Rescatando del Armagedón a una grande muchedumbre de la humanidad
“Estos son los que salen de la grande tribulación.”—Rev. 7:14.
1. ¿Por qué espera con ansias la venida de la guerra del Armagedón una muchedumbre cada vez más numerosa de personas?
AMENAZADOR como suene el nombre Armagedón, no significa que se acabará con la raza humana. En realidad la guerra cercana del Armagedón es lo que antecede al tiempo más feliz de que disfrutará la humanidad en toda la historia humana. Es por eso que una cada vez más numerosa “grande muchedumbre” de personas hoy día espera con ansias la venida de esta guerra universal del Armagedón. Por buenas y sólidas razones esperan vivir a través de esa guerra y ver la era próspera y pacífica que viene después de ella. Nuestro deseo es que usted sea una de esas personas felices y llenas de esperanza.
2. ¿Por qué no es el Armagedón algo que nos hayamos imaginado, y por qué no podemos despedirlo de la mente con ligereza?
2 El Armagedón no es algo que nosotros nos hayamos imaginado o inventado. Armagedón, como nombre de un campo de batalla, es una expresión que tiene más de mil ochocientos setenta años de existencia. El nombre aparece una sola vez en un libro de centenares de páginas que se completó hace aproximadamente ese mismo número de años. Debido a lo que se relaciona con él, el nombre nos infunde asombro y maravilla cuando leemos acerca de él. No es un nombre que podamos despedir de nuestra mente con ligereza. Representa algo que tiene que afrontar al fin la raza humana. El tiempo en que lo afrontaremos y experimentaremos está muy cerca. Ahora no podemos detener el acercamiento de la humanidad a él. Es una calamidad necesaria de alcance mundial, pero es para el bien eterno de la humanidad.
3. ¿De qué dos direcciones viene amenaza a la vida de la humanidad, y por qué no es correcta la predicción de la astronomía sobre el destino de nuestro universo?
3 De dos direcciones viene amenaza hoy a la vida de la humanidad. No, con esto no queremos decir que es del bloque oriental de naciones comunistas, totalitarias, dictatoriales, y del bloque occidental de naciones democráticas, imperialistas, capitalistas. Más bien queremos decir de la dirección del hombre mismo y de la dirección del Creador del hombre. En lo que respecta a la creación, la astronomía moderna predice que en algún día remoto nuestra Vía Láctea y otras galaxias del universo que están en expansión invertirán el proceso y contraerán el universo y harán que éste se desplome dentro de sí mismo y triture así a nuestra Tierra y sus habitantes. ¡Pero no será así! Nuestro universo está bajo el control de su Creador, y en su propósito amoroso e incambiable para con la humanidad él no permite que ocurra tal catástrofe. ¿Cómo, entonces, es que de la dirección de Dios el Creador viene amenaza para la humanidad? Por otra parte, ¿cómo es que viene amenaza para la humanidad de la dirección del hombre mismo? ¿De cuál de estas dos direcciones será golpeada la humanidad muy pronto, en seria amenaza a la existencia misma de toda la humanidad?
4. ¿De qué manera amenaza el hombre su propia existencia, y por qué no disminuyó esta amenaza la Sociedad de las Naciones?
4 Mirando en la dirección del hombre, vemos acumularse la evidencia de que el mal manejo de la Tierra por el hombre amenaza la propia existencia de éste. La certeza de esto se ha hecho innegable desde el año trascendental de 1914. Centenares de millones de personas que todavía viven recuerdan vívidamente cómo en aquel año el globo terráqueo entero cayó en el abrazo violento de la primera guerra total. La horrorosa destrucción de vida y propiedad humanas por la I Guerra Mundial dio tal sacudida a los caudillos políticos y religiosos que se pusieron a establecer una organización internacional que salvaguardara la paz y seguridad mundial, la Sociedad de las Naciones. No habría de haber más guerra mundial total. Sin embargo, a pesar de la existencia de una organización internacional para la paz, las naciones consideraron necesario el mantenimiento de fuertes armamentos nacionales de defensa e inventar nuevas armas de guerra para la matanza de la humanidad. Finalmente, en menos de veinte años, gobernantes ambiciosos desafiaron a su cara a la Sociedad de las Naciones, y, en 1939, la II Guerra Mundial empezó a arrastrar a la muerte a sus cincuenta y seis millones de víctimas.
