteriana más o menos al mismo tiempo. Tan recientemente como 1902 una casa editorial de Biblias en Saint Louis publicó el libro de amplia circulación “The Negro a Beast” or “In the Image of God.” Contiene un capítulo intitulado “Convencedora evidencia bíblica y científica de que el negro no es de la familia humana.”

Se ve pues que con la aprobación de la iglesia se consideraba a los negros innatamente inferiores a los blancos. The Encyclopædia Britannica se lamentó: “Fue desafortunado para los africanos que en los EE. UU. hayan sido esclavizados por cristianos, quienes, no pudiendo reconciliar sus creencias con la práctica de la esclavitud, forjaron un nuevo concepto del negro y llegaron a considerarlo como propiedad, no como un ser humano que tuviera derechos y libertades.”—Tomo 16, pág. 200D, 1971.

Pero las iglesias no fueron las únicas que defendieron estos puntos de vista. También lo hicieron los filósofos y científicos.

Otros defienden la superioridad de los blancos

Alrededor de 1830 los filósofos del Sur de los EE. UU. formularon los principios respecto a la inigualdad natural del hombre, un concepto ya aceptado por la mayoría de los sueños. Y Josiah C. Nott, el antropólogo físico principal de ese tiempo en los EE. UU., se esforzó por suministrar apoyo biológico a este concepto. Algunos adoptaron el punto de vista de que las diferentes razas evolucionaron separadamente, y que los negros están más estrechamente relacionados con los monos. The Encyclopædia Britannica, después de mencionar ciertas características como evidencia, comenta: “Parece que el negro está en un nivel evolucionario inferior al del hombre blanco, y que está más estrechamente relacionado con antropoides superiores.”—Tomo 19, 1911, pág. 344.

Hoy día algunos sostienen puntos de vista parecidos, entre ellos el profesor Carleton S. Coon, anterior presidente de la Asociación Americana de Antropólogos Físicos. Él afirma que cinco razas de hombres, aisladas unas de otras, “evolucionaron independientemente y llegaron a ser el Homo sapiens no una vez, sino cinco veces.” En los EE. UU., en un programa nacional difundido por la televisión, un vocero afirmó que Coon “presenta evidencia y sostiene positivamente que la raza negra está 200.000 años detrás de la raza blanca en la escalera de la evolución.”

Estas opiniones, abrigadas por largo tiempo acerca de los negros, nos ayudan a entender cómo podían decir los estadounidenses primitivos que ‘todos los hombres fueron creados iguales,’ y al mismo tiempo aprobar una forma de esclavitud en la cual se consideraba que ciertas personas eran inferiores. The Sociology of Social Problems, tercera edición, por Paul B. Horton y Gerald R. Leslie, explica:

“El aforismo ‘todos los hombres son creados iguales’ no aplicaba a los negros, puesto que ellos eran ‘propiedad,’ no hombres. Se emplearon con éxito las teorías de una maldición bíblica de Cam, de evoluciones incompletas o separadas, del determinismo geográfico y de las evidencias provistas por los exámenes de inteligencia para justificar el trato de los negros como inferiores. Mientras se creían estas nociones —y la mayoría de la gente las creía— no había contradicción entre los ideales democráticos y la práctica de la discriminación.”

Probablemente pocas personas afirman hoy que los negros ‘no son hombres.’ No obstante, muchos todavía creen que son innatamente inferiores. La proporción más elevada de ilegitimidad y de delitos entre ellos, y su estado económico y social más bajo, y, especialmente, su promedio inferior en los exámenes de IQ, se consideran como “prueba” de su inferioridad biológica. Pero ¿es esta evidencia realmente prueba de inferioridad biológica? ¿Hay circunstancias que expliquen los defectos o insuficiencias de los negros, como promedio, cuando se comparan con los blancos?

Origen de los negros de los EE. UU.

Muchas personas de los EE. UU. creen que los antecesores africanos de los negros estadounidenses fueron salvajes, faltos de cultura o civilización. Creen que fueron mentalmente entorpecidos, pueriles, incapaces de lograr tareas complejas o de desarrollar una civilización avanzada. Pero la realidad es todo lo contrario, como comenta The World Book Encyclopedia:

“Hace centenares de años existían reinos negros altamente desarrollados en varias partes del África. . . . Algunos de los reyes negros y sus nobles vivían en gran riqueza y esplendor. A veces sus capitales llegaron a ser centros de cultura y comercio. Entre 1200 y 1600, una universidad negro-arábica floreció en Timbuktu en África Occidental y se hizo famosa por toda España, África del Norte y el Medio Oriente.”—Tomo 14, 1973, págs. 106, 107.

