De nuestros lectores

Ciencia Les escribo para felicitarlos por la serie de seis artículos “La ciencia: la búsqueda incesante de la verdad por el hombre” (8 de abril a 22 de junio de 1993). Fueron imparciales e informativos. Como hombre de ciencia, me sorprendió saber cuánto han influido en el pensamiento científico filósofos griegos como Aristóteles, Platón y otros.

O.O., Estados Unidos

En la parte 6 de la serie (22 de junio de 1993) dijeron: “La devastación medioambiental, de la que la ciencia es responsable, es enorme”. La ciencia no es responsable de la mala utilización de sus creaciones. La culpa es de los gobiernos, que emplean técnicas legales obsoletas para regular el uso de la tecnología.

C.C.R., Estados Unidos

Esta serie de artículos no pretendía culpar de los problemas medioambientales exclusivamente a los científicos de la Tierra. De hecho, en la frase anterior a la citada se afirma con claridad que la ciencia simplemente “ha contribuido a crear” tales problemas. Los artículos previos de la serie mostraron que los científicos comparten la culpa con los políticos, los comerciantes y los consumidores.—La dirección.

Aislamiento Gracias por publicar la historia de Pepita Abernathy: “Una vida útil a pesar del aislamiento” (22 de febrero de 1993); hizo que se me saltaran las lágrimas. Siempre me ha parecido difícil predicar a amigos o en territorios donde la gente es poco receptiva. Sin embargo, Pepita Abernathy predicó en diferentes partes del mundo, aun sin conocer el idioma. Ahora tengo una actitud diferente con respecto a la predicación.

J.W., Estados Unidos

Música Acabo de leer la serie de artículos “La música moderna: ¿diversión inofensiva?” (8 de junio de 1993). Cuando estaba en la escuela superior, me encantaba la música heavy metal. Mis malos hábitos y la actitud rebelde que tenía eran producto de las ideas que esa música oscura y malsonante exponía. Sin embargo, cuanto más me he acercado a Jehová, más he llegado a odiar incluso el sonido de esa música.

L.K., Estados Unidos

Ustedes nos han dado a los jóvenes consejo útil de fuentes confiables y actuales. Algunos piensan que toda la música es aceptable mientras no se la clasifique como heavy metal o rap, aunque induzca a la inmoralidad, la violencia y el uso de las drogas. Estos artículos refutaron dicha idea equivocada. Ahora todos sabemos cómo ser más selectivos al elegir la música.

F.M., Italia

Mi hijo adolescente fue expulsado hace poco de la congregación cristiana. Hice todo lo que pude para que dejara de escuchar música rap: razoné con él, le mostré principios bíblicos, estudié con él los artículos publicados sobre el tema; pero continuó escuchándola en secreto creyendo que no le afectaría. No obstante, comenzó a hacer muchas de las cosas malas que esta música exalta. Aún estoy afectado emocionalmente por la caída de mi hijo. Espero que todos los padres cristianos muestren aprecio por esta información leyéndola y estudiándola con sus hijos.

G.C., Estados Unidos

No solo exponen la clase de música que ha de evitarse, sino que además apoyan sus argumentos con razonamientos irrefutables y a la misma vez amorosos y apacibles. Uno percibe que su deseo más profundo es ayudar a los jóvenes a huir de este mundo totalmente corrompido.

B.V., Francia