“Alimenta a mis ovejitas”
1, 2. ¿Cómo fué establecido el hecho de la resurrección de Jesús para guiar a Pedro y los otros apóstoles fieles?
EL Maestro estaba vivo. El gran Predicador del reino de Jehová se encontraba allí en la playa. Cristo Jesús ya había prendido lumbre y tenía pescado asándose en ella; también había pan para que los discípulos se desayunaran. Pedro, como de costumbre impulsivo, se había puesto sus prendas de vestir (porque estaba desnudo) y había saltado del bote y había nadado hasta la orilla. Los otros habían remado hasta la playa en el bote pequeño. Para ellos Jesús hablaba de la misma manera que él había hablado antes de su resurrección. A aquellos discípulos con hambre él dijo: “Vengan, desayúnense.” Ninguno tuvo el valor o la necesidad de preguntarle: “¿Quién es usted?” Se dieron cuenta de que era su Maestro.
2 “Jesús vino y tomó el pan y se lo dió, y también el pescado.” Antes de esta aparición de después de la resurrección de Cristo Jesús había habido seis otras: entre éstas, una a María Magdalena, luego al grupo de mujeres, a los dos en camino a Emaus, y también a Pedro. Juan informa: “Esta fué ahora la tercera vez que Jesús apareció [especialmente] a los discípulos [a los apóstoles en grupo] después de haber sido levantado de entre los muertos.” Recuerde, “por temor de los judíos las puertas estaban cerradas con llave donde los discípulos estaban, [y] Jesús vino y se puso en medio de ellos”; también “sus discípulos de nuevo estaban dentro, y Tomás con ellos. Jesús entró, aunque las puertas estaban cerradas con llave, y se puso en medio de ellos.” (Juan 21:12-14; 20:19, 26, NM) ¡Aquí ahora había amplia evidencia; otra vez estaba vivo el Redentor del género humano!
3, 4. (a) Antes de su muerte, ¿cómo y por qué describió Jesús a sus discípulos el esparcimiento de ellos que se había predicho? (b) Después de su resurrección, ¿dónde y cómo dió Jesús instrucción vital particularmente a cuáles siete discípulos?
3 Juan, describiendo vívidamente esta escena del desayuno, añade la impresionante conversación entre Jesús y Pedro, que permaneció muy indeleblemente en la mente de Pedro. Jesús habla a Simón Pedro directamente: “‘Simón, hijo de Juan, ¿me amas tú más que éstos?’ Él le dijo: ‘Sí, Señor, tú sabes que te tengo cariño.’” Cuando Jesús primero hizo esta pregunta puede que haya tenido presente lo que previamente había dicho a sus discípulos y la respuesta de Pedro. Esa conversación más temprana la informa Marcos: “Jesús les dijo: ‘A todos ustedes se les hará tropezar, porque está escrito: “Heriré al pastor, y las ovejas serán esparcidas.” Pero después que yo haya sido levantado iré delante de ustedes a Galilea.’ Pero Pedro le dijo: ‘Aun si a todos los otros se les hace tropezar, a mí no se me hará.’” Sin embargo, todas las personas del mundo que desde entonces han leído la vida de Cristo saben que Pedro negó a Cristo tres veces, y cuán verdaderamente profetizó Jesús cuando dijo: “Hoy, tú, sí, esta noche, antes de que un gallo cante dos veces, aun tú me negarás tres veces.” Pero entonces Pedro había replicado profusamente: “Aunque tenga que morir contigo, de ninguna manera te negaré.” Todos los otros discípulos también habían dicho la misma cosa en ese entonces.—Mar. 14:27-31, NM.
