Entrénate teniendo como mira la devoción piadosa
“Ve entrenándote teniendo como mira la devoción piadosa.” (1 TIMOTEO 4:7.)
1. ¿Por qué no pudo ganar cierta buena corredora?
ELLA era la mejor corredora que tenía su equipo para la prueba atlética. Sus anteriores victorias le habían dado reputación nacional. Así, se esperaba que ganara en aquella famosa prueba. Sin embargo, para la desilusión de su entrenador, de sus compañeros de equipo y para la suya propia, corrió la peor carrera de su vida. ¿Por qué? “Aflojé en las prácticas y dejé de entrenarme vigorosamente”, admitió la joven sumamente avergonzada. “Mi entrenador trató de obligarme a que me esforzara más en mis ejercicios de entrenamiento y me dio advertencias, pero no le escuché.” El que ella no se entrenara apropiadamente le costó la victoria que ella aspiraba.
2. ¿De qué manera deben entrenarse los cristianos, y por qué deberían todos querer saber cómo hacerlo?
2 Como cristiano, particularmente si eres joven, tú también tienes que someterte a un entrenamiento que es vital. “Ve entrenándote teniendo como mira la devoción piadosa” (1 Timoteo 4:7). La palabra griega para “ve entrenándote” (gymnazo) describe los ejercicios vigorosos y a menudo dolorosos que los atletas ejecutaban en el gimnasio. Por eso, respecto a la devoción piadosa y sus recompensas, el apóstol Pablo añadió: “A este fin estamos trabajando duro y esforzándonos” (1 Timoteo 4:10). Esta cualidad esencial no se adquiere sin hacer ningún esfuerzo ni tampoco se pega de los padres piadosos. Pero ¿qué pasos debes dar? Los cristianos de toda edad deberían querer saberlo.
Buena comunicación con Dios
3. a) ¿Por qué es tan importante el estudio personal? b) ¿Qué cualidades de Dios te atraen?
3 Puesto que la devoción piadosa requiere aprecio sincero por las cualidades de Jehová, necesitas saber cómo es él realmente. Jehová indica esto en la Biblia. Pero tienes que estudiar cuidadosamente su Palabra y las publicaciones basadas en la Biblia para que puedas estar “nutrido con las palabras de la fe y de la excelente enseñanza” (1 Timoteo 4:6). Dicho estudio te ayudará a ver “la agradabilidad de Jehová”. (Salmo 27:4.)
4. ¿Qué experiencias muestran el valor del estudio personal, y qué preguntas deberías considerar seriamente?
4 “Mientras más una aprende acerca de Jehová, más allegada se siente una a él”, declara cierta evangelizadora de tiempo completo (precursora) de 22 años de edad. “Cuando leo las profecías y veo cómo se han cumplido, me lleno de un temor reverente para con él. El estudio personal es lo que realmente me ayuda.” Un joven de 16 años de edad, que había estado muy deprimido, escribió lo siguiente acerca de uno de los artículos de la serie “Los jóvenes preguntan”, que aparece con regularidad en la revista ¡Despertad!: “Este artículo se publicó justamente cuando ya había perdido toda esperanza. ¡Yo estaba tan entusiasmado que no podía dejar de leerlo! Me hizo sentir mucho más allegado a Jehová y entender que él es comprensivo y muestra muchísimo interés. Creo que ahora puedo encararme a la situación”a. ¿Te esmeras en leer cada número de nuestras revistas? Aunque requiere esfuerzo, ¿dedicas tiempo a alimentar la mente y el corazón mediante el estudio personal de la Biblia? Si efectúas tu propia investigación, realmente puedes convencerte a ti mismo de que tienes la verdad. Cuando este conocimiento llega al corazón, es casi seguro que te moverá, pues es “la enseñanza que va de acuerdo con la devoción piadosa”. (1 Timoteo 6:3; Romanos 12:2.)
5, 6. ¿Qué clase de oraciones te acercan más a Dios? Da un ejemplo.