5. ¿Cuándo y para beneficio de quiénes se estableció la Organización de las Naciones Unidas, y por qué han presentado un problema en sí mismos los que son protegidos por esa organización?
5 Cuando terminó la II Guerra Mundial en septiembre de 1945, mientras el eco de la explosión de dos bombas atómicas todavía retumbaba alrededor del mundo, todavía quedaban 2.139.958.919 personas. Ahora los gobernantes mundiales se esforzaron por conservar a estos miles de millones de personas y su prole por medio de una nueva organización para la paz y seguridad mundial, a saber, las Naciones Unidas, en 1945. En las siguientes dos décadas, a pesar de guerras y revoluciones menores, pero peligrosas, se habría de producir una explosión demográfica y la población del mundo alcanzaría la cifra de 3.285.000.000 de personas para el año 1967. (The World Almanac para 1946, Nueva York, página 377; para 1967, página 379) Un aumento tan rápido de la población, sin adecuado control de la natalidad, le presenta al mundo un serio problema de alimentación. Los hombres ahora prevén un mundo medio muerto de inanición antes de muchos años, con todos los efectos, económicos, sociales, políticos y religiosos, que ciertamente acompañarían a esto. Los límites nacionales no se están expandiendo o ensanchando para suministrar lugar para las poblaciones en aumento, y nuestro globo terrestre no se está haciendo más grande para alojar más personas.
6, 7. (a) ¿Por qué han producido un peligro las medidas que se han tomado contra insectos nocivos? (b) ¿Qué han dicho recientemente autoridades competentes acerca de la contaminación del lugar de habitación del hombre?
6 Como en ningún siglo anterior, la Tierra está llegando a ser el lugar para máquinas y fábricas, con el empleo de procesos químicos y, más recientemente, procesos atómicos. Costoso le ha salido esto a la humanidad, porque la contaminación del aire, la tierra y el agua ha alcanzado proporciones críticas. Al parecer se ha hecho más necesario el uso de medios químicos de acabar con los insectos nocivos, y en cuanto a esto un encabezamiento de revista dijo: “Ya el veneno nos rodea por todas partes.” Eso denota peligro.
7 En lo relativo a la contaminación del aire, un Secretario de Salud, Educación y Beneficencia estadounidense recientemente advirtió que en la actualidad el peligro procedente de la contaminación va aventajando a las soluciones, diciendo: “Nos sentimos animados por el progreso que hemos logrado, pero solo hemos empezado a raspar la superficie. El problema no solo permanece crítico, sino que continúa creciendo a un paso más rápido que nuestros esfuerzos por resolverlo.” Y un informe que hizo la Academia Nacional de Ciencias al gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica declara que ha llegado ya el tiempo en que la humanidad no puede estar usando más el aire, el mar y la tierra como su “basurero.” El hombre tendrá que hallar maneras de hacer que sus productos de desecho, tanto sólidos como líquidos, vuelvan por ciclos a la economía. En ciertos respectos, dice el informe sobre la contaminación, “la situación no tiene precedentes y se está haciendo desesperada.”—Times de Nueva York del 8 de junio de 1966 y del 1 de abril de 1966.
