Dando a conocer las buenas nuevas por toda la Tierra
JEHOVÁ DIOS siempre ha tenido testigos que declaren su soberanía. Abel fue el primero de la larga línea. (Mat. 23:35; Heb. 11:4; 12:1) Posteriormente, cuando surgió una cuestión entre las naciones tocante a su Divinidad, Jehová le dijo a la entera nación de Israel: “Ustedes son mis testigos.” (Isa. 43:10-12; 44:8) Jesucristo es el Testigo Principal de Dios. Se llamó a sí mismo “el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación por Dios.”—Rev. 3:14.
Todos los seguidores verdaderos de Jesucristo son, por consiguiente, testigos para el nombre y propósitos de Jehová por medio de Cristo. Dios formó a la congregación cristiana, como señaló el apóstol Pedro al testificar delante del cuerpo gobernante cristiano del primer siglo. (Hech. 15:7, 8, 14; 1 Ped. 2:9) En tiempos específicos de juicio se proclamaron extensa e intensivamente el nombre y el propósito de Dios. Para un ejemplo sobresaliente podemos señalar al tiempo de cuarenta años antes del fin del sistema de cosas judío en 70 E.C., cuando Jerusalén fue destruida. Jesús y sus discípulos fueron los proclamadores de los propósitos de Dios para con aquella nación, y se hicieron numerosos y señaladamente conspicuos, aun a sus enemigos. (Hech. 17:6; 28:22) También, antes del diluvio global del día de Noé, y antes de la primera destrucción de Jerusalén por los babilonios en 607 a. de la E.C., se dio una advertencia cabal, la cual no pudo ser pasada por alto.—2 Ped. 2:5; Jer. 25:8-12.
De modo que hoy, en la conclusión del sistema de cosas actual, se tiene que efectuar una proclamación aun más trascendente e intensiva. Se está efectuando. En 216 países, entre ellos países en los cuales los testigos de Jehová tienen que efectuar su obra “clandestinamente,” más de dos millones de personas están predicando y enseñando las “buenas nuevas” del reino de justicia de Dios y advirtiendo que la iniquidad será destruida en la Tierra.
LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ EN TIEMPOS MODERNOS
La obra moderna de los testigos cristianos de Jehová recibió ímpetu alrededor de 1872 con un grupito de hombres que se interesó especialmente en lo que la Biblia dice tocante a la vuelta de Cristo. También concentraron mucha atención en la enseñanza bíblica del sacrificio de rescate de Jesucristo. Charles Taze Russell fue prominente en establecer grupos de estudio entre las personas que se interesaban en la Biblia. Reconociendo la importancia de dar a conocer a otros los resultados de su investigación bíblica, estos estudiantes de la Biblia organizaron una corporación para satisfacer los requisitos legales necesarios para la diseminación de las verdades bíblicas en varios idiomas por medio de publicaciones impresas. C. T. Russell fue electo presidente de la corporación que ahora se conoce como la Sociedad Watch Tower Bible and Tract de Pensilvania. Fue estatuida en 1884. En muchos países se han formado también otras corporaciones, para que cooperen con la Sociedad ya mencionada.
El segundo presidente de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract fue Joseph F. Rutherford, que sirvió desde cuando murió Russell en 1916 hasta su propia muerte en 1942. Desde ese tiempo Nathan H. Knorr sirvió en esta capacidad, hasta su muerte el 8 de junio de 1977, después de lo cual Frederick W. Franz fue electo presidente.
LA LITERATURA BÍBLICA Y SU PREPARACIÓN
Bajo la supervisión de un cuerpo gobernante central con residencia en Brooklyn, Nueva York, se prepara literatura que considera y explica la Biblia. El órgano principal de los testigos de Jehová para diseminar las verdades bíblicas es La Atalaya. Esta revista empezó con una edición de 6.000 ejemplares en julio de 1879, y ha aumentado hasta tener una circulación de 9.800.000 en 79 idiomas desde la fecha del 1 de enero de 1978. Una revista compañera, ¡Despertad!, empezó a publicarse en inglés como The Golden Age en 1919 y posteriormente (de 1937 a 1946) como Consolación. La circulación de ¡Despertad! con fecha de 8 de enero de 1978, fue de 8.900.000 en 33 idiomas.
La Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras en inglés es una traducción de toda la Biblia en lenguaje moderno, hecha de los textos hebreo y griego originales. Un comité de cristianos plenamente dedicados efectuó esta obra. El mismo comité también preparó The Kingdom Interlinear Translation of the Greek Scriptures, que contiene el texto de Westcott y Hort con una traducción literal interlineal en inglés, y la Traducción del Nuevo Mundo en inglés en la columna de la derecha. Estas han sido grandes ayudas para el estudio de la Biblia. La Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras ha sido traducida del inglés al alemán, español, francés, holandés, italiano y portugués, y la porción de las Escrituras Griegas ha sido traducida al danés, finlandés, japonés y sueco.
El libro de más extensa distribución de los muchos libros para el estudio de la Biblia que han publicado los testigos de Jehová, aparte de la Biblia, es La verdad que lleva a vida eterna. Este es principalmente un estudio doctrinal. Las cifras de publicación de este libro de cubierta dura de 192 páginas, que se presentó en 1968, eran de 89.000.000 de ejemplares en 101 idiomas hasta enero de 1978. Centenares de miles de estudios bíblicos se llevan a cabo en los hogares de las personas que se interesan en estudiar, utilizando este libro y otros como ayudas para el estudio.
Corresponsales y contribuyentes de muchos países suministran artículos para La Atalaya y ¡Despertad! En la oficina central de Brooklyn, Nueva York, un cuerpo de redactores también escribe material, y prepara artículos contribuidos, para publicación.
PLANTAS TIPOGRÁFICAS
Los testigos de Jehová mantienen una planta tipográfica o imprenta grande en Brooklyn, Nueva York, y tienen una imprenta subsidiaria cerca de Wallkill, Nueva York. Algunas de las otras plantas tipográficas funcionan en Alemania, Australia, Brasil, Canadá, Finlandia, Francia, Ghana, Grecia, Inglaterra, Italia, Japón, Nigeria, República de las Filipinas, República Sudafricana, Suecia y Suiza. De las 96 sucursales que se usan para dirigir la obra en 216 países, más de 30 efectúan impresión local de revistas u otra literatura. Durante el año de servicio (septiembre a agosto) de 1975 a 1976 produjeron 2.484.919 Biblias y 102.638.842 libros encuadernados y folletos que explican la Biblia. Además, se imprimieron 513.282.880 revistas. El personal de estas imprentas se compone de voluntarios, todos testigos de Jehová. Sirven en estas imprentas y oficinas sucursales, y viven en hogares que se proveen para el personal; reciben alojamiento y comidas y una pequeña ayuda mensual. Se suministran giras gratuitas con guía a los visitantes a estas oficinas sucursales, hogares y plantas tipográficas.
La literatura bíblica ha servido de gran ayuda a los testigos de Jehová para proclamar las “buenas nuevas” al mayor número posible de personas en el corto tiempo que le queda a este sistema de cosas. Estas ayudas para el estudio de la Biblia se colocan en manos los que muestran interés; se acepta por ellas una pequeña contribución. También se obsequia mucha literatura a los que no pueden contribuir. Los testigos de Jehová hacen revisitas, o vuelven a visitar, a las personas que manifiestan interés, y conducen estudios bíblicos gratuitos en los hogares de los que desean saber más en cuanto a la Palabra y el propósito de Dios.
Los testigos cristianos de Jehová han distribuido más de mil millones de Biblias, libros y folletos y miles de millones de revistas La Atalaya y ¡Despertad! Además, los suscriptores de estas revistas son millones de personas.
EXPANSIÓN POR TODO EL MUNDO
En las últimas décadas, en particular desde 1950, los testigos de Jehová han ensanchado fenomenalmente su actividad de testificar. En más de 41.600 congregaciones por todo el mundo, más de dos millones de testigos de Jehová están activamente proclamando las “buenas nuevas.” Se asocian con ellos en sus reuniones de congregación otros millones de personas que están aprendiendo acerca de los propósitos de Dios y a las cuales se entrena para que participen en esta misma obra. El domingo 3 de abril de 1977, en la celebración anual de la Conmemoración de la muerte de Cristo, “la cena del Señor,” hubo presentes más de 5.089.000 personas.—1 Cor. 11:20; Mat. 26:20-30.