5 La buena comunicación con Dios incluye también las oraciones sinceras y específicas. Estas ayudan a edificar una amistad personal con Jehová. Cuando cometas errores, muéstrate dispuesto a suplicar como lo hizo David: “De los pecados de mi juventud y de mis sublevaciones, oh, no te acuerdes” (Salmo 25:7, 11). Y confía en que él te perdonará si estás arrepentido. Aprende a persistir en la oración, dando a conocer lo que hay en tu corazón. Cierta joven, aunque se había criado en un hogar piadoso, había permitido que un impedimento en el habla obstaculizara su participación activa en la religión verdadera. “Entonces, cierta noche —reveló esta joven de 22 años de edad— le rogué a Jehová: ‘Ayúdame a querer servirte, pero no solo porque los ancianos o mis padres quieran que lo haga’.” ¡Cómo empezó a cambiar su vida! A pesar de que tartamudeaba, ella comenzó a participar de lleno en el ministerio. Gozosamente, ella dice: “Ahora confío mucho más en Jehová porque sé que él tiene éxito siempre”. (Salmo 62:8.)
6 Una cristiana joven oró específicamente respecto a los planes que tenía de ser precursora. Cuando sus oraciones fueron contestadas, ella exclamó: “¡Sabía que Jehová era real y que se interesa en nosotros! Antes creía que estaba allegada a él, pero ahora es como si fuera un amigo... el mejor que tengo”. Jehová no siempre contesta de manera espectacular, pero si eres sincero y obras en armonía con tus oraciones, llegarás a apreciar Su guía amorosa. (Salmo 145:18.)
Mantén una buena conciencia
7. ¿Qué es la conciencia, y por qué tienes que mantener una buena conciencia?
7 Cuando Pablo instó a Timoteo a que continuara “manteniendo [...] una buena conciencia”, el apóstol sabía que se requeriría esfuerzo con resolución (1 Timoteo 1:19). ¿Por qué? Nuestra conciencia es la capacidad que Dios nos ha dado para examinarnos y para juzgar lo que hemos hecho o pensamos hacer. Puede ‘acusarnos’, al condenar dolorosamente nuestro derrotero, o ‘excusarnos’, al aprobar la cosa correcta que hayamos hecho (Romanos 2:15). Pero si se descarría, puede comunicar mensajes defectuosos. Algunas personas de conciencia defectuosa pueden actuar como animales crueles, y, sin embargo, la ‘voz interior’ no los ‘acusa’. Hasta pueden ‘declarar públicamente que conocen a Dios, pero por sus obras repudiarlo’. ¿Cómo puedes evitar que se desarrolle en ti una conciencia defectuosa? (Tito 1:10-16.)
8. ¿Cómo ‘echaron a un lado’ una buena conciencia algunos cristianos del primer siglo?
8 Pablo había dicho a Timoteo que algunos cristianos habían “echado a un lado” su buena conciencia debido a ‘haber prestado atención a cuentos falsos’ y a “vanas palabrerías que violan lo que es santo” (1 Timoteo 1:4, 19, 20; 6:20; 2 Timoteo 2:16-18). Debido a que escucharon estas cosas, la fe de ellos fue socavada, lo cual resultó en naufragio espiritual. No obstante, Pablo mostró que había otras cosas aparte de las enseñanzas apóstatas que estaban “en oposición a la enseñanza sana”. En 1 Timoteo 1:9, 10 él alista cosas como el asesinato, la fornicación y la homosexualidad.
9, 10. a) ¿Qué podemos aprender del ejemplo de una pareja cristiana que no mantuvo una buena conciencia? b) ¿Cómo podemos evitar que nuestra conciencia se cauterice?
9 Hoy día muchos programas de televisión, muchas películas y la página impresa están saturados de inmoralidad sexual. Si alimentamos la mente con estas cosas, nuestra conciencia puede cauterizarse gradualmente. Esto le ocurrió a una pareja joven de cristianos que cometieron fornicación poco antes del día de su boda. “Me parece que lo que habíamos estado mirando en la televisión contribuyó a lo que nos ocurrió —admite la joven—. Constantemente se ven personas besuqueándose y acariciándose, de modo que no parece ser un asunto grave. Uno se acostumbra a verlo. Así, comenzamos a hacerlo. ¡Si tan solo yo hubiera pensado más en cuanto a la gravedad de la situación!” Antes de darse cuenta, ella perdió su buena conciencia. El joven añadió: “Yo tenía problemas con la masturbación también, y esto cauteriza la conciencia de modo que no resulta tan difícil besuquearse y acariciarse, y finalmente cometer fornicación”. Aunque parecía que estaban dando un buen ejemplo ante otras personas, lo que ellos habían estado mirando para entretenerse y el que él participara en secreto en una práctica inmunda habían contribuido a que la conciencia se hiciera insensible, tal como la carne se cauteriza cuando un hierro de marcar candente la toca repetidas veces. (1 Timoteo 4:2.)