8. En contraste con lo anterior, ¿qué peligro hay de una súbita catástrofe mundial, y por qué pronto?
8 Sí, lenta pero seguramente adelanta contra la humanidad una catástrofe por insuficiencia de producción de alimentos y la contaminación general del lugar de habitación del hombre. Pero ya existe peligro mundial de que una ola súbita de destrucción violenta barra sobre el globo terráqueo. Midiendo por el intervalo de tiempo de paz entre las Guerras Mundiales I y II, nuestro actual período de paz mundial desde el fin de la II Guerra Mundial en 1945 ha llegado ahora a su “madurez,” según la fraseología de un artículo de revista. Este ha sido un período de paz lleno de hipocresía, porque ha sido un tiempo de preparaciones internacionales para la III Guerra Mundial, una guerra con horripilantes medios químicos y productores de enfermedad para matar muchedumbres, una guerra con medios de causar gran matanza con radiación, una guerra en que habrá la explosión atronadora y enceguecedora de bombas que dividen o funden los átomos, bombas ya almacenadas en tan grandes cantidades que toda la humanidad podría ser muerta varias veces, si repetidamente se le pudiera restaurar de la muerte a la vida.
9. ¿Por qué va aumentando la probabilidad de que haya una última guerra entre los hombres, y qué piensan algunas naciones en cuanto a ello?
9 Se está haciendo más fácil y más barato y cada vez más generalmente conocido cómo hacer bombas atómicas. Hay un peligro, y esto se reconoce, de que se multiplique el número de las naciones que tienen la bomba atómica, con su propio diseño y manufactura. Esta multiplicación aumentaría la probabilidad de una última guerra mundial, una guerra con bombas nucleares. Hay que detener la fabricación de más bombas de esta clase. Por medio de un tratado entre las naciones se debe imponer una proscripción a la fabricación abundante de bombas por nuevas naciones que adquieran la bomba; eso piensan las autoridades de las naciones que ya poseen la bomba. Su temor es verdadero. Todas las naciones, sean nucleares o no nucleares, están en igual peligro. Por eso el asunto se presentó delante de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarme Mundial, de diecisiete naciones, con urgencia intensificada.
10, 11. (a) En la sesión de apertura de la Conferencia sobre el Desarme Mundial el 21 de febrero, ¿qué mensaje procedente de un dirigente de gobierno se leyó? (b) ¿De qué “equidad” compartida por todas las naciones se advirtió?
10 Como evidencia de esto los periódicos publicaron la propuesta estadounidense de firmar un tratado internacional para imponer una proscripción a la fabricación de armas atómicas. Cuando la Conferencia sobre el Desarme Mundial comenzó sus sesiones de nuevo en 1967 en Ginebra, Suiza, en su sesión de apertura el 21 de febrero se le presentó a la Conferencia un mensaje escrito procedente del presidente estadounidense. El director de la Agencia Estadounidense para el Control de Armamentos y Desarme lo leyó. En este mensaje el presidente Johnson consideró las objeciones que levantaban ciertas naciones que no tenían armas nucleares al plan revisado de Washington de un tratado que prohibía la propagación de las armas nucleares a más naciones. Al concluir su mensaje, el presidente Johnson hizo referencia a la igualdad del peligro común, una igualdad que no permitía opción entre los intereses de las naciones que no tienen armas nucleares y los intereses de las que tienen tales armas.
11 Dijo él: “El simple juicio exige un alto a la competencia en armas nucleares. No existe aquí opción alguna entre los intereses de las naciones nucleares y las no nucleares: Hay una equidad terrible e ineludible en nuestro peligro común. Les deseo la asistencia de Dios en su obra.”—Times de Nueva York, del 22 de febrero de 1967.
12. (a) ¿Qué sugerían las palabras de despedida del presidente Johnson? (b) ¿Qué mostró esta advertencia acerca de la amenaza a la vida de la humanidad?
12 Esas palabras de despedida del presidente sugerían que Dios estaba interesado en salvar a la humanidad por medio de una proscripción contra la propagación de las armas nucleares, o que estaba usando a la Conferencia sobre el Desarme Mundial de diecisiete naciones para evitar que la humanidad cometiera suicidio por medio de guerra nuclear. Aun si está equivocado en esta idea, el presidente comprendía lo terrible de la situación y pudo desear que el Dios Altísimo ayudara a evitar la catástrofe mundial. Una cosa es cierta: la advertencia de Johnson se añade a todas las otras razones ya dadas aquí para mostrar que hay amenaza para la vida de la humanidad desde la dirección del hombre mismo. ¿Se destruirá a sí misma la humanidad antes de que Dios siquiera lo haga? Eso ocurriría de ser cierto lo que afirman algunos teólogos, que “Dios está muerto.”
