¡Puede haber una mejor clase de vida ahora!
MUCHAS personas piensan que la Biblia ofrece una mejor clase de vida solo en los cielos después de la muerte, y que la vida presente está destinada a ser como es. Sin embargo, los publicadores de esta revista reciben cartas de todas partes del mundo que muestran que a miles de personas se les ha ayudado a obtener una mejor clase de vida ahora mismo por medio de seguir lo que la Biblia dice. Considere los siguientes ejemplos de la vida real.
Mejor equilibrio mental
Hay una plaga de enfermedades mentales extendiéndose sobre la Tierra. Por ejemplo, según cifras oficiales, de cada tres alemanes de la República Federal, uno ha sufrido, o está sufriendo actualmente, de algún desorden mental. Mundialmente, 1.000 personas se suicidan cada día.
En los Estados Unidos, donde, según se cree, la cuarta parte de la población sufre de desequilibrio mental, una mujer joven de la ciudad de Nueva York se quejó de la siguiente forma: “Mi vida carecía de significado. Por esta razón, comencé a beber mucho y a participar en fiestas desordenadas y estrepitosas.” Eso, sin embargo, en vez de darle la felicidad que tan desesperadamente buscaba, la llevó a esta condición, según añade ella: “Quedé tan disgustada con la vida que decidí suicidarme. Con este fin, obtuve un frasco de barbitúricos para mezclarlos con alcohol.”
La joven nos informa: “Esa noche oré a Dios y luego me dije que, si Dios realmente existía, él debería impedir que yo me quitara la vida. En ese preciso momento alguien tocó a la puerta. Una señora ofreció venir a estudiar la Biblia conmigo.”
“Lo primero que hice,” admitió ella, “fue tirarle la puerta a la cara. Sin embargo, cuando pensé en lo que había hecho, corrí tras ella y le pedí que no me dejara. Entonces hice arreglos para estudiar la Biblia con ella, una testigo de Jehová.”
De la Biblia la joven aprendió acerca de un Creador que se interesa personalmente en cada uno de nosotros. ‘Echen sobre [Dios] toda su inquietud,’ dice la Biblia, “porque él se interesa por ustedes.” (1 Ped. 5:7) Él promete que pronto quitará de la Tierra la iniquidad y establecerá una “nueva tierra” en la cual habrá “abundancia de paz.”—2 Ped. 3:13; Sal. 37:10, 11.
El saber estas cosas dio significado a la vida de esta joven. Ahora tenía dignidad, y esperanza en cuanto al futuro. Después de haber estudiado por dos años, ella dijo: “Ahora mi vida está llena de verdadero gozo y significado.” No todo el mundo recibe una respuesta tan rápida a su oración como esta joven. Pero Dios “no está muy lejos de cada uno” que acude a él con el deseo de conocer Su voluntad, y él sí contesta tales súplicas sinceras por ayuda.—Hech. 17:26, 27.
Enfrentándose a la mala salud
“Yo había sido de salud débil toda la vida,” escribió un hombre de edad avanzada de Suecia que había sobrevivido a la gripe española, había sido sometido a varias operaciones y en la actualidad sufre de un defecto en un ojo.
“El punto de viraje en cuanto a saber enfrentarme a la mala salud,” dijo alegremente este anciano, “vino cuando solo tenía 22 años de edad. La revista de ustedes [¡Despertad!] me ayudó a acudir a la Biblia.” De la Biblia, este hombre de edad avanzada aprendió que Dios pronto removerá para siempre de la Tierra todas las enfermedades. (Rev. 21:1, 3, 4) “Desde entonces en adelante,” continuó relatando el anciano, “he experimentado años de felicidad, pues a pesar de mis muchos impedimentos físicos tengo una verdadera esperanza para el futuro. Algo más que he logrado es ayudar a muchas otras personas a obtener el mismo punto de vista brillante que yo tengo de la vida.” Miles de casos parecidos prueban que la Biblia puede llenar de esperanza y actividades significativas la vida de las personas. Esto realmente les ayuda a aguantar las enfermedades con gozo.
Mejores hábitos
Se ha dicho que ‘al principio un hábito puede parecerse a una telaraña, algo de lo cual uno puede librarse fácilmente, pero que, si no se le hace frente, pronto puede atarnos con cadenas de acero.’ ¡Cuántas personas se ven impedidas de vivir una mejor clase de vida debido a tales “cadenas de acero,” malos hábitos, tales como la borrachera, el abuso de las drogas, la glotonería, el robo y otros!
Un joven de España nos relata lo siguiente: “Estaba en la lista de las personas a quienes buscaban 18 centros policíacos.” Entre sus malos hábitos estaban las pendencias callejeras, el abuso de las drogas y la borrachera; también falsificaba cheques y participaba en juegos de azar ilegales y en el tráfico de drogas. Constantemente se hallaba en la cárcel.
Leyó una de las publicaciones bíblicas de los testigos de Jehová y comprendió que tenía que cambiar si quería ser más feliz. “Pero no se me hacía fácil cambiar. Solo deseaba estar de parrandas y armando escándalos,” admitió; no obstante, él odiaba la clase de persona que había llegado a ser. “Tenía mis días buenos y mis días malos. En una ocasión me sentí tan frustrado que despedacé una Biblia y la tiré contra la pared.”