4 Jesús fué un maestro maravilloso. Usando ilustraciones, también impresionó indeleblemente en la mente de sus oyentes lo que deseaba introducir en su mente y en su mismísimo corazón. De modo que Jesús, en el desayuno a la orilla del mar, teniendo presente las tres veces que Pedro lo negó, continuó hablando directamente a Pedro, preguntando por segunda vez: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas?” Pedro respondió: “Sí, Señor, tú sabes que te tengo cariño.” Jesús entonces le dijo: “Pastorea a mis ovejitas.” Luego por tercera vez Jesús (usando ahora el propio vocablo variante de Pedro, cariño) preguntó: “Simón, hijo de Juan, ¿me tienes cariño?” Apesadumbrado, ahora Pedro insistió: “Señor, tú sabes todas las cosas; tú sabes que te tengo cariño.” Entonces Jesús dijo: “Alimenta a mis ovejitas.” ¡Qué torrente de pensamientos debe haber pasado rápidamente por la mente de Pedro mientras Jesús le hablaba, repetidamente haciéndole la misma pregunta y luego diciéndole tres veces: ¡‘Alimenta a mis corderos; pastorea a mis ovejitas; alimenta a mis ovejitas’! El más grande Maestro de Jehová sabía que poco tiempo después, cuando ascendiera permanentemente a los cielos, la entera carga de responsabilidad caería sobre aquellos que lo habían seguido; él sabía que ellos serían los superintendentes de sus ovejas. Él se daba cuenta de que ellos serían los responsables de cuidar de que todos aquellos que habían comenzado a poner fe en él como el Caudillo ungido de Jehová, y en su nueva enseñanza, fueran pastoreados. ¿Tendría hombres dignos de confianza—hombres que jamás se desviarían? Con ahinco se aseguró de que éste, Pedro, sería diligente en su trabajo. A los otros seis discípulos fieles que estuvieron presentes en ese desayuno a la orilla del mar el Maestro (usando aquí a Pedro como el ejemplo o “tornavoz”) también los instruyó así. Así Jesús también impresionó hábilmente a esos otros seis con la importancia de su propia responsabilidad individual como amadores de él, como amorosos vigilantes y alimentadores de sus ovejas. De modo que fué por medio de la repetición, por tres testimonios o “testigos” verdaderos, que Jesús dió énfasis a la alimentación y pastoreo de sus ovejas.—Juan 21:15-17, NM.
‘PRESIDAN DE MANERA CORRECTA’
5. El reconocer ¿qué provisión de Jehová? es esencial para vivir hoy como cristianos obedientes, y ¿por qué?
5 Hoy, aunque más de 1,900 años los separa de esa mañana sublime en la playa de Galilea, los cristianos fieles perciben con gran fuerza que la lección que se dio allí es una lección que ellos tienen que tener presente con toda viveza. Aunque cada siervo dedicado de Jehová Dios tiene la responsabilidad de predicar las buenas nuevas de Su reino, todos, individualmente, también tienen que reconocer la organización, la asociación grandiosa y unificada de estos ministros capacitados. ¡Todos ellos tienen que ver y ven vívidamente representado en la mente el que ahora han sido reunidos en la congregación, en el ejército o sociedad del nuevo mundo de Jehová, reunida en toda la tierra! Verdaderamente, ven entre ellos la provisión de Jehová de superintendentes capacitados, equipados para cuidar de su bienestar y para superentender su gozosa actividad unida, ordenada, y que siempre se ensancha en obediencia a Jehová y Cristo Jesús.
6, 7. El que los superintendentes presidan de manera correcta ¿qué incluye, y con qué fin?
6 En la sociedad del nuevo mundo el superintendente principal de una congregación local es el siervo de congregación. Pablo, el duodécimo apóstol fiel del Cordero, estaba intensamente interesado en estos siervos también; por consiguiente él instó: “El que preside, que lo haga con verdadero ahinco.” (Rom. 12:8, NM) A Timoteo y a Tito Pablo escribió instrucciones detalladas para los superintendentes y los siervos ministeriales. Él les informó cuán circunspectamente tienen que andar. Naturalmente, los hombres que hubieran estado en la verdad y familiarizados con la Palabra de Dios por más tiempo serían los que presidirían la congregación a causa de su capacidad y fidelidad. Por eso Pablo exhortó a Timoteo: “Que los de mayor edad que presiden de manera correcta sean considerados dignos de doble honra, especialmente los que trabajan con ahinco en hablar y enseñar.” (1 Tim. 5:17, NM) Pablo vió claramente que los otros apóstoles fieles que realmente habían andado con Jesús y que habían sido enseñados personalmente por Jesús habían sido escogidos cuidadosamente. Pablo vió que era necesario seleccionar con mucho cuidado al colocar los hombres en puestos de responsabilidad. Tienen que ser hombres ricos en obras rectas—hombres que trabajen concienzudamente en el servicio del Reino. No había duda acerca de eso. Hombres de mayor edad o experimentados, también, estarían capacitados para presidir de la manera correcta; a todas las otras personas piadosas les hablarían y enseñarían.