AMENAZA DESDE LA DIRECCIÓN DE DIOS
13, 14. (a) En lo que respecta a la amenaza que le viene a la humanidad desde Dios, ¿a qué fuente de información debemos ir? (b) ¿Qué no puede negar un escarnecedor acerca de la situación militar del mundo hoy día, y a qué pregunta lleva esto?
13 No obstante, ¿hay verdaderamente amenaza para la vida de la sociedad mundial desde la dirección de Dios? Para saber la respuesta a esta pregunta, tenemos que acudir a la Palabra de Dios, la Santa Biblia, puesto que ésta da profecías para nuestro día y nuestra generación. Que nadie haga escarnio de la idea de acudir a la Biblia para hallar respuestas a preguntas del día moderno. El escarnio no desviará la guerra del Armagedón de que la Biblia habla. Que el que escarnece se pregunte: ¿Por qué existe hoy día en la Tierra tal cosa como una Conferencia sobre el Desarme Mundial? Es porque los miembros de las Naciones Unidas creen que las naciones deben desarmarse. Ningún escarnecedor puede negar que nunca antes han estado las naciones tan pesadamente armadas para la guerra con las armas más destructivas como ahora. Nunca antes han gastado tanto dinero las naciones en hacer armas, y algunas naciones que hacen armas han suministrado armas a naciones pequeñas para ayudarlas a pelear guerras que ya se están efectuando o para guerras futuras.
14 Nunca antes se ha apoderado tan fuertemente el nacionalismo de todas las naciones, aun de las naciones que han surgido recientemente. La Tierra hoy día es un campamento armado; cada nación está en temor de todas las otras naciones o desconfía de ellas o aun de las Naciones Unidas. ¿Adónde están marchando los gobernantes mundiales y sus ejércitos, y por qué a ese lugar?
15, 16. ¿Qué clase de libro da la respuesta a esa pregunta, y qué dice en Revelación 16:13-16?
15 El Libro de más amplia distribución en la Tierra hoy día suministra la respuesta. Aunque se completó hace diecinueve siglos, ese Libro en sus últimos capítulos describe la situación mundial de hoy día y revela adónde están dirigiendo sus fuerzas armadas los gobernantes de toda la tierra habitada. En Revelación 16:13-16 este Libro dice:
16 “Y vi tres expresiones inspiradas inmundas que se parecían a ranas salir de la boca del dragón y de la boca de la bestia salvaje y de la boca del falso profeta. Son, de hecho, expresiones inspiradas por demonios y ejecutan señales, y salen a los reyes de toda la tierra habitada, para reunirlos a la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso. . . . Y los reunieron en el lugar que en hebreo se llama Har–Magedón.”
17. (a) ¿Qué clase de propaganda lleva a los reyes y ejércitos al campo de batalla? (b) ¿Cómo se le llama a veces a esa guerra, quién es el enemigo común, y para quién será un “gran día”?
17 La propaganda que induce a reyes de la Tierra a emprender una guerra universal es innegablemente demoníaca, inhumana. Pero, ¿adónde es que las demoníacas expresiones inspiradas llevan a estos gobernantes que están a la cabeza de sus ejércitos? Es a un lugar o situación que un cristiano hebreo, el apóstol Juan, llama Har–Magedón (o, según algunas traducciones, Armagedón). Allí es donde la guerra final de estos gobernantes terrestres y sus ejércitos se peleará hasta el fin. Pero, ¿quién es el enemigo común de éstos? ¿A quién se están oponiendo? Es a Dios el Todopoderoso, porque a ésta se le llama la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso.” ¿Para quién será un gran día? ¡No para estos reyes y sus ejércitos, sino para Dios el Todopoderoso! Y porque la guerra se pelea en Armagedón, frecuentemente se le llama la guerra o batalla del Armagedón.