10 ¿Pudiera ser que lo que miras o lees para entretenerte haya contribuido a que también tu conciencia se haya hecho insensible? ¿Estás en realidad trabajando duro para vencer algún hábito malo que podría contaminar tu conciencia? Para tu protección, puedes tomar acción positiva por medio de leer —y releer— literatura bíblica que trate especialmente con el problema que tengas o considerar el problema con un anciano. El tener una conciencia buena y limpia es un don precioso procedente de Dios que nos ayudará a desarrollar la devoción piadosa. ¡No dejes que nada te prive de ella!
Escoge asociados apropiados
11, 12. a) ¿Qué advertencia se da en 2 Timoteo 2:20, 21? b) ¿Cómo puedes prestar atención a esta advertencia?
11 El apóstol Pablo escribe: “En una casa grande [la congregación] no hay solamente vasos de oro y de plata, sino también de madera y barro, y algunos para un propósito honroso mas otros para un propósito falto de honra. Si pues alguien se mantiene apartado de éstos, será vaso para propósito honroso, santificado, útil a su dueño, preparado para toda buena obra” (2 Timoteo 2:20, 21). Los amigos que escogemos influyen muchísimo en nuestras emociones y nuestra conducta. Es patente que los que no son creyentes no son los mejores asociados. Pero Pablo muestra francamente aquí que hasta en la congregación podrían haber asociados indeseables. Es cierto que tal vez halles que es divertido estar con tales personas, pero la influencia que ejercen nunca te ayudará a ‘huir de los deseos incidentales a la juventud’ ni a desarrollar la devoción piadosa. Busca en la congregación a las personas cuya asociación sea edificante. Pablo continúa diciendo en el 2Ti 2 versículo 22: “Sigue tras la justicia, la fe, el amor, la paz, junto con los que de corazón limpio invocan al Señor”. (Compárese con Filipenses 4:8, 9.)
12 Considera el caso de cierta joven cristiana que, aunque recibió entrenamiento piadoso, siempre estaba metiéndose en problemas. “Se debía principalmente a las personas con quienes me asociaba”, dijo ella. Cuando vio que su vida se estaba convirtiendo en un fracaso, cambió de amigos. Ella concluye: “Si la persona se asocia con amigos que aman a Jehová, esto la ayuda a mantener una conciencia sensible y a no meterse en problemas. Cuando dichas amistades expresan desagrado por lo que es malo, esto hace que uno se sienta del mismo modo”. Al apartarse de asociados cuya reputación era dudosa, ella se convirtió en un vaso “útil a su dueño, [preparada] para toda buena obra”. Después de haber servido de precursora durante diez años, ella añade: “Hallo que ahora Jehová me ha utilizado para ayudar a otras personas”. (2 Timoteo 2:21; Proverbios 15:31.)
13. ¿Cómo puedes determinar quiénes son buenos asociados, y qué influencia podrían tener ellos en ti?
13 Por eso considera a tus asociados de manera realista. ¿Siguen ellos tras la justicia, la fe, el amor basado en principios y la paz? ¿Están llenos de celo cristiano? El buscar la compañía de los que sean así puede ayudarte a que tú también llegues a ser un ejemplo en el hablar, en conducta, en amor, en fe y en castidad, tal como lo fue Timoteo, asociado íntimo de Pablo. Esto no quiere decir que tienes que ser frío o poco amigable con aquellos cuya conducta no sea tan ejemplar. Tu propio ejemplo gozoso podría mover a estos, también, a hacer sendas rectas para sus pies. (1 Timoteo 4:12; Hebreos 12:12-15.)