Por medio de misioneros la obra ha llegado a muchos países de la Tierra. Para suministrar entrenamiento especial para este servicio, en 1943 se inauguró la Escuela Bíblica de Galaad de la Watchtower. Desde ese tiempo, aproximadamente 6.000 estudiantes se han graduado. Muchos de éstos todavía sirven en calidad de trabajadores de tiempo cabal (de horario completo o jornada completa) en asignaciones por toda la Tierra. La asistencia a la Escuela se efectúa por invitación especial. Se selecciona a los estudiantes de entre los testigos de Jehová que participan de tiempo cabal u horario completo en la obra de testificar y cuya salud y circunstancias les permiten calificar para rendir servicio en otro país. El principal libro de texto de la Escuela es la Biblia. Las asignaturas principales han sido: doctrina bíblica, funcionamiento de la congregación, testificación y enseñanza eficaces, y un idioma extranjero o segundo. En la actualidad el curso dura sólo cinco meses, pero es muy concentrado e intensivo.
Al graduarse, a los estudiantes se les asigna a hogares misionales u oficinas sucursales, provistos y sostenidos por los testigos de Jehová. Así los misioneros no tienen que preocuparse por las necesidades materiales cotidianas y pueden dedicar todo el tiempo a declarar a la gente las “buenas nuevas” al visitarla en sus hogares. Los misioneros de los testigos de Jehová aprenden el idioma local y van a la gente; trabajan duro en la proclamación de las “buenas nuevas” en el territorio asignado. Establecen congregaciones con las cuales se asocian como miembros, y educan o entrenan a los que aceptan las “buenas nuevas” en testificar y enseñar, en trabajos dentro de la congregación y en organizar asambleas pequeñas y grandes. En muchos países en los cuales los misioneros han dado comienzo a la obra, la carga de la responsabilidad de atender la obra está ahora en manos de la gente de esos países. A los misioneros les llena de felicidad el servir hombro a hombro con estos excelentes nuevos hermanos cristianos suyos.
ASAMBLEAS
La más grande reunión en una asamblea de testigos de Jehová fue la de 253.922 personas que atestaron el Estadio Yanqui y el Polo Grounds de la ciudad de Nueva York en 1958. Cada año, además de pequeñas “asambleas de circuito” a las que asisten de unos centenares a varios miles de personas, hay asambleas mayores, de “distrito” o nacionales o internacionales. A menudo se celebran varias asambleas en lugares convenientes de un país, para que el mayor número posible de personas asista. El programa de la asamblea es el mismo en todo lugar por todo el mundo. Un informe sobre las asambleas “Servicio Sagrado” que se celebraron mundialmente en 1976 mostró que más de 3.360.000 personas asistieron a las asambleas en 96 países.
En cada asamblea de los testigos de Jehová se hacen arreglos para el bautismo de los que han tomado un curso de estudio con los testigos de Jehová y que desean seguir el ejemplo de Cristo al ser sumergidos así en agua. Mediante este acto y con fe en el sacrificio de expiación de Cristo, simbolizan su dedicación a Dios. (Mat. 3:15; 28:19, 20) Durante los tres años desde 1974 a 1976 el total de personas que los testigos de Jehová bautizaron fue de 789.601; en 1977 se bautizaron otras 124.459. Año tras año aumenta la cantidad de las personas que se unen a las filas de los proclamadores de las “buenas nuevas,” y muchas más están prestando atención a la advertencia de que el fin de este sistema de cosas está muy cerca y que el justo reinado de mil años de Cristo se ha acercado para librar a la Tierra del pecado, la enfermedad y la muerte.—Rev. 21:1-4.
[Ilustración de la página 26]
Millones de ejemplares de literatura bíblica se producen anualmente en esta gran planta tipográfica en Brooklyn, Nueva York, y en su planta subsidiaria ubicada cerca de Wallkill, Nueva York (que se muestra abajo). Estas imprentas sirven para suplir lo necesario a los testigos de Jehová por todo el mundo
[Ilustración de la página 27]
Los testigos de Jehová utilizan más de setenta rotativas; ésta está en el Japón
[Ilustraciones de la página 25]
Charles T. Russell
Joseph F. Rutherford
Nathan H. Knorr
Frederick W. Franz