Preguntas de los lectores
● ¿Quisieran explicar, por favor, el Salmo 78:24, 25? ¿Indica esto que los ángeles necesitan alguna clase de alimentación para continuar viviendo?—D. H., EE. UU.
En la Versión Nácar-Colunga el Salmo 78:24, 25 dice que los israelitas comieron “pan de ángeles” en el desierto. Leemos: “Y llovió sobre ellos el maná, para que comieran, dándoles un trigo de los cielos. Comió el hombre pan de ángeles, y les dió comida hasta la saciedad.” La Versión del Rey Jaime, en inglés, dice: “El hombre comió alimento de ángeles.” Es interesante el hecho de que The Newberry Study Bible, editada por Tomás Newberry y basada en la Versión del Rey Jaime, dice en una nota al margen en cuanto a la expresión “El hombre comió alimento de ángeles”: “ish o Todos comieron el pan de poderosos, heb. lehhem, abbirim.” Note ahora cómo se vierten estos versículos en la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras: “Y siguió haciendo llover sobre ellos maná para que lo comieran, y les dio el grano del cielo. Los hombres comieron el pan mismo de poderosos; les envió provisiones hasta la satisfacción.”
Sí, los israelitas, aunque eran meramente hombres, comieron “el pan mismo de poderosos.” Y esta expresión se refiere al maná que comieron en el desierto. Bueno, entonces, ¿era el maná realmente alimento de ángeles dado por Dios al hombre? El maná sí descendió, por decirlo así, del cielo, porque aparecía sobre el terreno por el funcionamiento del espíritu de Dios desde el cielo. No obstante, esto no era alguna clase de pan que comieran los ángeles; tampoco tenemos prueba bíblica alguna de que los ángeles del cielo coman alguna cosa.
Por lo tanto, cuando el Salmo 78:24 y 25 muestra que al comer maná los israelitas “comieron el pan mismo de poderosos,” ¿qué se quiere decir? Sencillamente que subsistieron con alimento procedente de una poderosa fuente espiritual, suministrado por motivo del funcionamiento del espíritu o fuerza activa de Jehová. Por lo tanto, estaban comiendo alimento que se proveía divinamente.