7 En la Biblia muchos textos bíblicos indican que los cristianos verdaderos deben ir de casa en casa; que deben hacer revisitas; y que en los hogares de la gente deben ayudarla a estudiar la Biblia. Verdaderamente, entonces, cada persona que dice ser un seguidor genuino de Cristo tiene que poder enseñar, así como Jesús, su Caudillo, enseñó—poniendo el ejemplo. Pero entre todos estos maestros necesariamente debe haber hombres de mayor edad o experimentados que puedan presidir y presidan de la manera correcta que Jehová exige, ejerciendo dirección verdadera, poniendo el ejemplo adecuado para cada persona que tiene la voluntad pero que tiene menos experiencia.
8. (a) ¿Cómo son aplicables hoy en día las instrucciones que Jesús dió a Pedro acerca de alimentar y pastorear las ovejas del Maestro? (b) ¿Por qué es el celo una cosa esencial ahora en todo superintendente capacitado?
8 Pedro quedó impresionado permanentemente por el consejo sabio que Jesús le dió durante esa memorable sesión de desayuno. Años más tarde Pedro escribió: “A los hombres de mayor edad entre ustedes les doy esta exhortación, . . . Pastoreen la grey de Dios bajo su custodia, no . . . como enseñoreándose de los que son la herencia de Dios, sino haciéndose dechados de la grey.” (1 Ped. 5:1-3, NM) Sí, Pedro había sido un pescador. (Mar. 1:17; Mat. 4:18-20, NM) Pero ahora había llegado a ser, bajo el paciente y maravilloso entrenamiento de Jesús, no sencillamente un ‘pescador de hombres,’ sino un verdadero pastor piadoso de humanos semejantes a ovejas—no sólo para ‘cogerlos’ (como se cogen los peces) sino para cuidar y alimentar y guiarlos más y más en los caminos justos, sustentadores de la vida, del Gran Pastor, Jehová, por causa de Su nombre. (Sal. 23:3, NM) Ahora, como pastor, como buen pastor, Pedro había llegado a ser experimentado en cuidar y alimentar a los corderitos y ovejitas de Cristo. Él había ayudado a muchos de ellos a llegar a la madurez, así como lo habían hecho también los otros apóstoles fieles de Cristo. Y ahora a causa de que los años de Pedro estaban pasando él estaba aconsejando a los hombres de mayor edad para que ellos también vieran claramente su responsabilidad de actuar como pastores verdaderos, velando apropiadamente por el rebaño, realmente siendo ejemplos del rebaño. Hoy, más que nunca antes, el superintendente tiene que ser celoso. ¿Por qué? Porque hoy el celo de Jehová mismo está siendo ejercido de una manera sobresaliente para el adelanto de su gobierno recién comenzado en las manos de Cristo Jesús. (Isa. 9:6, 7) Hoy el superintendente celoso tiene que estar equipado para enseñar. Tiene que poder dar la instrucción apropiada a otros de la congregación para que ellos lleguen a estar firmemente establecidos y permanezcan fieles y verdaderos. Tiene que guiar correctamente a otros y él mismo tiene que continuar siguiendo gozosamente en las pisadas de Cristo Jesús.
“PRESTEN ATENCIÓN A USTEDES MISMOS”
9. ¿Cómo son útiles hoy día las instrucciones que Pablo dió a los superintendentes?
9 Pablo, un superintendente experimentado, instó a sus hermanos que eran superintendentes, diciendo: “Presten atención a ustedes mismos y a todo el rebaño, entre quienes el espíritu santo los ha nombrado como superintendentes, para apacentar a la congregación de Dios, que él compró con la sangre del [Hijo] suyo.” (Hech. 20:28, NM) Aquí, también, el énfasis se da al hecho de que un superintendente tiene que ser un pastor; él tiene un puesto muy responsable. Tiene que ‘alimentar a mis ovejas.’ Hoy entre los superintendentes no se incluyen sólo los de cada congregación por sí misma, pues hay superintendentes nombrados para rendir servicio a muchas congregaciones. De acuerdo con el informe anual de las actividades de los testigos de Jehová por toda la tierra (vea el cuadro de la actividad país por país, páginas 184-186), se ve que ellos están organizados en 16,240 congregaciones. Bajo el arreglo de la Sociedad, 1,107 siervos de circuito superentienden esas congregaciones. Todavía otros hombres experimentados y entrenados, los siervos de distrito, superentienden a los siervos de circuito y a los siervos de congregación. Se ha nombrado a 152 de éstos para servir en diferentes partes del mundo. Hoy estos superintendentes nombrados—siervos de sucursal, siervos de zona, siervos de distrito, siervos de circuito, siervos de congregación—no pueden considerar ligeramente sus responsabilidades.—Éxo. 18:25, 26; Deu. 1:9-15; Efe. 4:11-16, NM; Miq. 5:2-5.
