Queda resuelto el misterio de los jinetes
¿QUIÉN puede hallar la solución al misterio de los jinetes del Apocalipsis? En la Biblia, en Daniel 2:47, a Jehová Dios se le llama “Revelador de secretos”. Dado que él fue quien inspiró la Biblia, donde se encuentra la visión de los jinetes, él puede darnos la respuesta que necesitamos. Por lo tanto, investigando en su Palabra revelada podemos dilucidar el significado de los caballos de diferentes colores y sus jinetes. (Amós 3:7; 2 Timoteo 3:16; 2 Pedro 1:21.)
Los primeros tres versículos de Revelación 1:1-3, o el Apocalipsis, proporcionan la clave para resolver el misterio. Muestran que la serie de visiones tenía que ver con acontecimientos futuros, es decir, posteriores a 96 E.C., año en que el apóstol Juan tuvo todas estas visiones y las escribió. Esto concuerda con lo que dice Revelación 1:10, que las cosas descritas en estas visiones tendrían lugar una vez comenzara “el día del Señor”. (Compárese con 1 Corintios 1:8; 5:5.)
Teniendo esto presente, examinaremos la descripción de la visión de los caballos y sus jinetes. Para comenzar, es esencial que entendamos correctamente el significado del caballo blanco y su jinete. De este modo el significado de los otros jinetes encajará en su lugar.
Examen de las interpretaciones
En el artículo anterior se mencionó que una interpretación del significado del caballo blanco y su jinete era que estos representaban ‘o bien la victoria del evangelio o bien la del imperialismo’. Pero el mundo no se ha convertido ni ha aceptado el evangelio (las buenas nuevas) ni los propósitos de Dios en conexión con Cristo. Y sin duda, el imperialismo tampoco ha cabalgado triunfante. Más bien, se ha ido desintegrando y fragmentando en este siglo.
¿Puede interpretarse que el caballo blanco representa la victoria del evangelio y la pureza de la fe en el primer siglo? Esta interpretación pasa por alto el hecho de que la visión tenía que ver con cosas que sucederían en el futuro. Y dado que Juan escribió la visión estando preso en la isla de Patmos, en el año 96 de la era común, no es posible que la visión representara algo que hubiera sucedido en el primer siglo.
Según otra explicación, el caballo blanco representa la causa de Cristo, más bien que su persona, y dice que su Reino ‘está en medio’ de nosotros, es decir, en nuestros corazones. Pero la causa de Jesucristo y del cristianismo no comenzó después de escribirse el libro de Revelación. Esa causa ya se había evidenciado entre los cristianos del primer siglo antes que Juan escribiera Revelación.
Además, cuando Jesús dijo que “el reino de Dios en medio de ustedes está”, él estaba hablando a los religiosos fariseos hipócritas en contestación a una pregunta que ellos le habían hecho. Jesús no estaba hablando a sus fieles seguidores diciéndoles que el Reino era algo ‘en medio de ellos’ en el sentido de que estaba en sus corazones. Por el contrario, estaba diciendo a los fariseos incrédulos que él, Jesús, como representante del futuro Reino de Dios, estaba presente entre ellos entonces. (Lucas 17:21; véanse también la Versión Popular y La Biblia de Jerusalén.)
¿Cómo considerar la idea de que el jinete del caballo blanco es el anticristo? En ninguna parte de la Biblia se comenta que el anticristo haría semejantes incursiones como para que se pudiera decir que “salió venciendo y para completar su victoria”, como se especifica del jinete del caballo blanco. (Revelación 6:2.) Está claro que quien sea que esté sentado sobre el caballo blanco tiene que vencer completamente. Su victoria no fallará. Todos sus enemigos serán destruidos.
Pistas bíblicas para su identificación
Más adelante en la misma serie de visiones, el “Revelador de secretos” identifica inequívocamente al jinete del caballo blanco. En Revelación 19:11-16 se ve de nuevo a un caballo blanco, pero esta vez con el jinete claramente identificado.
El hecho de que se vea dos veces un caballo blanco en estas visiones proféticas indica que es el mismo caballo y que se están representando diferentes deberes y funciones del jinete. En la segunda escena se da el nombre del jinete. Se le llama “Fiel y Verdadero”, “la Palabra de Dios”, y “Rey de reyes y Señor de señores”.
Tales denominaciones no dejan ninguna duda en cuanto a la identidad del jinete del caballo blanco. ¡No es otro sino el Señor Jesucristo mismo! (Compárese con Revelación 17:14.) Pero ¿en qué momento de su vida? Tiene que ser después del fin del primer siglo, tiempo en que fue dada la visión de Revelación. Fíjese también en que se le ha dado una corona. De modo que en algún tiempo futuro Jesucristo comenzaría a desempeñar su papel especial de Rey o Gobernante. Se le representa además como un guerrero armado con un arco, que sale cabalgando para ‘vencer y completar su victoria’.
Como prueba de que esto tenía que acontecer en el futuro también está este hecho: Para el tiempo de la visión apocalíptica, habían pasado más de 60 años desde el fin de la vida terrestre de Jesús, su resurrección de entre los muertos y su ascensión al cielo. Cuando regresó al cielo, a Jesús se le dijo que esperara a la diestra de Dios hasta ese tiempo futuro en que sus enemigos serían colocados “como banquillo para sus pies”. (Hebreos 10:12, 13.)
Comienza el cabalgar
De modo que el cabalgar del caballo blanco habría de comenzar en algún tiempo futuro cuando Jesucristo fuera entronizado como Rey celestial del Reino de Dios. Para ese entonces Dios lo enviaría con el siguiente mandato: “Ve sojuzgando en medio de tus enemigos”. (Salmo 110:2.) Pero ¿cuándo acontecería esto?
