¿De dónde sacó esas plumas tan bonitas?
LA CARRACA DE COLA LARGA habita comúnmente en África central y meridional. Suele posarse en los árboles o en los cables telefónicos tendidos a lo largo de las carreteras, y desde esa posición ventajosa otea los alrededores en busca de insectos y otros alimentos.
Si viaja por Botsuana y Zimbabue es posible que vea el destello de unas brillantes plumas azules en el aire, producido cuando alguna carraca cruza volando la carretera. A veces la carraca hace alarde de sus vistosas plumas ejecutando una serie de acrobacias y piruetas. En la edición a todo color, la fotografía adjunta de esta ave y el recuadro en el que se destaca una de sus alas permiten apreciar los brillantes colores de la carraca. Las plumas de las alas son una mezcla de cuatro matices de azul junto con negro y marrón. ¡Qué bien contrastan con el pecho lila, las mejillas naranjas, la frente blanca y el copete verde claro! Pero esto hace surgir una pregunta importante: ¿De dónde sacó esas plumas tan bonitas?
Si examina las patas de la carraca notará que están cubiertas de escamas, no de plumas. ¿Significa eso que sus plumas se desarrollaron por casualidad de las escamas de un reptil, como enseña la evolución?
No cabe duda de que una pluma es una obra maestra de ingeniería. De su cañón salen filas de barbas. “Si dos barbas contiguas se separan —y se necesita bastante fuerza para separarlas— se vuelven a trabar en seguida al pasar la pluma por entre las yemas de los dedos —explica el libro de texto científico Integrated Principles of Zoology—. Por supuesto, el ave lo hace con el pico.”
¿Podrían haberse desarrollado por casualidad los centenares de eficaces “cremalleras” que componen una sola pluma? ¿Tienen los científicos alguna prueba de que una escama realmente se convirtiese en una pluma? “Por extraño que parezca —admite el mismo libro—, aunque las aves modernas poseen escamas (sobre todo en las patas) y plumas, no se ha descubierto ni en fósiles ni en formas vivas ninguna fase intermedia.”
Sin duda, las plumas atestiguan la existencia de un Ingeniero Maestro que además es experto en combinar hermosos colores. Aves como la carraca de cola larga están entre los “pájaros alados” que “[alaban] el nombre de Jehová”, el Dios verdadero. (Salmo 148:7, 10-13.)
[Reconocimiento en la página 16]
National Parks Board de África del Sur