18. (a) ¿Por qué no es asunto para risa el de naciones que peleen contra Dios? (b) ¿En qué respectos importantes las naciones no están haciendo la voluntad de Dios?
18 ¿Se ríe alguien ante la idea de que los reyes terrestres y sus ejércitos hayan de pelear contra el Dios invisible, el Creador del universo? Esa risa puede quedar sofocada por casos de la historia humana registrada en que ciertos hombres han peleado contra Dios. El Faraón de Egipto del siglo decimosexto antes de nuestra era común lo hizo y sufrió las consecuencias. El rey Senaquerib del Imperio Asirio del siglo octavo antes de la era común lo hizo, y perdió 185.000 de sus soldados en una sola noche. Entonces, ¿qué hay de hoy día? Bueno, hoy día los gobernantes terrestres y sus ejércitos están amenazando la existencia misma de todos los hombres por medios científicos modernos. En esto, ¿están haciendo la voluntad de Dios el Todopoderoso? Al mantener a la entera raza humana dividida y llena de hostilidad mutua por medio de mantener gobiernos nacionales llenos de envidia, ¿están actuando los gobernantes mundiales, apoyados por sus ejércitos, en armonía con la voluntad de Dios?
19. (a) Aunque vocean la expresión “Por Dios y por la Patria,” ¿qué hacen las naciones en cuanto a sus países? (b) Por lo tanto, ¿qué testimonio no aceptan?
19 Patrióticamente, quizás voceen el lema: “Por Dios y por la Patria,” pero, ¿están los gobernantes humanos de la Tierra realmente tratando de evitar que su país pase a las manos de Dios? ¿Niegan ellos al Creador la posesión de su propia creación, nuestra Tierra, todos los países de ella? Mientras las naciones siguen insistiendo inflexiblemente en sus propias soberanías nacionales, ¿están ellas desafiando la soberanía legítima de Dios sobre la Tierra? Y por sus fuerzas armadas, ¿están tratando de evitar que el Dios Creador de la Tierra, el Soberano Universal, se apodere completamente del dominio de toda la Tierra? Sí, y por eso es que no aceptan “estas buenas nuevas del reino,” que Jesucristo dijo que se predicarían en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones antes que le venga el fin al sistema de cosas actual.—Mat. 24:14; Mar. 13:10.
20, 21. (a) ¿Contra quién, pues, dice la Biblia claramente que los gobernantes de la cristiandad y el paganismo pelearán? (b) En prueba de esto, ¿qué dice Revelación 19:11-16?
20 Fuera de toda duda, los reyes y sus ejércitos están alineándose para presentar un frente unido contra Dios el Todopoderoso en Armagedón. El propio Libro de Dios, la Santa Biblia, dice que es contra él y su Hijo, el futuro Rey de la Tierra, que todos los gobernantes terrestres, sus ejércitos y sus apoyadores pelean en Armagedón. El último libro de la Santa Biblia declara denodadamente ese hecho a la cara de los gobernantes de la cristiandad y del paganismo. Si rehúsan leerlo y ver cómo les aplica, leámoslo nosotros aquí:
21 “Y vi el cielo abierto, y, ¡miren! un caballo blanco. Y el que iba sentado sobre él se llama Fiel y Verdadero, y juzga y lleva a cabo guerra en justicia. . . . y el nombre con que se le llama es La Palabra de Dios. También, los ejércitos que estaban en el cielo le seguían en caballos blancos, y estaban vestidos de lino fino, blanco y limpio. Y de su boca sale una aguda espada larga, para que hiera con ella a las naciones, y las pastoreará con vara de hierro. Pisa también el lagar de vino de la cólera de la ira de Dios el Todopoderoso. Y sobre su prenda exterior de vestir, aun sobre su muslo, tiene un nombre escrito: Rey de reyes y Señor de señores. . . .
