La caja de preguntas
● ¿Cómo podemos obtener ayuda para resolver un problema personal?
Hay verdadera satisfacción en poder resolver nuestros propios problemas con la ayuda de la Palabra de Dios. Muchos hallan que pueden resolver con éxito la mayor parte de las dificultades personales por medio de la oración y el estudio personal de la Biblia. Jehová, conoce nuestros problemas mejor que nadie y nos invita a acudir a él por ayuda. (Heb. 4:16; Sant. 1:2-5; “Cómo el espíritu de Dios puede ayudarle” de La Atalaya del 15 de noviembre de 1974) El Índice de temas en el número del 15 de diciembre de La Atalaya se puede usar para buscar material relacionado con problemas específicos y el consejo bíblico que aplica.
Después de seguir las sugerencias mencionadas, si usted todavía considera que necesita ayuda, entonces hable a uno de los ancianos de su congregación. Estos hermanos lo conocen a usted y sus circunstancias; por lo general ellos están en una buena posición para ofrecer el consejo de la Palabra de Dios que usted necesita. Recuerde, el arreglo de ancianos es una provisión de Jehová para dar ayuda espiritual.
Si el problema aún persiste y usted tiene buena razón para considerar que necesita ayuda adicional, puede escribir a la Sociedad. Si decide escribir, sugerimos que haga lo siguiente: Identifíquese, y también identifique su congregación y cualesquier otras personas que estén directamente envueltas. Las cartas anónimas no se contestan. No haga preguntas sobre situaciones hipotéticas. Declare las cosas con exactitud, evitando las conjeturas y los detalles no relacionados. Provea toda la información, declarando claramente la naturaleza de su problema. Relate lo que usted ha hecho hasta entonces para resolverlo y porqué considera que no ha tenido buen éxito. Se hará un esfuerzo para señalar los principios bíblicos que aplican. Si usted escribe acerca del consejo dado por los ancianos, sería bueno suministrarles a ellos una copia de su carta. Cuando otros están envueltos, la Sociedad quizás envíe una copia de su respuesta a los ancianos con el fin de que ellos sepan qué consejo se ha dado.