De nuestros lectores
¿Un Dios de guerra? Gracias por el excelente artículo publicado en el número de ¡Despertad! del 8 de noviembre de 1993: “El punto de vista bíblico... ¿Es Jehová un Dios de guerra?”. Muchas personas se han hecho esta pregunta a lo largo de los años. De vez en cuando solíamos comentarla en familia. Su artículo y la investigación que he realizado personalmente me han ayudado a encontrar las respuestas a mis preguntas.
S. T., Estados Unidos
Leche materna Nos encantó el artículo “Las ventajas de la leche materna” (22 de septiembre de 1993). Mi esposa amamanta a nuestro hijo. Sin embargo, no mencionaron que dar el pecho agota físicamente a la madre. Quizás no todas las mujeres puedan amamantar a sus hijos por la noche. En nuestro caso, por ejemplo, a mi esposa se le hace muy difícil si no duerme lo suficiente.
T. K., Alemania
Gracias por sus observaciones. En artículos anteriores se analizaron algunas de las dificultades que pueden experimentar las madres primerizas en este respecto. Consulte, por ejemplo, los números de “¡Despertad!” del 8 de septiembre de 1983 y 22 de marzo de 1986.—La dirección.
¿Demasiado lejos? Quisiera darles las gracias por el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Qué es ‘ir demasiado lejos’?” (22 de octubre de 1993). Me bauticé hace casi un año, y me he preguntado a menudo qué opina Jehová sobre este asunto. Les agradezco mucho que trataran el tema. Aunque no será fácil, he tomado la resolución de vivir de acuerdo con las normas de Jehová.
C. S., Estados Unidos
Desde hace meses buscaba un artículo como este. Llevo nueve meses saliendo con mi novio, y cuando recibí el artículo, le telefoneé de inmediato. Muchas gracias por instruirnos sobre temas tan difíciles y delicados.
A. P. G. S., Brasil
Les agradezco el artículo desde el fondo de mi corazón. Llegó cuando más lo necesitaba. Tengo 16 años y me gusta un muchacho, así que pensaba comenzar a salir con él. Sabía, por supuesto, que la fornicación es incorrecta, pero me parecía que besarse y abrazarse no era ir demasiado lejos. Sin embargo, este artículo me ha ayudado a ver que hasta que llegue a una edad en que pueda casarme, hacer tales cosas sería ir demasiado lejos.
M. H., Japón
No soy joven, pero todavía estoy soltera y me hacía esa misma pregunta. Salgo con un hermano, y dado que soy evangelizadora de tiempo completo, debería conocer la respuesta. No obstante, cuando los sentimientos te dominan, se te puede nublar el buen juicio. El artículo fue muy oportuno y me ha ayudado muchísimo al tratar el asunto con el compañero cristiano con el que salgo. Lo hemos leído juntos, y, sobre todo, queremos hacer las cosas de forma honorable.
M. R., Estados Unidos
Había orado para que se me diese una explicación sobre este tema. Cuando vi el título del artículo, me dio un vuelco el corazón. Lo leí enseguida, y ahora sé claramente cómo he de comportarme.
S. G., Italia
Tratamiento médico sin sangre Quisiera agradecerles sinceramente el artículo “Cooperación entre los testigos de Jehová y la profesión médica” (22 de noviembre de 1993). De mis ojos brotaron lágrimas de aprecio mientras lo leía. Describía el duro trabajo que muchos de nosotros desconocemos por no haber tenido nunca ese problema. Pero para los que algún día quizás veamos nuestra fe puesta a prueba por la cuestión de la sangre, es un gran consuelo saber que nuestros hermanos trabajan con tanta diligencia a favor nuestro.
B. B., Estados Unidos