Una educación que redunda en magníficos beneficios
SE HA dado verdadero impulso a la educación en África, especialmente a la de los jóvenes. Algunas naciones de ese continente, según se informa, dedican gran parte de sus recursos a ella. Pero se necesita algo más. Al notar que muchas personas con buena instrucción académica estaban vagando por las calles por falta de empleo, un alcalde negro de una ciudad grande del África Oriental presentó la siguiente súplica: “Tenemos que comenzar a dar a nuestros jóvenes instrucción práctica que los prepare y los eduque para las realidades de la vida.”
Entre otras cosas, tal instrucción debe ayudarles a conocer lo que es verdaderamente valioso en la vida y a sentirse convencidos de ello. Pero, ¿qué libro de texto puede hacer esto?
“Guía suprema en el arte de vivir”
Por centenares de años la Biblia ha sido el libro más distribuido en África. Con relación a éste, el autor Tomás Tiplady escribió en una ocasión: “De todos los grandes libros, el sentido común de la humanidad ha declarado que la Biblia es la guía suprema en el arte de vivir.” ¿Por qué es tan sobresaliente a ese respecto? La Biblia misma explica que es la Palabra de Dios.
Es un libro que trata acerca de la vida. A medida que usted la lea hallará que la Biblia está llena de personas de la vida real, y verá cómo algunas de éstas formaron vidas felices y por qué otras fracasaron. Mientras más lea la Biblia, más claro se le hará qué cosas valen la pena y qué cosas no. Como lo expresó un lector agradecido, usted encontrará “la llave a su propio corazón, a su propia felicidad, y a su propio deber.”
Por décadas, los testigos de Jehová han estado ayudando a millones de personas en África y a través de la Tierra a aplicar los principios bíblicos en la vida. Los resultados han sido significativos. A continuación se suministran solamente unos cuantos ejemplos de lo que tal educación puede lograr. A medida que lea, pregúntese: ¿Qué sucedería si todas las personas de África y de todo el mundo se dejaran llevar por tales normas?
Conservando la unidad familiar
“Bueno, ¿qué decide? El ascenso significa que usted ganará mucho más dinero. Usted es un trabajador honrado y confiable, y merece el aumento.” Así habló el director de una red de ferrocarriles africana a un esposo que era padre de cuatro hijos. La decisión parecía fácil. Sin embargo, había una traba... el nuevo empleo requeriría que él permaneciera lejos de su familia por largos espacios de tiempo.
El hombre, que había estudiado la Biblia con los testigos de Jehová por algún tiempo, contestó: “Lo siento, pero no puedo aceptar su oferta. Sucede que quiero mucho a mi familia y no puedo darme el lujo de separarme de ella de esta manera.” Los directores apenas podían creer lo que estaban oyendo. Sin embargo, quedaron impresionados por las cosas a las cuales este hombre daba la prioridad en la vida, y le concedieron su petición de continuar trabajando cerca de su hogar.
¿Tomó él la decisión correcta? El hombre ha sido recompensado con una familia que es sobresaliente en la comunidad por su afecto, unidad y felicidad. La buena conducta de sus hijos es el tema del vecindario. Estas son cosas que el dinero no puede comprar.
La honradez lleva a la dignidad
“Estimado señor:
“Le agradecemos su carta y acusamos recibo del reloj de clínica que usted nos devolvió. Nos complace saber que la religión a la cual usted se ha convertido enseña que el robar está en contra de la ley de Jehová Dios.”
Esta carta, dirigida a una persona que recientemente se había hecho Testigo, fue el resultado de unos cambios extraordinarios. El que recibió la carta había sido en un tiempo fumador inveterado de marihuana, llevaba una vida de depravación sexual y practicaba el robo y otros delitos. Su mente quedó tan afectada por este modo de vivir que tuvo que ser admitido en un hospital para dementes. Después de varias semanas de recibir atención allí, no había sanado; de modo que lo declararon loco y lo enviaron a casa.
Poco después este hombre comenzó a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová en su aldea nigeriana. La educación que recibió le ayudó a cambiar de vida. Su salud mental fue mejorando, pues ahora pudo enfrentarse a las “realidades de la vida.” Los aldeanos estaban asombrados y creían que aquello había sido un milagro. El hombre explicó que “fue obra de la Biblia con la bendición de Dios y la ayuda de Su pueblo.” Logró conseguir empleo para mantenerse. Al recordar que le había robado el reloj a su antiguo patrón, se lo devolvió. Por primera vez en su vida tenía dignidad.—Efe. 4:28.
Libres de pretensiones de ser ricos
En Namibia, en el suroeste de África, un testigo de Jehová, padre de familia, perdió su empleo. Su familia estaba acostumbrada a un alto nivel de vida, pero ahora el único empleo que estaba disponible pagaba mucho menos que el que él había tenido anteriormente. Después de tratar el asunto con su esposa, aceptó el empleo y decidió hacer lo mejor que pudiera.
En vez de aparentar que todavía tenían bastante dinero y tratar de mantener su nivel de vida anterior, él y su familia empezaron a reducir sus gastos. Se mudaron a una destartalada construcción que se había usado con relación a un ferrocarril. Sin embargo, después de haberla pintado y haberle hecho reparaciones menores, tuvieron una casa cuyo alquiler podían pagar con comodidad. Su jardín producía casi todos los vegetales que ellos consumían y la pesca también les ayudó a gastar poco dinero en alimentos. Lo que la esposa tejía casi cubría el costo de la ropa para la familia. Era un modo de vivir humilde, pero la familia estaba contenta con tener lo necesario.—1 Tim. 6:7, 8.