Haz sacrificios para Dios
14, 15. a) ¿Qué se requería de los atletas de la antigüedad mientras se entrenaban? b) ¿Qué obra requiere que se hagan sacrificios, y qué buenos ejemplos tenemos?
14 Durante los días de Timoteo, todo atleta ejercía “gobierno de sí mismo en todas las cosas” mientras se entrenaba, negándose a sí mismo muchos placeres legítimos (1 Corintios 9:25). Llevaba una dieta estricta. De acuerdo con Horacio, poeta del primer siglo antes de la E.C., los atletas se “abstenían de mujeres y de vino” para “alcanzar la meta que tanto anhelaban”. De igual manera, el que te entrenes teniendo en mira la devoción piadosa exige sacrificio. Pablo dijo respecto a Timoteo: “No tengo a ningún otro de disposición como la de él [...] Porque todos los demás están buscando sus propios intereses, no los de Cristo Jesús. Pero [...] él [...] sirvió como esclavo conmigo en el adelanto de las buenas nuevas”. (Filipenses 2:19-22.)
15 A Timoteo se le exhortó: “Haz la obra de evangelizador, efectúa tu ministerio plenamente” (2 Timoteo 4:5). Prescindiendo de lo atrayentes que pudieran haber sido sus intereses personales, él los sacrificó para poder completar la obra de Dios. ¿Estás dispuesto a hacer lo mismo? Hoy día algunos cristianos jóvenes que están libres de responsabilidades bíblicas de peso han proseguido hacia una educación superior o han aceptado empleos de tiempo completo bien remunerados en vez de hacer del ministerio cristiano su carrera. Cierto joven esperaba ansiosamente conseguir un empleo como este. Pero antes de empezar a trabajar, aceptó la invitación de una pareja de precursores para participar con ellos en el servicio del campo todo el verano. El joven disfrutó mucho de ello. Como resultado, sacrificó el empleo de tiempo completo que tanto había anhelado y consiguió un empleo menos interesante de media jornada para poder ser precursor. Con este espíritu, parecido al que desplegó Timoteo, ahora sirve en la central mundial de los testigos de Jehová. El estar dispuesto a hacer sacrificios es evidencia de amor genuino, y los sacrificios hacen más profundo este amor, como descubrió este joven.
16. ¿Qué sacrificios tal vez tengan que hacer los jóvenes?
16 Como “predicador y apóstol”, Pablo dio énfasis a lo deseable que es la modestia al vestir. ¿Estarías dispuesto a sacrificar cierto estilo de vestir o de arreglarte que tal vez perturbe a otras personas o menoscabe tu eficacia como predicador? (1 Timoteo 2:7-10.) Pablo continuó diciendo: “Todos los que desean vivir con devoción piadosa [...] también serán perseguidos” (2 Timoteo 3:12). ¿Estás dispuesto a defender la verdad aunque tal vez se mofen de ti y tengas que sacrificar una posición favorecida entre tus compañeros de clase? Todos estos sacrificios, si se hacen con el motivo correcto, te ayudarán a desarrollar la devoción piadosa y al mismo tiempo aprenderás a apoyarte en Jehová y a considerar los sentimientos de Él sobre toda otra cosa.
Continúa progresando
17. Respecto a progresar, ¿cómo fue Timoteo un ejemplo para los ministros jóvenes hoy día?
17 El desarrollar devoción piadosa es un proceso progresivo. Pablo dijo a Timoteo: “Reflexiona sobre estas cosas; hállate intensamente ocupado en ellas, para que tu adelantamiento sea manifiesto a todos” (1 Timoteo 4:15). Tal vez haya algunos que opinen que no pueden progresar debido a que son demasiado jóvenes para ser siervos ministeriales o ancianos, pues creen que el progreso se mide solamente por las responsabilidades y privilegios que tienen en la congregación. Es cierto que Timoteo calificaba para servir de anciano tanto por su desarrollo espiritual como por la edad que tenía. Pero Timoteo tenía que seguir aplicándose, y en esto dio un excelente ejemplo que todo ministro joven debe seguir sea cual sea el campo que esté abierto ante él. (1 Timoteo 4:12, 13.)
