El efecto mundial de la “Unidad del Reino”
¡UNIDAD DEL REINO! En contraste con las fuerzas divisivas del mundo, ¡qué maravillosa demostración de la unidad dada por Dios hubo en la serie de asambleas de distrito que los testigos de Jehová celebraron en 1983! El acontecimiento atrajo a multitudes de personas, que llenaron auditorios y estadios por todos los Estados Unidos y Canadá, en el continente de Europa, en el Lejano Oriente y en islas del Atlántico, del Pacífico y del Caribe.
Eso no fue una simple reunión de personas para una demostración de fortaleza o para el placer mutuo. Fue una serie de asambleas a la que asistieron personas que están convencidas de que el Reino de Dios bajo Cristo es la única solución a los problemas de la humanidad, que crecen como hongos. Todas ellas creen firmemente que el Reino, que funciona desde 1914, año que señaló un nuevo período, es una fuerza extraordinaria que contribuye a la unidad y armonía de acción en la vida de ellas.
El News Tribune, de Tacoma, Washington, subrayó eso al hacer un reportaje sobre una asamblea que hubo allí y a la cual asistieron más de 20.000 personas, y dijo: “Los Testigos esperan dentro de poco el cumplimiento del padrenuestro: ‘Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra’”. Al citar las palabras del presidente de asamblea, el artículo periodístico siguió diciendo: “En el reino de Dios, el gobierno hará lo que los gobiernos humanos nunca han podido hacer. [...] La Tierra será limpiada y convertida en la clase de lugar que Dios siempre ha querido que sea”.
Dondequiera que se reunieron en asamblea, los delegados de la asamblea estuvieron resueltos a dar mucha publicidad al Reino. Se dan cuenta de lo urgente que es saber que Jehová, y sólo él, puede solucionar todos los problemas e introducir un gobierno justo a favor de todos los que se sometan a su Rey ungido Jesucristo, y lo hará.
Aunque los observadores se dieron cuenta de las excelentes cualidades piadosas que desplegaban los Testigos, hubo quienes también destacaron las brillantes perspectivas futuras que los Testigos proclaman. Por ejemplo, después de mencionar la honradez y limpieza moral de los Testigos, el Stampa Sera, de Brescia, Italia, señaló lo siguiente: “La más importante [verdad que enseñan los Testigos] [...] es la que anuncia ‘que muy pronto habrá un largo período en que Jehová reinará, y la Tierra volverá a ser un paraíso para todo el mundo. El justo ya no morirá. Se pondrá fin a la necesidad de aguantar la opresión, así como a la tristeza y los sufrimientos de la actualidad; la perfidia del diablo fracasará’”. Tal mensaje anima a las personas que están cansadas de las deplorables condiciones actuales.
Conexión por cable telefónico con ciudades claves
Un rasgo animador de la serie de Asambleas de Distrito “Unidad del Reino” que dio realce al espíritu de que somos una hermandad unida fue la transmisión de porciones del programa, por cable telefónico, desde ciudades claves hasta asambleas que se celebraban en otros lugares. Por ejemplo, en América del Norte se usó una ciudad clave diferente cada semana durante el período entre el 16 de junio y el 24 de julio. Como ejemplo, el 8 y 9 de julio hubo auditorios en 26 ciudades estadounidenses, 17 ciudades de Canadá, 3 de Hawai y en Hamilton, Bermuda, que escucharon porciones del programa transmitidas desde St. Louis, Misuri. La asistencia total que hubo aquella semana en las 48 ciudades, incluso la gran muchedumbre que se reunió en St. Louis, sobrepasó por mucho las 400.000 personas.
Fue emocionante la manera como respondieron los delegados de la asamblea. Un delegado de Inglaterra dijo esto: “Les doy especialmente las gracias [...] por la conexión telefónica de las ciudades donde se celebraron asambleas. No puedo hallar palabras para expresar mi gozo y agradecimiento por ese rasgo. Mi hijo mayor, su esposa y sus tres hijos asistieron a la asamblea que se celebró en Dublín, Irlanda. Así que, mientras yo escuchaba aquí los discursos, también podía imaginarme a mi familia sentada junto a otras personas que conozco en Irlanda, todos nosotros escuchando atentamente el programa”. Cierto delegado de Zurich, Suiza, escribió: “Escribo para darles las gracias por el maravilloso congreso que acabo de tener el privilegio de disfrutar. Significó mucho para mí tener el honor de oír por vía telefónica desde Alemania. Me fui a casa lleno de un maravilloso sentimiento y conocimiento de que existe unidad mundial en la organización de Jehová, y que no la hay en ninguna otra parte”.
En otras expresiones hechas por delegados se dijo lo siguiente: “Fue un verdadero placer haber estado unidos por cable telefónico con otros hermanos y hermanas de los Estados Unidos y Canadá, mientras estábamos pendientes a cada palabra que se decía”. “Agradezco también los discursos que se transmitieron por cable telefónico. Fue electrizante estar unidos de esa manera”.