22. Según Revelación 19:17-21, ¿qué le sucede a los que guerrean en la Tierra?
22 “Y vi a la bestia salvaje y a los reyes de la tierra y a sus ejércitos reunidos para hacer la guerra contra el que iba sentado en el caballo y contra su ejército. Y la bestia salvaje fue prendida, y junto con ella el falso profeta que ejecutó delante de ella las señales con las cuales extravió a los que recibieron la marca de la bestia salvaje y a los que rinden adoración a su imagen. Estando todavía vivos, ambos fueron arrojados al lago de fuego que arde con azufre. Pero los demás fueron muertos con la espada larga del que iba sentado en el caballo, la cual espada salía de su boca. Y todas las aves se saciaron de las carnes de ellos.”—Rev. 19:11-21.
23. ¿Cómo se suministrará en el Armagedón la “gran cena de Dios,” y por medio de quién será vindicado Dios, y en qué respecto?
23 Esa es la guerra final del Armagedón, según la profecía bíblica inspirada. Los gobernantes terrestres y sus ejércitos no conseguirán ninguna gloria de ella. La larga espada de juicio que sale de la boca del victorioso Rey de reyes y Señor de señores los sentenciará a destrucción, y sus ejércitos angelicales ejecutarán esa sentencia. La destrucción de los opositores del reino de Dios allí en Armagedón no incluirá solamente a los reyes o gobernantes y sus ejércitos. Según las palabras expresadas por el ángel de Dios, incluye a los comandantes militares, hombres fuertes, caballos y los que están sentados sobre ellos, libres y esclavos, y personas pequeñas y grandes. Sus cuerpos no enterrados servirán como “gran cena de Dios” que él proveerá para criaturas que viven de carroña, porque Dios es el responsable del degüello. (Rev. 19:17, 18) Tal victoria marcará el “gran día” de Dios el Todopoderoso. ¡Por medio de Jesucristo el Rey de reyes y Señor de señores, el Todopoderoso vindicará su propia soberanía universal!
24. (a) ¿Qué clase de conflicto están tratando de evitar las naciones hoy? (b) ¿Por qué hay necesidad extrema de rescatar a las personas del Armagedón?
24 A la luz de esa revelación profética, ¿comprendemos lo grave de lo que se acerca? Esa guerra venidera del Armagedón significa la culminación de un tiempo de dificultad como el cual la humanidad nunca ha conocido uno antes. Los gobernantes terrestres están meramente tratando de evitar un conflicto de grandes proporciones entre ellos mismos. Pero no están tratando de evitar este conflicto de grandes proporciones con el Dios Todopoderoso el Creador. ¿A qué, entonces, están conduciendo los gobernantes humanos sus ejércitos, bajo las expresiones de propaganda inspiradas por demonios? Es a una destrucción que amenaza desde la dirección de Dios. No habrá escape para el sistema de cosas actual y para los que lo apoyan. ¿Sorprende el que haya necesidad extrema de que se rescate del Armagedón a las personas?
¡LA EXTREMA NECESIDAD DE RESCATE!
25, 26. (a) En el Armagedón, ¿quién probará que es Rey de reyes y Señor de señores, y cómo? (b) ¿Con qué advertencia predijo este tiempo de tribulación y su culminación, en Mateo 24:19-39?