Claro, la cultura africana es muy diferente de la europea, así como la cultura oriental también es diferente. Y, desafortunadamente, algunos igualan la diferencia con la inferioridad. No obstante, al mismo tiempo no se puede negar que en siglos recientes el desarrollo de la vida y cultura africanas fue atajado. Hubo falta de progreso, un retroceso. Pero, ¿por qué?

Se debió, en gran manera, a la trata de esclavos, acerca de la cual The Encyclopædia Americana dijo: “Desorganizó la cultura e industria negras, detuvo el desarrollo del arte, derribó gobiernos y fue la causa del estancamiento moderno de la cultura que ha marcado al continente negro desde 1600.”—Tomo 20, 1927, pág. 47.

La magnitud de la trata de esclavos, y el impacto que tuvo en la sociedad africana, aturde los sentidos. Según The New Encyclopædia Britannica de 1976: “Cálculos de los esclavos enviados al otro lado del Atlántico varían de 30.000.000 a 100.000.000.” Los cálculos más moderados fijan la cifra en “aproximadamente 15 millones.” Pero aun los cálculos más bajos son horripilantes, especialmente cuando se considera cuántos perdieron la vida.

Es preciso reconocer que los africanos fueron capturados directamente por los blancos y también en guerras y ataques por los negros, y que éstos vendieron a sus paisanos a los negreros blancos. Prescindiendo de quién haya cargado con la responsabilidad inicial, a los cautivos entonces se les hacía marchar a la costa y se les detenía en estaciones de embarcación. Entonces, encadenados de dos en dos, los atestaban en las bodegas de los barcos en un espacio que solo les permitía estar acostados. Allí pasaban la mayor parte de los 50 días que duraba el viaje atlántico sin luz o aire fresco. Se calcula que un tercio de los prisioneros morían antes de embarcar, y otro tercio en el viaje.

Fue poco después de 1500 que llevaron los primeros esclavos a las Antillas y América del Sur para trabajar en las minas y plantaciones. En 1619 un barco negrero holandés entregó los primeros negros a América del Norte, no como esclavos, sino como siervos obligados por contrato. Sin embargo, unos años después la esclavitud quedó plenamente establecida, y, con el tiempo, hubo unos cuatro millones de esclavos negros en EE. UU.

Efecto de la esclavitud

Acostumbraban a entregar a los africanos primero a las Antillas, donde los habituaban o adiestraban como esclavos antes de embarcarlos a los EE. UU. Separaban a las personas del mismo origen tribual, a fin de evitar levantamientos en masa. Hasta desbarataban a las familias, y los traficantes o nuevos amos daban nombres nuevos a los esclavos. Se tenía como mira hacer a los negros serviciales, obedientes. El procedimiento torció su personalidad y suprimió su mentalidad, y, en muchos casos los negros, dándose cuenta de la futilidad de resistir, empezaron a comportarse como si fueran inferiores.

Se formularon códigos de esclavos para asegurar la completa subordinación de ellos. The Encyclopedia Americana dice:

“Los esclavos no podían ser dueños de propiedad, poseer armas de fuego, participar en comercio, salir de la plantación sin el permiso de sus dueños, testificar en los tribunales salvo contra otros negros, hacer contratos, aprender a leer y escribir o celebrar reuniones sin que estuvieran presentes personas blancas. . . . el que un blanco asesinara o violara a un esclavo o esclava o a un negro libre no se consideraba como ofensa grave.”—Tomo 20, 1959, pág. 67.

En la mayoría de los estados que tenían esclavos, el castigo por enseñar a un negro a leer o escribir constaba de una multa, un azotamiento o prisión.

En 1808 los EE. UU. hicieron ilegal la trata de esclavos. Pero, a pesar de la ley, el tráfico continuó puesto que había mayor demanda de esclavos que nunca. Esto llevó a una perversión pésima... la producción de esclavos para vender. The Encyclopedia Americana explica:

“Se desarrolló una lucrativa trata de esclavos doméstica en grande escala, y estaban asociados con ella algunos de los lances más crueles y despiadados del sistema de esclavos, como, por ejemplo, el engendramiento de esclavos en los estados más viejos para venderlos más hacia el Sur, y el constante rompimiento de lazos familiares por medio de vender a los miembros separadamente.”—Tomo 20, 1959, pág. 67.