A pesar de eso, el consejo de la Biblia comenzó gradualmente a tocarle el corazón. Este hombre concluye su relato diciendo: “Con la ayuda de Jehová Dios he cambiado completamente.” Ahora, no solo vive tranquilo consigo mismo, sino que también está ayudando a otros a efectuar transformaciones parecidas en sus vidas.
Mejor vida de familia
Un hombre recién casado se cansó de la vida de familia y abandonó a su esposa después de 18 meses de casado. Entonces se fue por el mundo en busca de la felicidad. Después de siete años, durante los cuales, entre otras cosas, vivió en una comunidad hippie y se dio al abuso de las drogas, sintió que su vida era un fracaso, y varias veces intentó suicidarse.
El joven nos informa: “Fue entonces, mientras me hallaba en Australia, cuando me encontré con un testigo de Jehová que fue bondadoso conmigo tanto en sentido material como espiritual.” Este joven comenzó a estudiar la Biblia con los Testigos y éstos le mostraron con la Biblia cómo podía alcanzar felicidad en el matrimonio. Él quedó convencido de que lo que había aprendido tendría éxito, y por eso se puso en comunicación con su esposa. Al notar el cambio en el modo de vida de él, ella decidió volver a tener vida de familia con él. Actualmente ambos viven en obediencia a los mandatos bíblicos, y nos dicen: “Ambos estamos contentos y tenemos una vida de familia muy feliz.”—Efe. 5:33.
Mejor economía
Un matrimonio sueco admitió lo siguiente: “Después de hacer cálculos, descubrimos que mensualmente gastábamos más en fumar, beber y jugar que en abrigo, alimento y ropa para nuestra familia. Tan solo nuestro hábito de fumar costaba más que el alquiler de nuestra incómoda vivienda.”
“Un estudio de la Biblia con los testigos de Jehová nos hizo abandonar nuestros hábitos de exceso,” continuó relatando esta pareja, quienes, al haber aprendido ahora a cultivar gobierno de sí mismos, habían alcanzado armonía interna. “Tenemos ahora un mejor lugar donde vivir, comemos mejor, vestimos mejor, nos sentimos mejor, dormimos mejor, y nos sobra dinero y energía para actividades que son más provechosas en sentido espiritual y físico.” Se ha ayudado a un sinnúmero de personas de todo el mundo de manera similar.
Además, las pautas bíblicas con relación a la honradez, la diligencia y el contentamiento han ayudado a muchas personas a obtener una mejor vida en sentido económico, por haberse convertido esas personas en empleados apreciados en quienes se puede confiar. Por haber aprendido a respetar el dinero, en vez de amarlo, le dan mejor uso. Como se expresó, en conclusión, esta pareja sueca: “Este libro que viene de Dios pone en equilibrio todas las cosas de la vida.”—Heb. 13:5, 18; compare con Proverbios 18:9.
Los casos que acabamos de mencionar nos muestran que la Biblia puede ayudar a las personas a disfrutar de una mejor clase de vida ahora. Pero usted quizás diga: ‘Esas eran personas excepcionales. Yo nunca podría, por medio de simplemente leer la Biblia, efectuar todos esos cambios.’ Ellas tampoco pudieran haberlo hecho así. Hubo más que solo eso envuelto en el asunto.
Paz y fraternidad
Todas las personas antes mencionadas recibieron ayuda personal gratis de los testigos de Jehová. Un periódico estadounidense llamó a esta organización “un modelo de paz y fraternidad.” El asociarse con estas personas es un poderoso aliciente que lleva a imitar su buena conducta.
El testimonio de una joven estadounidense prueba el valor de tal asociación. En su estilo de vida anterior ella bebía en las tabernas, fumaba marihuana y peleaba. “Sencillamente era mala,” declaró ella, y nos dice por qué. “¡Nunca se descuide en cuanto al mal que las malas asociaciones pueden causar!” Los “amigos” de ella sacaron a la superficie lo peor que había en ella.
Después, ella y su esposo comenzaron a estudiar la Biblia y a disfrutar del compañerismo de los testigos de Jehová. Ella nos informa: “Me libré de mis problemas emocionales y desarrollé una buena conciencia. Descubrimos que ya no necesitábamos a nuestras viejas asociaciones, porque teníamos centenares de fieles amigos nuevos en los cuales podíamos confiar.” Esto no quiere decir que esta organización de personas sea perfecta. Pero estas personas por lo menos están esforzándose intensamente por vivir en armonía con la Biblia, y los resultados son notables.
No obstante, hasta cuando disfrutamos de una mejor clase de vida ahora, no es una vida perfecta. Por más que nos esforcemos, aún cometemos errores y a veces perdemos el gobierno de nosotros mismos. Además, las enfermedades y la muerte pueden causarnos dolor inevitable. También luchamos contra el ambiente malo que nos rodea. ¿Llegará alguna vez el tiempo en que nuestras vidas sean completamente felices?