Estímulo dado por misioneros visitantes
En muchas de estas asambleas los delegados tuvieron también el placer de reunirse con misioneros, la mayoría de los cuales eran graduados de la Escuela Bíblica de Galaad de la Watchtower, quienes habían regresado a su país natal para disfrutar de la asamblea junto a sus familiares y amistades. Hubo muchas escenas de reuniones felices. Las experiencias que dieron desde la plataforma esos siervos leales fueron animadoras y dieron un ejemplo excelente a los más jóvenes, a la vez que los estimularon a fijarse como meta en la vida el servir de tiempo completo al gran Dios de la unidad del Reino.
The Honolulu Star-Bulletin informó que hubo nueve misioneros con un total combinado de 275 años de servicio que compartieron las experiencias que habían tenido en Micronesia y el Lejano Oriente. Tuvo un efecto saludable el oír a los misioneros. Un delegado declaró: “Fue gozoso oír las experiencias de los misioneros. Ésa fue una provisión excelente”. Otro hermano escribió y dijo que la sesión que tuvo que ver con “el privilegio de servir como misionero en el extranjero fue un verdadero estímulo. [...] ‘Como agua fría a un alma cansada, así es un buen informe procedente de un país distante’ (Proverbios 25:25). Y eso es exactamente lo que los misioneros nos dieron en este programa de asamblea”.
Otro delegado que escribió desde Inglaterra, donde 52 misioneros provenientes de 19 países estuvieron presentes, dijo: “En verdad creo que nunca antes he salido de una asamblea con un sentimiento de orgullo tan grande e inmensa gratitud por ser parte del pueblo de Jehová. Muchas otras personas me han dicho algo similar. Debido a que tanto mi familia como yo tuvimos problemas de salud, me vi obligado a dejar una asignación especial en Irlanda el año pasado, y ahora estoy más resuelto que nunca a volver tan pronto como sea posible, si Jehová quiere. El intercambio que tuve con los misioneros en privado y desde la plataforma fue un verdadero estímulo en ese respecto. Así que les doy nuevamente las gracias por el arreglo que lo hizo todo posible”.
Candidatos para el bautismo que tenían diversos antecedentes
La prensa pública de muchas ciudades prestó atención especial al bautismo de miles de nuevos Testigos. Esos candidatos para el bautismo en agua habían estado preparándose por algún tiempo a fin de satisfacer los requisitos para dar este paso. En Canadá y los Estados Unidos continentales hubo 12.059 personas que simbolizaron su dedicación a Jehová por medio del bautismo. Muchas de ellas habían estado asociadas anteriormente con el catolicismo o el judaísmo, o con varios grupos protestantes, como los mormones, los bautistas y la Iglesia de Cristo, o hasta con religiones orientales. Por medio del estudio diligente de la Biblia con los testigos de Jehová llegaron a darse cuenta de que Jehová Dios por medio de Cristo, el Pastor Excelente, está reuniendo en una organización a personas de toda clase. Y en esta Asamblea de Distrito “Unidad del Reino” verdaderamente se regocijaron de asociarse con una hermandad internacional que se somete a Cristo en todo sentido.
En Italia, 3.119 personas se presentaron para bautizarse. Entre ellas había algunas a las que hubo que enseñarles a leer antes de que satisficieran los requisitos para el bautismo. Muchas eran jóvenes, mientras que otras tenían más de 90 años de edad. También hubo entre ellas un ex ladrón, un ex comunista y un hombre que había planeado servir para otra organización religiosa como misionero lego en Brasil.
Durante julio y agosto se celebraron en Europa otras asambleas “Unidad del Reino”. Por ejemplo, en las Islas Británicas las asambleas claves de Edimburgo, Londres y Sheffield se conectaron por cable telefónico con otras asambleas, incluso una que se celebró en Dublín, Irlanda. Un total de alrededor de 127.000 personas oyeron los discursos especiales, y casi mil personas se presentaron para el bautismo en agua.
Unidad del Reino en Oriente y Occidente
París fue la ciudad clave de muchas asambleas que se celebraron en Francia, y a esa ciudad se conectaron auditorios de habla francesa que estaban en Bruselas, Bélgica, y Ginebra, Suiza. Noruega, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Bélgica y los Países Bajos también tuvieron su jubilosa multitud de delegados. Francfort y Munich fueron ciudades claves para las asambleas que se celebraron en Alemania Occidental, así como en Austria, Luxemburgo y Suiza. Madrid y Valencia, en España; Roma y Milán, en Italia; Lisboa, en Portugal; y Atenas, en Grecia, fueron las ciudades claves a las cuales se unieron muchos otros auditorios que se reunieron en estos países, así como en otros.
En una serie de ciudades de Polonia se pudieron celebrar asambleas de un solo día de duración, en las cuales se dio la bienvenida a delegados visitantes de otros países de Europa. Aunque hubo que abreviar en cierto modo el programa, los hermanos se emocionaron de estar juntos y disfrutar del compañerismo, así como del mismo banquete espiritual que se presentó en todas las Asambleas de Distrito “Unidad del Reino” que se celebraron alrededor del mundo.