La diligencia y honradez del Testigo no quedaron sin ser notadas, y en un año le aumentaron el salario. Con el tiempo, su buena reputación hasta resultó en que otros patronos le ofrecieran empleo.
Cómo se las arreglan
La Biblia no recomienda la pobreza. (Pro. 30:8, 9) Pero en algunos casos es muy poco lo que se pudiera hacer para cambiar de situación en la vida sin sacrificar algún principio importante. Bajo tales circunstancias, ¿cómo puede alguien tener éxito en sentido económico sin hacer que su vida gire en torno al dinero?
Por su parte, la Biblia ayuda a las personas a evitar malos hábitos, como el juego por dinero (que ha costado a muchos trabajadores todo su salario), la toxicomanía, el fumar, la inmoralidad sexual y la borrachera. ¡El evitar estas cosas no solo permite mantener una buena conciencia, sino que también es una ayuda segura para el bolsillo!—1 Cor. 6:9, 10; 2 Cor. 7:1.
Los que verdaderamente aplican los principios bíblicos se benefician también porque son parte de una asociación de hermanos que genuinamente se aman unos a otros. (Juan 13:35; 1 Juan 3:17, 18) Por ejemplo, en Ghana un testigo de Jehová fue despedido temporalmente de su empleo. El tenía que mantener a su hija y a su esposa que estaba encinta. En una reunión de congregación casualmente mencionó su problema a otro Testigo. Este Testigo no solo le dio ánimo, sino que le enseñó a confeccionar un tipo de jabón doméstico que él podría vender. Esto le proporcionó alivio al Testigo desempleado hasta que su antiguo patrón le pidió que regresara al trabajo.
Para aplicar el consejo bíblico de ‘no deber nada a nadie excepto amor,’ los Testigos también aprenden a ser cuidadosos al hacer su presupuesto. (Rom. 13:8) Un ministro viajante que visita los hogares de muchos testigos de Jehová describe cómo una pareja africana se las arregla respecto a este asunto: ‘Todos los meses el esposo y la esposa equilibran gastos y entradas. El pone su salario sobre la mesa y entonces separa diferentes cantidades para los diferentes gastos y necesidades. El esposo se asegura de pagar sus cuentas primero, mientras tiene dinero, y no espera hasta fines del mes, cuando posiblemente no lo tenga.’
Esta pareja evita el comprar a crédito, y con buena razón. En primer lugar, uno por lo general paga un precio considerablemente más alto por el artículo que compra a crédito. Además, con sentido verdaderamente práctico la Biblia dice: “El que toma prestado es siervo de aquel que presta.” (Pro. 22:7, Versión Moderna) ¿Quién desea ser el siervo de otro hombre? La vida es mucho más sencilla cuando uno ahorra su dinero hasta que puede comprar el artículo sin entrar en deudas por él. Por supuesto, hay ocasiones en que uno quizás necesite algo con urgencia y el crédito sea la única solución, pero si esto sucede a menudo, ¿se trata de una necesidad, o de un intenso deseo de algo?—Ecl. 6:9.
¡Un futuro magnífico está cerca!
La Biblia presenta una esperanza vívida para el futuro cercano, y el aprender acerca de esto ayuda a las personas a enfrentarse a los problemas actuales, porque saben que éstos son pasajeros. El último libro de la Biblia, Revelación o Apocalipsis, nos revela sucesos que afectarán no solo a África, sino a todo el mundo.
Los capítulos 19 (Rev 19 versículos 11-21) y 20 (Rev 20 versículos 1-3) describen el fin violento que espera a los individuos inicuos, tanto visibles como invisibles, que rehúsan vivir según los principios justos. En Revelación 21:3, 4 se muestra que Dios está personalmente interesado en nuestra Tierra. Allí dice: “Oí una voz fuerte desde el trono decir: ‘¡Mira! La tienda de Dios está con la humanidad, y él residirá con ellos, y ellos serán sus pueblos. Y Dios mismo estará con ellos. Y él limpiará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no será más, ni existirá ya más lamento ni clamor ni dolor. Las cosas anteriores han pasado.’”
Piense en esto: ¡Las enfermedades, que constituyen un problema diario para casi toda persona, habrán desaparecido para siempre! ¡Ya no habrá niños enfermizos, ni enfermedades temibles que agoten las fuerzas del cuerpo, ni dolor agudo!
Las lágrimas que resultan de la frustración, la desilusión y el pesar desaparecerán a medida que las condiciones que las causan cambien o sean removidas. Puesto que las personas que son voluntariosamente inicuas habrán sido destruidas por las fuerzas angelicales de Dios, quedarán eliminados los ladrones, los asesinos, los mentirosos y otros que hacen insegura la vida. Nadie se preocupará pensando en que un ladrón puede llevarle sus posesiones. Las personas podrán tener su propia heredad y disfrutar de ella en seguridad.
¿Le parece bueno esto a usted? ¿Le gustaría aprender más acerca de cómo aplicar los principios bíblicos de manera que pueda beneficiarse de ello ahora y en el futuro? Póngase en comunicación con los testigos de Jehová y con gusto ellos le ayudarán, gratuitamente.
[Ilustración en la página 25]
La educación bíblica ayuda a las familias a recuperar los valores perdidos