Observando el mundo
Centros de vudú en cementerios públicos
El ayuntamiento y el alcalde de São Paulo (Brasil) han aprobado recientemente que se utilicen ciertos espacios de los cementerios municipales como “centros de vudú”, informó el periódico Jornal da Tarde. Hubo quienes protestaron contra estos centros, pues afirmaron que las sectas afrobrasileñas utilizarían los cementerios para realizar macabros sacrificios animales. Entre los animales maltratados, mutilados o muertos que se han encontrado, hay perros pequeños enterrados vivos dentro de animales más grandes, y gatos y perros a los que se han sacado los ojos. Un funcionario del gobierno dijo que las sectas que practican dichos ritos no llegaron a Brasil voluntariamente, sino que sus miembros fueron sacados de África por la fuerza y llevados como esclavos a ese país. Por esta razón, dio a entender, habría que respetar a las sectas vudús.
La matanza continúa
Según la revista JAMA (Revista de la Asociación Médica Americana), se calcula que, durante la I Guerra Mundial, el número de civiles que perdieron la vida como consecuencia directa de las hostilidades no superó el 19%. En la II Guerra Mundial los civiles muertos representaron casi el 50%. Desde entonces se han librado unas ciento cincuenta guerras en todo el mundo, y “se calcula —dice JAMA— que más del 80% de los 20 millones de muertos y los 60 millones de heridos han sido civiles, muchos de ellos niños. Se estima que tan solo en la última década han perdido la vida 1.500.000 niños por culpa de alguna guerra y más de 4.000.000 han quedado incapacitados”.
Enfermedad y muerte
Todos los años mueren en el mundo unos cincuenta millones de personas. Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), 46,5 millones de dichas muertes son consecuencia directa de la enfermedad. Las enfermedades infecciosas y parasitarias matan a 17,5 millones de personas anualmente, las cardiovasculares siegan la vida de unos 12 millones y el cáncer acaba con más de 5.000.000. Hiroshi Nakajima, director general de la OMS, dijo: “Lo trágico es que todos los años se producen por lo menos veinte millones de muertes que podrían evitarse si se contara con sistemas de sanidad mejorados, acceso a fármacos y vacunas esenciales, un estilo de vida más saludable y suficiente educación”.
Gatos y aves
Los investigadores calculan que tan solo en el estado de Wisconsin (E.U.A.) los gatos domésticos puede que maten más de diecinueve millones de aves al año. Un estudio llevado a cabo en Gran Bretaña indica que 5.000.000 de gatos domésticos matan anualmente unos 20 millones de aves. En Australia, con el fin de frenar la matanza de aves poco comunes, las autoridades municipales de Sherbrooke Shire ordenaron a los residentes que mantuviesen a sus animales de compañía dentro de la casa por la noche si no querían pagar una multa de 100 dólares. En Estados Unidos nacen diariamente unos treinta y cinco mil gatos. Pero como informa la revista National Wildlife, el “estudio de Wisconsin descubrió que el 94% de los dueños de gatos quería tener aves cantoras en su propiedad y el 83% deseaba tener aves de caza, pero solo el 42% estaba dispuesto a reducir el número de gatos para favorecer estas especies silvestres”.
Los deportes y la salud
Los expertos advierten que obligar al cuerpo a un rendimiento inhabitualmente elevado puede hacer que una persona enferme. El periódico The European informó: “La investigación llevada a cabo por científicos del campo de la medicina ha revelado que los grandes deportistas son mucho más propensos a las infecciones virales, como resfriados, dolores de garganta y llagas”. Klaus Braumann, consejero médico del equipo olímpico alemán, se entrevistó con 481 deportistas alemanes destacados. Según el diario Süddeutsche Zeitung, descubrió que “les salen cuatro veces más herpes catarrales en los labios [herpes simple o febril] que a la población media”. Aunque se calcula que estas vejiguillas cutáneas le salen de vez en cuando a aproximadamente el 10% de la población alemana, entre los grandes deportistas la incidencia es de casi el 50%. “Cada esfuerzo físico que sobrepasa cierto límite puede debilitar el sistema inmunológico”, comentó Heinz Liesen, experto en Medicina Deportiva.
“La paradoja de la abundancia”
En una reunión reciente celebrada en Ginebra (Suiza), dos agencias de la ONU anunciaron que unirán sus esfuerzos en “una de las mayores ofensivas contra la desnutrición que jamás se han llevado a cabo en el mundo”. El diario parisino Le Monde informa que la Organización para la Alimentación y la Agricultura y la Organización Mundial de la Salud dijeron que tomarían acción para superar lo que denominan “la paradoja de la abundancia”. Aunque la Tierra produce suficiente alimento para satisfacer las necesidades nutrimentales de toda la familia humana, este no se distribuye en conformidad con las necesidades. En África el hambre amenaza diariamente la vida de 40 millones de personas. La desnutrición afecta a 192 millones de niños, y de estos, todos los días mueren 40.000.