Sí, el punto de vista de que los negros ‘no eran hombres’ llevó a la práctica de engendrarlos y venderlos, como se acostumbra a hacer con el ganado. Entonces, de repente, en 1865, la esclavitud fue cabalmente abolida en los Estados Unidos. No obstante, las actitudes persistieron, y a los negros se les mantenía “en su lugar” —el de estar subordinados a los blancos— por leyes de segregación y otros medios.

Un importante instrumento de control fue el linchar por medio de la horca. Entre 1890 y 1900 hubo, como promedio, 166 linchamientos anuales. Además, como relata The Encyclopedia Americana: “Siguió tolerándose la explotación sexual de las negras por los blancos. Los negros recibían trato groseramente injusto y discriminatorio a manos de la policía y frecuentemente en los tribunales.”—Tomo 20, 1959, pág. 70.

¿Hablamos aquí de historia antigua? No, los abuelos de muchos negros que viven hoy fueron esclavos. Y personas que viven hoy han oído de los labios de anteriores esclavos cómo era la vida entonces. En los EE. UU., aun después de 1950, los medios noticieros en conjunto representaban a los negros como inferiores... invariablemente el papel que desempeñaban era el de siervos de los blancos.

Sin embargo, por lo general, a los negros no se les veía, ni en las revistas, ni en la televisión, ni en los periódicos, salvo en relatos de crímenes. Por todas partes fueron objeto de discriminación: recibían instrucción escolar de segunda categoría y se les excluía de ciertas clases de empleo y de muchos otros beneficios de los cuales los blancos disfrutaban. En casi todo lugar las puertas de oportunidad se les cerraban, lo cual robaba a muchos de ellos de toda esperanza de mejorar su vida.

En vista de estas circunstancias, ¿realmente puede esperarse que, como promedio, los negros luzcan al igual que los blancos en logros educativos y de otra clase? ¿Sería justo juzgarlos inferiores como raza porque no están a la altura de cierta norma? ¿Qué sucede cuando se les dan las oportunidades?

Oportunidad y motivo

Antes de 1947, los negros estaban excluidos de las grandes ligas de béisbol en los EE. UU. Ese año, a medida que se intensificaban las tensiones raciales, se le permitió a un negro jugar. Pronto los negros empezaron a sobresalir en el béisbol. En 1971, el año en que los Piratas de Pittsburgo fueron los campeones mundiales, hubo un juego en que los nueve jugadores en el campo fueron negros. Hay una situación parecida en otros deportes, por lo cual el Times de Nueva York dijo el año pasado: “El baloncesto profesional es virtualmente un juego negro.”

¿Qué significa esto? ¿Qué biológicamente los negros son físicamente superiores a los blancos? O ¿significa que cuando se les da la oportunidad, la instrucción y el motivo los negros prosperan? Obviamente lo último. Las razas no nacen con el talento de ser jugadores de pelota, músicos, científicos, profesores universitarios y así por el estilo. Hay que aprender estas cosas.

Es incorrecto estereotipar las razas y decir que una raza es naturalmente torpe y lenta, otra agresiva y militante, todavía otra dócil y servicial y así por el estilo. Las razas son de la manera que son especialmente debido a la educación y entrenamiento que reciben y el motivo que tienen para obrar. Por ejemplo, muchos a menudo caracterizaban a los chinos como naturalmente dóciles y serviciales. Pero con la educación diferente y el motivo de obrar que han recibido durante las últimas décadas bajo el comunismo, pocos los caracterizarían hoy de esa manera.

No obstante, persiste el punto de vista de que naturalmente, biológicamente, los negros como raza son mentalmente más lentos y menos inteligentes que los blancos. ¿Hay evidencia fidedigna de que esto sea cierto?

[Ilustración de la página 9]

Estas son traducciones de anuncios publicados en inglés.

[Reconocimiento]

Cortesía del Centro Schomburg para la Investigación de la Cultura Negra, Fundaciones Astor, Lenox y Tilden de La Biblioteca Pública de Nueva York

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