Durante ese mismo período se estaba celebrando en Japón la Asamblea de Distrito “Unidad del Reino”. Hubo 15 auditorios diferentes en la misma cantidad de ciudades a los que se conectó por cable telefónico (o más tarde, por medio de grabaciones) con Tokio para que escucharan las partes especiales del programa. Durante las semanas subsiguientes los delegados se reunieron en Corea del Sur (donde hubo conexiones telefónicas), Hong Kong, Taiwan y las Filipinas. En todos estos lugares se deleitó a los delegados con el mismo programa que se había escuchado en Europa y América. Allí, también, muchos candidatos que satisfacían los requisitos se presentaron para el bautismo como símbolo de su dedicación a Jehová, el Dios que hace posible la unidad del Reino.
No hubo escasez de trabajadores voluntarios
Fue bueno ver la buena disposición que tuvieron muchos delegados para ayudar en los diversos departamentos que se establecieron para satisfacer las necesidades de los demás delegados de la asamblea. En una asamblea hubo un grupo de personas de edad avanzada que, al terminar la asamblea, quisieron participar en la labor de limpieza. Ésa fue una actitud excelente. Ellas fueron asignadas a barrer la planta baja del local para que no tuvieran que subir las gradas que llevaban a las tribunas. El periódico italiano Il Resto del Carlino, de Bolonia, informó lo siguiente en su número del 14 de agosto de 1983: “Uno queda impresionado, durante el curso de toda la asamblea, por la organización perfecta que realizan [pequeños equipos] de voluntarios. Por ejemplo, he aquí un incidente curioso: El círculo interior del estadio siempre está lleno de inscripciones bastante atrevidas. Para eliminarlas, un grupo de siervos fieles volvió a pintar toda el área a expensas de la organización y cubrieron las porciones de la pared donde había inscripciones objetables”.
Al comentar sobre lo limpio que estaba el estadio donde se celebró la asamblea de Roma, il Giornale del 14 de agosto de 1983 dijo: “No se ven latas vacías ni basura, ni siquiera colillas de cigarrillos; los testigos no fuman”.
Hubo muchas expresiones de agradecimiento por parte de los administradores y el personal de los diversos auditorios que se usaron. Al comparar nuestra asamblea con la reunión que celebró un prominente evangelista de TV, un miembro del personal dijo: “Ellos no celebran una reunión, celebran un espectáculo. Ustedes celebran una reunión. Lo que ustedes hacen es educativo”. Y el administrador de un estadio grande se sintió movido a escribir: “Ha sido un gran placer que ustedes y sus asambleístas hayan utilizado nuestras instalaciones. De todos los muchos tipos y tamaños de muchedumbres que han asistido a sucesos celebrados en nuestro estadio, su grupo ha sido por mucho el más limpio, el que mejor se ha comportado y el más cooperador de todos los grupos con los cuales nos hayamos asociado. El porte que ha inculcado su grupo fue una hermosa lección para todos nosotros. Desde la primera comunicación hasta la limpieza final, su grupo ha seguido asombrándonos a todos”.
Muchos que han servido a Jehová por muchos años expresaron que esta asamblea ha sido la mejor hasta ahora. Un delegado escribió: “Por 15 años he asistido a asambleas de distrito, pero ninguna ha sobrepasado las bendiciones de esta última”. Un delegado de Manchester, Inglaterra, dijo: “Hemos estado en la verdad por muchos años —61 años en total—, hemos disfrutado de muchos privilegios, pero ahora que han llegado a su fin por otro año las asambleas de distrito en nuestra parte del mundo, tenemos que expresar nuestro agradecimiento y aprecio por todas las bendiciones que hemos recibido. No nos hubiéramos perdido ni una de ellas”.
Sí, la serie de Asambleas de Distrito “Unidad del Reino” de 1983 dio un poderoso testimonio. Jehová, el Organizador-Maestro, ciertamente ha reunido un pueblo de entre todas las naciones e idiomas y lo ha juntado en una unidad inquebrantable. La obra de testificar de ellos, su conducta y su vida diaria dan testimonio del hecho de que Él los ha unido bajo Su Reino en manos de Su Rey escogido, Cristo Jesús.
No cabe duda de que el programa de la asamblea fue un abundante banquete espiritual que satisfizo, animó y estimuló a los delegados. Es patente que un pueblo como ése, según el propósito divino, está verdaderamente unido en servir para la gloria de Dios. (Efesios 4:3.)
[Comentario en la página 17]
‘Existe unidad mundial en la organización de Jehová, y no la hay en ninguna otra parte’
[Comentario en la página 18]
“De todos los muchos tipos y tamaños de muchedumbres que han asistido a sucesos celebrados en nuestro estadio, su grupo ha sido por mucho el más limpio”
[Fotografía en la página 16]
Misioneros que participaron en el programa que se celebró en Francfort, Alemania, R.F.
[Fotografía en la página 19]
Decenas de miles de personas que tenían diversos antecedentes culturales y religiosos se presentaron para el bautismo