10, 11. La responsabilidad de pastorear que Jesús describió a Pedro, ¿cuán extensa es al tiempo presente, y por qué?
10 Verdaderamente esos superintendentes pueden imaginarse que están en la playa de Galilea, donde Pedro en otro tiempo pescaba con su padre y donde, más tarde, Pedro atentamente oyó a Jesús decirle:
“Alimenta a mis corderitos.”
“Pastorea a mis ovejitas.”
“Alimenta a mis ovejitas.”
Aquí Jesús colocó una carga plena de responsabilidad sobre Pedro, uno de sus superintendentes nombrados, la de hacer algo muy necesario. Pero ¿fueron los otros seis “pescadores de hombres” escogidos que al mismo tiempo también oyeron la importante instrucción que Jesús dió a Pedro—fueron excluídos esos otros seis? ¿Esperó Jesús que esos otros apóstoles fieles suyos hicieran de allí en adelante cualquier cosa que cada uno de ellos deseara hacer privada y personalmente? La propia respuesta de Jesucristo es clara: “Tú continúa siguiéndome.”—Juan 21:22; 17:15-21; Hech. 1:6-8; Apo. 14:1-5, NM.
11 A medida que el trabajo de los apóstoles unidos creció y más personas que amaban la verdad y la justicia fueron siendo congregadas a esta religión maravillosa que el más grande profeta de Jehová, Jesús, había introducido, se requirieron muchos más hombres maduros. Había que nombrar más superintendentes. Y ahora, especialmente en este culminante tiempo de cosecha, cuando vemos asociados con la sociedad del nuevo mundo de Jehová a 591,556 ministros, todos dedicados a Jehová Dios, hay cien veces mayor necesidad de ello. A medida que se reúne ahora a estos ministros en miles de congregaciones locales con sus superintendentes y siervos ministeriales capacitados, todos anunciando unidamente el reino de Jehová, cada uno de estos ministros tiene que dar a Jehová Dios devoción exclusiva. A esos superintendentes se les considera dignos de doble honra por sus hechos y obras. Aquellos que, dentro de la organización de Jehová, “trabajan con ahinco en hablar y enseñar” son los que tienen que ‘alimentar a mis ovejitas’ y lo hacen.—Juan 4:21-24; 1 Tim. 5:17, NM.
12. ¿Por qué y cómo puede uno esforzarse correctamente para llegar a ser un superintendente?
12 Todos deberían ver claramente que “si algún hombre se está esforzando por tener un puesto de superintendente, está deseoso de un trabajo de la clase correcta.” (1 Tim. 3:1, NM) Sin embargo, cuando se esfuerza por tal puesto el hombre debe estar seguro de que tiene capacidad para llenar los requisitos que exige el puesto y de que es un hombre que asumirá la plena responsabilidad que viene con ese puesto. Tiene que crecer a la madurez. Esto puede tomar años dentro de la organización de la sociedad del nuevo mundo. Para llenar los requisitos como superintendente, ya sea siervo de distrito, siervo de circuito, o una tarea de superintendencia semejante, él debe, en primer lugar, poder cumplir con el puesto de precursor o precursor especial, avanzando entonces a las mayores responsabilidades en el servicio de circuito y de distrito, o probablemente a los deberes de un siervo de sucursal que superentiende las actividades del Reino en un país entero.
AUMENTO DE CALIDAD
13. ¿Cómo han participado los precursores especiales en el pastoreo provechoso durante el año pasado?
13 Trae verdadero gozo al corazón de todos los ministros de Dios ver el trabajo maravilloso que se ha efectuado durante otro año. Uno de los testimonios más excelentes acerca del Reino que los testigos de Jehová hayan dado en cualquier tiempo se efectuó durante el año de servicio de 1956. Durante todo el año la Sociedad trató diligentemente de añadir más personas al trabajo de precursor especial, para servir a las personas necesitadas en las regiones aisladas de la tierra, junto con los misioneros, y para predicar allí las buenas nuevas del Reino establecido. El número de precursores especiales ha aumentado de modo que hay 519 más que el año anterior; 2,637 están trabajando ahora en territorios aislados, organizando nuevas congregaciones y asumiendo la responsabilidad de superintendencia cuando un grupo local se reúne. En años de vida humana algunos de estos precursores especiales tal vez sean jóvenes, pero en comparación con los otros cristianos en medio de ellos son hombres de mayor edad o experimentados, capacitados para presidir de manera correcta; y estos nuevos ministros que se han dedicado a Dios disciernen que estos precursores especiales han trabajado concienzudamente en su hablar y en su enseñar, y se alegran de tener su pastoreo provechoso.