25 Jesucristo, ahora resucitado de su muerte sacrificatoria y glorificado en los cielos, tiene la comisión de pelear esa guerra del Armagedón. Allí este “Cordero de Dios,” que una vez fue sacrificado, demostrará que es el Rey de reyes y Señor de señores, porque ningún rey ni señor terrestre podrá resistirle y vencer. (Juan 1:29, 36; Rev. 17:14) Como el más grande Profeta de Dios, él predijo esta guerra del Armagedón, porque Dios lo usó hace mil novecientos años para entregar la Revelación que contiene el nombre y la descripción del Armagedón. (Rev. 1:1; 22:16, 20) Además de eso, tres días antes de su muerte en sacrificio fuera de los muros de Jerusalén, él predijo este período actual de tribulación mundial y su gran culminación en el Armagedón y lo llamó una dificultad inigualada. Dijo:
26 “¡Ay de las mujeres que estén encintas y de las que den de mamar en aquellos días! Sigan orando que su huida no ocurra en tiempo de invierno, ni en día de sábado; porque habrá entonces tribulación grande como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder. De hecho, a menos que se acortaran aquellos días, ninguna carne se salvaría; mas por causa de los escogidos serán acortados aquellos días. . . . Respecto a aquel día y hora nadie sabe, ni los ángeles de los cielos, ni el Hijo, sino solo el Padre. Porque así como eran los días de Noé, así será la presencia del Hijo del hombre. Porque así como en aquellos días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, los hombres casándose y las mujeres dándose en matrimonio, hasta el día en que Noé entró en el arca; y no hicieron caso hasta que vino el diluvio y los barrió a todos, así será la presencia del Hijo del hombre.”—Mat. 24:19-39.
27. En cuanto a pérdida de vida humana, ¿qué comparación hay entre el diluvio del día de Noé y la guerra del Armagedón?
27 El gran diluvio del día de Noé fue, hasta entonces, una catástrofe sin paralelo para el hombre. Eso fue mil seiscientos cincuenta y seis años después de la creación del hombre. En aquel tiempo la población de la Tierra no era tan grande como ahora, más de cuarenta y tres siglos después del Diluvio. Por lo tanto hay más vidas humanas amenazadas, porque, como el diluvio del día de Noé, la guerra del Armagedón afectará a toda la Tierra. No quedará exceptuado ningún país o lugar de esta tierra habitada. No habrá opositores, ni personas que no estén de parte del reino de Dios y de su Rey ungido Jesucristo, que sean pasados por alto. La pérdida de vida humana no tendrá igual en la historia del hombre.
28. ¿Se matará a la gente sin hacer distinción en el Armagedón?
28 No habrá un matar confuso, accidental y sin hacer distinción de los habitantes de la Tierra como habría en una tercera guerra mundial con tremendos explosivos portados por proyectiles, gérmenes productores de enfermedad, gases y venenos químicos, y medios radiológicos. En el Armagedón Jehová Dios peleará por medio de su Guerrero Jesucristo contra sus enemigos, contra los amigos de este mundo descarriado, no contra sus propios amigos. ¡Recuerde a Noé y su familia, en total ocho almas humanas, en el arca durante el cataclismo acuoso de cuarenta días por toda la Tierra! Son un cuadro de esperanza.
29. (a) El que Jesús comparara los días de su segunda presencia con los días de Noé indica esperanza de ¿qué supervivencia? (b) ¿Por qué permanecerá sin igual la guerra del Armagedón como catástrofe humana?
29 ¿Habrá, entonces, en la Tierra sobrevivientes de la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso en Armagedón? ¡La propia infalible Palabra escrita del Dios Todopoderoso responde: Sí! Jesucristo comparó los días de su segunda presencia y de su venida a la guerra del Armagedón con los días de Noé en relación con el Diluvio. Correspondientemente, si hubo ocho sobrevivientes de aquel diluvio, entonces debería de haber sobrevivientes de la segunda presencia del Hijo del hombre y los sucesos que la marcan. El apóstol Pedro, escritor de dos cartas inspiradas que son parte de la Santa Biblia, dice: Dios “no se contuvo de castigar a un mundo antiguo, pero guardó en seguridad a Noé, predicador de justicia, con otras siete personas cuando trajo un diluvio sobre un mundo de gente impía.” (2 Ped. 2:5) La guerra venidera del Armagedón será peor que aquel diluvio o cualquier otra dificultad o tribulación “desde el principio del mundo hasta ahora.” Nunca ocurrirá de nuevo una tribulación como el Armagedón, porque no será necesaria. Como en el día de Noé, cualesquier humanos que sobrevivan la guerra del Armagedón tendrán que ser rescatados de ella. ¡Algunos lo serán!