Preguntas de los lectores
● ¿Cómo fue que después de su rebelión Adán supo que Dios dijo: “Aquí el hombre ha llegado a ser como uno de nosotros en conocer el bien y el mal, y ahora, para que no extienda la mano y de hecho tome fruto también del árbol de la vida y coma y viva hasta tiempo indefinido,—”? (Gén. 3:22)—E. D., EE. UU.
Este texto no dice que Jehová Dios se dijo esto a sí mismo de modo que Adán no pudiera oírlo. Más bien, parece más probable que Jehová lo dijo en voz fuerte para que Adán pudiera oír y saber por qué se le estaba echando del paraíso de placer. Al hacer esto, Dios sorprendió a Adán con algo que él no sabía antes, ni él ni su esposa, Eva; a saber, que en el medio del jardín estaba el “árbol de la vida” y que el tener el privilegio de comer de ese árbol representaba que el que comiera de él merecía vida eterna en el paraíso.
En el registro precedente no hay nada que indique que Adán o Eva supieran acerca de este “árbol de la vida” en medio del Jardín de Edén, cuando Eva se puso a conversar con la serpiente. Entonces ella solo mencionó los árboles del jardín y los incluyó a todos en un grupo e hizo una excepción solo del “árbol del conocimiento del bien y del mal,” que les estaba prohibido a ella y su esposo, pero no le mencionó a la serpiente el “árbol de la vida en medio del jardín,” este árbol que se menciona en el versículo nueve del capítulo segundo.
De modo que ahora Dios dice que con el propósito específico de evitar que coman de este árbol él los está echando: “Con eso Jehová Dios lo echó del jardín de Edén para que cultivara el suelo de donde había sido tomado. Y así arrojó al hombre.” (Gén. 3:23, 24) Sin duda cuando Dios los arrojó de allí él les ordenó salir con alguna expresión verbal y les dijo, poniéndolo en términos comunes: “¡Vamos, andando!” Así, es muy probable que Adán supiera del “árbol de la vida” y de la expresión de Dios aquí: “El hombre ha llegado a ser como uno de nosotros en conocer el bien y el mal,” por una expresión audible de parte de Jehová Dios, no porque Dios dijera esto en su corazón y entonces hiciera que le viniera alguna revelación inspirada a Adán más tarde. Entonces cuando Adán escribió su segundo documento pudo referirse a este “árbol de la vida en medio del jardín” de Edén.