14. Los aumentos de cantidad y calidad entre los ministros del Reino, ¿qué han incluído durante el año pasado?
14 El excelente crecimiento que se efectuó en la organización de los testigos de Jehová durante los pasados doce meses queda manifiesto ahora. En 162 tierras a través del mundo un promedio de 591,556 publicadores del Reino ha estado predicando todos los meses. Este es un aumento del 3.6 por ciento sobre el año de servicio de 1955. Aunque este aumento numérico o de cantidad no es tan grande como en algunos otros años, el crecimiento o aumento de calidad dentro de la asociación de los hermanos es muy saludable, sobresaliente. El conocimiento acerca del movimiento progresivo de los miembros unidos y pacíficos de la sociedad del nuevo mundo por toda la tierra está ensanchándose y ahondándose entre todos ellos. Ven más claramente que su obra deleitable es un recogimiento de las otras ovejas, lo cual regocija nuestro corazón. Durante los pasados doce meses se emplearon en gozosa actividad del campo un millón y medio más de horas que durante el año anterior. Eso incluyó el recoger otras 136,000 suscripciones nuevas para La Atalaya y ¡Despertad! Los testigos de Jehová no sólo van de casa en casa y predican sermones cortos a la gente, interesándola en estudiar la Biblia en casa, hablándole y leyéndole directamente de la Biblia, sino que tratan de dejar con las personas que muestran buena disposición sermones impresos para que después que el ministro del Reino parte para servir a algún otro la persona de la casa visitada considere privadamente tal sermón o varios sermones de mayor duración. Durante el año de servicio se colocaron 19,326,817 libros, folletos y Biblias. Además, La Atalaya y ¡Despertad!—las dos principales publicaciones que los testigos de Jehová usan para ayudar a la gente en su estudio de la Biblia—fueron distribuídas en la cantidad de 55,735,715 ejemplares. La distribución de revistas en sí misma, de casa en casa y en las esquinas de las calles, ha aumentado por más de 19,000,000 de ejemplares. Naturalmente, hay muchos cientos de miles de suscriptores a La Atalaya y ¡Despertad! Esto requirió la distribución regular, por medio de las muchas sucursales e imprentas de la Sociedad, de millones de ejemplares de estas publicaciones. Para hacer provisión para las necesidades de los testigos de Jehová en más de cien idiomas la Sociedad imprimió 130,992,362 Biblias, libros, folletos y revistas, todo lo cual los ayudó a proclamar por todo el mundo las buenas nuevas del reino establecido de Jehová.
“DIGAN LAS BUENAS NUEVAS”
15, 16. (a) ¿Por qué el ‘decir las buenas nuevas de día en día’ es vitalmente importante ahora? (b) ¿Qué otros resultados se han informado sobre las actividades mundiales del año pasado de los testigos de Jehová que podemos considerar ahora, y por qué debemos considerarlos?
15 En todo esto nos regocijamos. Verdaderamente regocija nuestro corazón el haber tenido una participación en esparcir este mensaje confortante hasta los cabos de la tierra. Siempre los testigos de Jehová tienen presente, en su trabajo día por día, las palabras de Jesús: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada con el propósito de dar un testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin consumado.” (Mat. 24:14, NM) Por eso han escogido para este año un texto muy vigorizador, un texto lleno de vida y responsabilidad: “Digan de día en día las buenas nuevas de salvación por él.” (Sal. 96:2, NM) La sociedad del nuevo mundo sigue el trabajo en 1957 con extraordinario brío, vigor y vitalidad, para decir este mensaje de consuelo a toda persona dispuesta a oír en todo el mundo. El año pasado los ministros del reino de Dios emplearon 87,353,772 horas yendo de casa en casa predicando, diciéndole a la gente acerca de la maravillosa esperanza que se pone ante ella. No sólo han ido de casa en casa con sermones, sino que han hecho muchísimas revisitas. En realidad, durante el año hicieron 27,746,348 revisitas. De éstas pudieron establecer 333,330 estudios bíblicos de casa. ¡Qué gozo da ver a ministros, no a personas a quienes se les paga un salario para que se paren detrás de un púlpito, sino a ministros en verdad, yendo a todas las naciones del mundo y ayudando a la gente a ver la verdad!
