BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • km 6/82 págs. 1-4
  • ¿Debemos regalar la literatura?

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • ¿Debemos regalar la literatura?
  • Nuestro Ministerio del Reino 1982
  • Subtítulos
  • Información relacionada
  • NÚMEROS ATRASADOS DE LAS REVISTAS
  • AL TESTIFICAR INFORMALMENTE
  • NUESTRA VALIOSA LITERATURA
  • Usando bien nuestra literatura
    Nuestro Servicio del Reino 1976
  • ¿Valoramos nuestra literatura?
    Nuestro Ministerio del Reino 1992
  • Usando sabiamente nuestra literatura
    Nuestro Ministerio del Reino 1982
  • Presentando las buenas nuevas... por medio de usar bien la literatura
    Nuestro Servicio del Reino 1980
Ver más
Nuestro Ministerio del Reino 1982
km 6/82 págs. 1-4

¿Debemos regalar la literatura?

1 La Sociedad ha recibido numerosos informes que indican que se está regalando una gran cantidad de la literatura que se coloca en el campo. Parece que algunos publicadores no acostumbran pedir la contribución por la literatura que colocan. Aunque ciertamente es encomiable que los publicadores quieran poner en las manos del público nuestra excelente literatura, el siempre regalarla puede plantear problemas. Por ejemplo, hay publicadores de escasos recursos que se han perturbado al ver a otros publicadores regalar la literatura mientras que ellos no pueden hacer eso. Otros publicadores hasta han observado que algunos publicadores regalan libros con regularidad durante el servicio del campo. Han habido ocasiones en que el amo de casa se ha asombrado al mencionársele una contribución y ha declarado que anteriormente unos Testigos le dieron una publicación sin costo alguno.

2 Es cierto que pueden haber personas que realmente no puedan contribuir por la literatura cuando las visitamos. Pero en este país hay pocas personas en tal situación. ¿Han notado ustedes que a muchos de los que dicen que no pueden contribuir se les conoce como personas que gastan el dinero en cosas innecesarias? Así que, ¿es realmente prudente que regalemos la literatura cuando vamos de casa en casa? ¿Ayudará esto a los amos de casa a estimar la literatura? Si nos encontramos con alguien que dice que no puede contribuir por la literatura, pudiéramos ofrecerle un folleto, un número atrasado de una de las revistas o un tratado con la condición expresa de que la persona prometa leerlo. O pudiéramos decirle que podemos volver cuando él (o ella) pueda contribuir por lo que estamos ofreciendo.

3 A los amos de casa que dicen que no tienen dinero para contribuir por las publicaciones pudiera dárseles un ejemplar de un tratado como ¿Está al borde del desastre el planeta Tierra? Después podemos cultivar el interés que se haya mostrado al principio por medio de volver a visitar a la persona para considerar algunos puntos del tratado y dirigir la atención de ésta a algunos otros textos bíblicos.

NÚMEROS ATRASADOS DE LAS REVISTAS

4 De vez en cuando algunos publicadores dejan números atrasados de las revistas en las casas donde no hallan a nadie, y por supuesto, se aseguran de que las revistas estén completamente fuera de la vista de los transeúntes. Esto no es censurable. Sin embargo, en los casos en que se trabaja a menudo en el territorio de la congregación, si dejáramos indistintamente las revistas en las casas donde no hallamos a nadie o cada vez que trabajamos en el territorio, la gente pudiera razonar que éstas siempre son gratis. Si hallamos alguna otra cosa en la puerta, como material impreso de publicidad, quizás no sea bueno dejar una de nuestras revistas en tal ocasión. Así que es bueno usar discreción en este asunto.

5 Cada vez que se deje alguna revista gratis debe hacerse el esfuerzo por volver de nuevo. Algunos publicadores (cuando utilizan de esa manera los números atrasados) han hallado que es eficaz abrir la revista en un artículo que ellos creen que sería de interés particular para el amo de casa. Esto suministra una excelente oportunidad para entablar conversaciones al volver a visitar las casas donde no hallamos a nadie antes.

AL TESTIFICAR INFORMALMENTE

6 Al testificar informalmente a algún pariente u otro conocido nuestro, es comprensible que quizás queramos darle como regalo una publicación y no pedirle la contribución. Pero cuando hablamos a extraños, como en la obra de casa en casa, es mejor ofrecer la literatura de campaña por la contribución regular. De este modo quizás ayudemos a las personas a apreciar el valor de lo que han adquirido y puede que esto las motive a leer la literatura.

NUESTRA VALIOSA LITERATURA

7 Al compartir la verdad con otros, damos gratuitamente de nuestro tiempo y nuestra energía. Esto es muy correcto, pues Jesús dijo: “Recibieron gratis, den gratis.” (Mat. 10:8) El hacer eso requiere que hagamos sacrificios en cuanto a tiempo y también dinero para los gastos de transportación. Sin embargo, no tenemos que sentirnos obligados a pagar todos los gastos de la literatura que colocamos a las personas en el campo. En contraste con los costosos libros y revistas populares de hoy, nuestra literatura todavía está disponible por una contribución razonable. Por lo general ésta está al alcance de casi toda persona en este país. La pequeña contribución que se pide realza el valor que tiene la literatura para el amo de casa. No hay razón para que alguien piense que está vendiendo literatura sólo porque pide una pequeña contribución para sufragar los gastos de impresión y distribución.

8 Sigamos teniendo en alta estima las publicaciones de la Sociedad y ayudemos a las personas que hallamos en nuestro ministerio a tenerlas en igual estima, pues el conocimiento que suministra nuestra literatura puede llevar a vida eterna.—Juan 17:3.

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir