¿Está pensando acerca de ello?
1 El eunuco etíope, después que se le explicó la verdad y vio su responsabilidad, hizo algo más que solo pensar acerca de ello, ¿no es verdad? Dijo: “¿Qué impide que yo sea bautizado?” (Hech. 8:36) Muchos de nosotros que hemos tomado la misma decisión prudente que el etíope tomó en cuanto a bautizarnos, hemos estado pensando desde entonces, sí, por algún tiempo ya, acerca de ser precursores y muy apropiadamente podemos preguntarnos: ‘¿Qué impide que yo sea precursor o precursora?’ Es una buena pregunta y merece consideración, ¿no le parece?
2 El precursorado es un campo de servicio que merece consideración seria. Aunque algunos tienen responsabilidades de familia u otras responsabilidades bíblicas que no les permiten emprender el servicio de precursor regular ahora, muchos han podido ingresar en las filas de precursores, ¡como se nota ahora que hay más de 15.000 sirviendo de precursores regulares! A continuación se presentan algunos ejemplos animadores acerca de los cuales pensar:
3 Un hermano recibió la oferta de una beca universitaria. Este joven (bajo la guía sabia de sus padres) había estado pensando en ser precursor después de su graduación. ¿Qué hizo? Teniendo presentes las palabras de Jesús en Mateo 6:33, hizo tal como había pensado, se hizo precursor regular y ahora disfruta del servicio de precursor especial, y espera con anhelo asistir a la Escuela de Galaad. Ciertamente Jehová lo ha bendecido.
4 Una hermana que también hizo más que pensar acerca de ello escribió: ‘Lo consideré con mi esposo y nuestro hijo. Convenimos en que si reducíamos los gastos yo podría dejar de hacer trabajo seglar y podríamos tener un precursor en la familia.’ Como precursora ella disfruta de más bendiciones y la familia se beneficia de una manera muy sana.
5 ¿Ha pensado usted acerca de ser precursor pero se ha preguntado si su salud se lo permitiría? Una hermana que se hacía esta misma pregunta decidió consultar con su médico, y después escribió: ‘Me sentí muy feliz al saber que nada realmente me lo impedía.’ Hoy le va muy bien como precursora. Un hermano que había estado pensando acerca de ello por años lo resumió de la siguiente manera cuando se hizo precursor: “Por fin arreglé mis asuntos e hice lo que debiera haber hecho hace ya algún tiempo.”
6 Muchos ahora están pensando acerca del precursorado y esto es excelente, porque éste es el primer paso para hacerse precursor regular. El paso siguiente es hacer planes definitivos para poner por obra estos pensamientos buenos. ¿Qué puede ayudarlos en cuanto a esto? Muchos precursores nos dicen que recibieron respuestas a sus preguntas y también estímulo excelente al asistir a las reuniones que se celebran en las asambleas de circuito para los que se interesan en el precursorado. Si usted no ha asistido a estas reuniones, lo animamos a que lo haga; disfrutará mucho de ellas.
7 Se le presenta otra oportunidad excelente cuando el siervo de circuito visita a su congregación. Como “precursor” experimentado él tendrá gusto en hablar con usted acerca del precursorado. Las esposas de los siervos de circuito han hecho mucho para animar a las hermanas que están considerando el precursorado. Y muchos otros fueron animados después de hablar con los precursores mismos, así como también con siervos y otros publicadores maduros.
8 Así que, hermanos, continúen sin falta, pensando acerca de ser precursores. Y a la vez que piensan acerca de ello y arreglan sus asuntos con ese fin, ¿por qué no se inscriben como precursores de vacaciones cada vez que puedan? Un precursor regular escribió: “Disfruté tanto del precursorado de vacaciones que simplemente no pude dejarlo.” Esta experiencia remuneradora puede ser suya.