18. ¿De qué maneras pueden progresar los jóvenes cristianos?
18 Así que al igual que Timoteo, como siervo de Jehová que va progresando a la madurez, puedes llegar a ser “un ejemplo a los fieles” al dejar que la verdad ejerza una influencia profunda en la manera como vives y al mejorar en tu ministerio. Ahora mismo puedes esforzarte por progresar al aprender a cultivar cualidades como la de ser moderado en los hábitos, ordenado, hospitalario y serio. Por medio de decir a los ancianos que estás disponible para ayudar y al tomar seriamente cualquier tarea que te pidan que hagas, puedes trabajar a fin de mostrar tu ‘aptitud bajo prueba’ (1 Timoteo 3:1, 2, 8-10). Aunque otras personas no reconozcan inmediatamente tu progreso, puedes estar seguro de que Jehová lo ve. Con el tiempo otros lo verán también. (1 Timoteo 5:25.)
19. Sin importar el esfuerzo que se requiera, ¿por qué deberías entrenarte teniendo en mira la devoción piadosa?
19 Nunca olvides que, si desarrollas la devoción piadosa, puedes llegar a tener una relación personal de aprobación con Jehová. La falta de entrenamiento espiritual resulta en una pérdida mucho mayor que la pérdida de aquella avergonzada corredora que se mencionó al principio de este artículo. El desarrollar la devoción piadosa significa trabajo arduo. Por todo el mundo multitudes de jóvenes dicen gozosamente con voz fuerte: ¡VALE LA PENA! El llegar a tener esta cualidad resulta ahora en un modo de vida lleno de satisfacción y libre de pesares, y te permite tener la esperanza de la felicidad eterna. Así, continúa entrenándote. Sigue haciendo lo mejor que puedas aunque sea difícil. Halla consuelo en el hecho de que “el Dios de toda bondad inmerecida [...] terminará él mismo el entrenamiento de ustedes, él los hará firmes, él los hará fuertes. A él sea la potencia para siempre. Amén”. (1 Pedro 5:10, 11.)
[Nota a pie de página]
a “¿Por qué me siento tan deprimido?”, publicado en el número del 8 de enero de 1983 de ¡Despertad!, compañera de la revista La Atalaya.
¿Puedes contestarlas?
◻ ¿Qué esfuerzo se requiere para mantener una buena comunicación con Dios?
◻ ¿Qué está envuelto en el mantener una buena conciencia?
◻ ¿Cómo se puede aplicar 2 Timoteo 2:20-22 para desarrollar la devoción piadosa?
◻ ¿Cómo pueden progresar los cristianos jóvenes?
[Ilustración en la página 20]
Muchos cristianos hallan mayor gozo en el ministerio que en empleos bien remunerados
[Recuadro en la página 17]
Algunas cualidades de nuestro afectuoso Dios
◼ Tiene sentimientos. Por eso, nuestras acciones pueden hacer que se ‘sienta herido’ o que se regocije. (Salmo 78:40; Proverbios 27:11.)
◼ Aunque a menudo los seres humanos miran tan solo la apariencia de los demás, él “ve lo que es el corazón”. (1 Samuel 16:7.)
◼ Se interesa en nosotros y nos invita a arrojar nuestras inquietudes sobre él, y es “una plaza fuerte en el día de angustia”. (Nahúm 1:7; 1 Pedro 5:7.)
◼ Se le llama el “Dios feliz”, y “se deleita” en sus siervos. (1 Timoteo 1:11; Salmo 35:27.)
◼ Nunca obra injustamente ni muestra parcialidad. (Job 34:10; Hechos 10:34, 35.)
◼ Aunque no excusa los actos de maldad, cuando nos arrepentimos debido a algún error o alguna debilidad, él ‘está listo para perdonar’ y no hace “con nosotros aun conforme a nuestros pecados” ni trae “sobre nosotros lo que merecemos”. (Salmo 86:5; 103:8-14.)
◼ Es abordable y anima a sus criaturas leales a usar sus respectivas habilidades. Aunque su sabiduría es infinita, él escucha sugerencias. “Tu propia humildad me hará grande”, escribió el rey David. (Salmo 18:35; 1 Reyes 22:19-22.)