La coronación de Jesucristo como Rey celestial se describe en el Salmo 45:3-7. En Hebreos 1:8, 9 el apóstol Pablo cita de este salmo y aplica los Sl 45 versículos 6 y 7 al Hijo de Dios, Jesucristo. Información detallada publicada por los testigos de Jehová muestra que la coronación de Jesucristo en el cielo tuvo lugar cuando terminaron los Tiempos de los Gentiles, “los tiempos señalados de las naciones”, en el año 1914. (Lucas 21:24a.)
Por lo tanto, cualquier interpretación que sitúe el cabalgar del jinete antes del año 1914 no es correcta. Además, dado que el jinete del caballo blanco es el que va a la cabeza, los otros caballos y sus jinetes que lo siguen representarían acontecimientos que tendrían lugar cuando comenzara el cabalgar o poco después. El cabalgar de estos cuatro jinetes, por lo tanto, habría de acontecer a partir o después del comienzo del “tiempo del fin” en 1914. Es desde ese entonces cuando se ha visto la evidencia de “los últimos días”. (Daniel 12:4; 2 Timoteo 3:1-5, 13.)
Los otros caballos y sus jinetes
El segundo caballo es “rojo” o “de color de fuego”. (Revelación 6:3, 4.) A su jinete “se le concedió quitar de la tierra la paz para que se degollaran unos a otros”. Recibió una “gran espada”. Esto se cumplió cuando en el año 1914 comenzó la peor guerra humana de toda la historia, la primera guerra de alcance mundial. En ese entonces se le llamó La Gran Guerra. Justamente 21 años después comenzó la II Guerra Mundial y fue más devastadora que la primera. Desde entonces ha habido guerras continuas. Un total de 100.000.000 de vidas se han perdido desde 1914 en diferentes guerras.
El tercer caballo es negro, y su jinete lleva una balanza en la mano. (Revelación 6:5, 6.) Una voz anuncia que se necesita el salario de todo un día para comprar solo un litro de trigo o tres de cebada de la menor calidad. Es una apropiada descripción de escasez de alimento a una escala sin paralelo. Eso ha sido cierto desde 1914. Desde el mismo comienzo de la I Guerra Mundial, los precios del alimento ascendieron vertiginosamente. Millones de personas murieron de hambre. Desde entonces, no han cesado las escaseces de alimento. Se calcula que en estos momentos unos 450.000.000 de personas están al borde de la inanición y que más de 1.000 millones no tienen suficiente que comer. De vez en cuando este lúgubre panorama se acentúa por informes de inanición en masa, como los procedentes de Etiopía, donde recientemente se ha registrado una gran mortandad.
Tocante al cuarto caballo, notamos que es “pálido” con aspecto enfermizo. El nombre de su jinete es “Muerte”. (Revelación 6:7, 8.) Simboliza el vasto número de muertes que, desde 1914, se han producido por causas no naturales, como escaseces de alimento, guerras y violencia, pestes y enfermedades. La influenza o gripe española que se extendió por todo el mundo después de la I Guerra Mundial ocasionó la muerte a 20.000.000 de personas. Ahora, las enfermedades del corazón, el cáncer y muchas otras han segado prematuramente millones de vidas.
Los acontecimientos simbolizados por estos caballos y sus jinetes se destacan también en una profecía paralela de Jesús sobre nuestros tiempos. Él dijo que en “la conclusión del sistema de cosas”, en la que vivimos ahora, habría guerras mundiales, pues ‘nación se levantará contra nación y reino contra reino’. Él predijo “el aumento del desafuero” y que habría “en un lugar tras otro pestes y escaseces de alimento”. (Mateo 24:3-12; Lucas 21:10, 11.)
¿Existe un quinto caballo?
Revelación 6:8 dice: “Y vi, y, ¡miren!, un caballo pálido; y el que iba sentado sobre él tenía el nombre Muerte. Y el Hades venía siguiéndolo de cerca”. Basándose en esta descripción, algunos han pensado que puesto que los primeros cuatro personajes iban montados, ¿por qué no también el quinto?
La Biblia no lo especifica. En el texto griego la palabra para “caballo” no aparece en Revelación 6:8 en conexión con el Hades. Por lo tanto, la mayoría de las traducciones de la Biblia no incluyen la palabra “caballo” con referencia al quinto personaje. Así que es suficiente saber que el Hades, la sepultura común de la humanidad, va siguiendo a los tres caballos anteriores y sus jinetes, recogiendo todas sus víctimas.
¿Cómo le afecta a usted la visión?
Es verdaderamente emocionante vivir en los tiempos en que la visión de los cuatro jinetes del Apocalipsis que cabalgan alcanza su dramático cumplimiento. Pero también son tiempos serios que exigen un autoexamen. ¿Por qué? Porque a toda persona de la Tierra le afecta este cabalgar simbólico. Sí, tanto a usted como a sus seres queridos. ¿De qué manera?
La pregunta hace surgir un aspecto serio de la cuestión que se considerará en el próximo número de La Atalaya el cual trata sobre cómo el cabalgar de los jinetes le afecta a usted. No se pierda la importante respuesta.
[Nota a pie de página]
a Véase el libro Usted puede vivir para siempre en el paraíso en la Tierra, páginas 134-141, publicado por la Watchtower Bible and Tract Society of New York, Inc.
[Ilustración en la página 5]
1914... el “Rey de reyes” cabalga sobre su caballo blanco
[Ilustración en la página 7]
Desde 1914 los jinetes de la guerra, el hambre y las pestes han producido una horrible cosecha para el Hades