16 Los testigos de Jehová comprenden perfectamente que todavía hay muchas cosas que hacer, muchos lugares que visitar, muchos corazones que consolar. Saben, también, que se tiene que ayudar a muchas otras personas a crecer a la madurez, a conseguir conocimiento acertado y a entender claramente la Biblia. El año pasado 919,994 personas asistieron al servicio de Memorial que los testigos de Jehová celebraron. Sólo 16,302 de los concurrentes indicaron que eran de los ungidos, las personas que están esforzándose por el puesto de ser coherederos con Cristo Jesús en gloria celestial. Creemos que todos los otros cientos de miles están ansiosos de vivir aquí sobre la tierra en el nuevo mundo de justicia, de acuerdo con la voluntad de Jehová. Pero necesitan ayuda. No todos estos 919,994 son ministros—sólo 591,556 se han identificado como ministros, y tienen mucho trabajo que hacer. Por alguna razón condujeron 4,000 estudios bíblicos menos en los hogares de la gente que durante el año anterior. No tantos de ellos salieron en la obra de predicación durante el año como durante el año anterior. Sólo hubo 640,347. Pero aunque 2,582 menos publicadores informan haber trabajado en algún tiempo durante el año, esto no perturba a los testigos de Jehová. Ellos están determinados a cuidar a las otras ovejas. Y teniendo presentes los textos considerados en este repaso, y especialmente recordando las palabras de Jesús: “Alimenta a mis ovejitas,” cada uno de los testigos de Jehová, no sólo los superintendentes, sino todo ministro de toda congregación, por la bondad inmerecida de Jehová hará un esfuerzo más grande que en cualquier otro tiempo para decir estas buenas nuevas de día en día. ¿Por qué harán ellos esto? Porque ven que algunos no están asumiendo la responsabilidad que se le impuso a Pedro. Tales personas no reconocen la seriedad de ello. Por lo tanto será necesario que todos los testigos de Jehová visiten a más personas, empleen más tiempo con los que están en la verdad y con aquellos que todavía no están en la verdad, para que se les ayude a llegar a la madurez.
17, 18. ¿Cómo nos ayudará a ver otras oportunidades y otra responsabilidad para el año que está ante nosotros el considerar ahora el registro de bautismos de los pasados siete años?
17 Aquí está otra cosa interesante: Durante los pasados siete años 394,024 personas se bautizaron. Cada una de éstas ha declarado ella misma ante Jehová Dios que ha escogido hacer la voluntad de Jehová. Hoy la voluntad de Dios es que Sus siervos prediquen las buenas nuevas de Su reino. Pero cuando retrocedemos siete años considerando nuestros informes encontramos que al fin del año de servicio de 1949 había sólo 279,421 ministros regulares en el campo. Sume ésos a los que se bautizaron durante los pasados siete años y tenemos 673,445 personas que deberían ser publicadores del Reino. Pero el registro muestra que sólo hay 591,556 ministros trabajando. Muy fácilmente puede hacerse la pregunta: ¿Dónde están los otros 80,000? ¿Se han muerto? No, no todos ellos; por lo menos no físicamente. No están en sus tumbas. Pero algunos se han enfermado espiritualmente y necesitan la ayuda de los que han avanzado a la madurez.
18 Recuerde lo que Jesús dijo: “Alimenta a mis ovejitas.” Sobre cada testigo de Jehová en todo el mundo recae la responsabilidad de hacer precisamente eso. ¿Lo está haciendo usted? ¿Lo hará? ¿Será el año 1957 sobresaliente en lo que toca a usted en hacer la voluntad de Jehová Dios? ¿Oye usted a Jesús decirle a usted: “Alimenta a mis ovejitas”? ¿Y traerá verdadero gozo a su corazón el recordar y vivir el texto que los testigos de Jehová mantendrán delante de ellos durante 1957: “Digan de día en día las buenas nuevas de salvación por él”? ¿Aprecia usted su responsabilidad como superintendente, como siervo ministerial, como ministro en la gran congregación de Dios? Las palabras de Jesús: “Alimenta a mis ovejitas,” aplican a usted, al cristiano.
Da su voz de mando el Señor; vienen en tropel los portadores de buenas nuevas.—Sal. 68:12, NC.
[Tabla de las páginas 184 a 186]
INFORME DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ POR TODO EL MUNDO PARA SU AÑO DE SERVICIO DE 1956
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)