Adoctrinamiento involuntario
“Cuando los padres fuman, los hijos probablemente seguirán su ejemplo”, dice el periódico parisino Le Figaro. Un estudio reciente realizado con más de 10.000 jóvenes franceses con edades comprendidas entre los 11 y los 18 años, reveló que casi una cuarta parte fuma tabaco con regularidad, es decir, por lo menos una vez al día. El estudio indicó que en el caso de más del 50% de los jóvenes que fuman tabaco, su padre también fuma. Además, descubrió que casi el 72% de los jóvenes que fuman habitualmente desearían ser capaces de dejar el hábito.
Menos respeto a los mayores
La cantidad de personas mayores que hay en Asia está aumentando considerablemente. En Japón hay quienes calculan que los actuales 15,5 millones de personas de 65 años de edad y más aumentarán a 32 millones en los próximos treinta años. Según la revista Asiaweek, para el año 2020 uno de cada cuatro japoneses será viejo. “Más del 9% de los singapurenses han cumplido ya los 60 años de edad. Y para el fin de este siglo aproximadamente 1,5 millones de malaysios entrarán en la edad de jubilarse”, añadió Asiaweek. Este aumento se produce en una época en que las antiguas tradiciones de asistencia y respeto a las personas de edad avanzada están desapareciendo. Henry Lim, defensor de las personas de edad de Singapur, dijo: “Existe una tendencia al debilitamiento del respeto a los mayores”, y añadió que a menudo los jóvenes “tienen más tiempo para el perro que para sus padres”.
Un buen negocio
Los argentinos están preocupados por los casos de sacrificios de animales y humanos que se producen. Según el periódico Clarín, en Argentina hay 5.000 sectas, muchas de las cuales están mezcladas con espiritismo, satanismo y otras formas de ocultismo. Una gran cantidad de estas sectas se destacan por el uso de imágenes. En Buenos Aires no es extraño encontrar tiendas en cuyos estantes se exponen imágenes de Jesucristo y de “santos” católicos al lado de estatuas de demonios. Una imagen popular se conoce como “Lucifer, [...] el Gran Capitán y el más terrible de los dioses del mal”. Clarín comenta que los proveedores de estas imágenes satánicas también distribuyen imágenes católicas. El propietario de una tienda admitió que la venta de imágenes católicas y de imágenes satánicas es “un buen negocio”.
Temen a los pacientes
El temor a que sus pacientes les contagien puede estar afectando seriamente el comportamiento del personal sanitario, explica The New York Times. Muchos médicos temen contraer sida o hepatitis si se pinchan o se cortan la piel accidentalmente con el instrumental médico mientras tratan a sus pacientes. Es obvio que este temor no es infundado. Un estudio que se efectuó en un hospital de la ciudad de Nueva York reveló que alrededor del 60% de los médicos que tratan regularmente a tuberculosos han contraído la enfermedad. Además, todos los años unos doce mil miembros del personal sanitario contraen hepatitis contagiados por sus pacientes, y desde que empezó la epidemia del sida, unos cuarenta y siete de dichos profesionales han contraído la enfermedad por contagio de los pacientes en Estados Unidos.
La nuez de betel y el cáncer
“Mascar o no mascar: he aquí el problema.” El problema, relacionado con el hábito de mascar nuez de betel, se planteó en el periódico Post-Courier, de Papua Nueva Guinea. El Dr. Barrie Milroy, un cirujano especialista con experiencia en tratar a personas que mascan nuez de betel, comentó que “parece que dos importantes problemas de Papua Nueva Guinea son el paludismo endémico y el cáncer intraoral, este último relacionado directamente con el hábito de mascar nuez de betel”. Hasta hay niños pequeños que mascan habitualmente nuez de betel. ‘Para el que masca nuez de betel la cuestión no es si enfermará de cáncer, sino cuándo enfermará’, dijo el Dr. Milroy. Luego añadió que a menos que esas personas abandonen su hábito, “no hay mucho que la medicina pueda hacer por ellos”.
Falsificadores astutos
“Una cosa es que unos billetes falsos le pasen inadvertidos a un tendero confiado o incluso al cajero de un banco, y otra muy distinta es que engañen al avanzado equipo tecnológico de la Reserva Federal”, comenta The Wall Street Journal. Sin embargo, alguien ha falsificado billetes de 100 dólares (E.U.A.) que han logrado hacerlo. Estos billetes falsos, calificados de “excepcionalmente bien hechos”, han aparecido de pronto por todo el mundo. En su fabricación se ha utilizado magistralmente el difícil estilo de impresión realzada, el papel moneda especial hecho de pasta de trapo con sus fibras indicadoras rojas y azules, y la característica tinta magnética. Están tan bien hechos, que el gobierno estadounidense ha decidido admitirlos y aceptar la pérdida en lugar de seguir el procedimiento usual de cobrar a los bancos los billetes falsificados. Algunos funcionarios temen que estos billetes falsos sean obra de un grupo terrorista o de un gobierno extranjero hostil.
Aumentan las muertes por asma
“El número de personas que mueren de asma [en Alemania] ha aumentado de manera impresionante”, dijo el diario Süddeutsche Zeitung. Según la organización Liga Alemana de las Vías Respiratorias, más de cinco mil personas murieron por causa de enfermedades respiratorias en ese país durante 1991. A mediados de la década de los setenta la cifra correspondiente fue de cerca de dos mil al año. Unos veinte millones de alemanes sufren de alergias, y uno de cada tres padece alergias respiratorias.