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  • Mantenga su fe fuerte mediante el estudio personal

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  • Mantenga su fe fuerte mediante el estudio personal
  • Nuestro Ministerio del Reino 1986
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Nuestro Ministerio del Reino 1986
km 6/86 pág. 3

Mantenga su fe fuerte mediante el estudio personal

1 El estudio de la Biblia beneficia la salud espiritual y fortalece la fe tal como la alimentación apropiada contribuye al bienestar físico. Uno no puede ser fuerte en sentido espiritual si no estudia personalmente la Biblia con regularidad. Además, los buenos hábitos de estudio nos permiten mantener fuerte la fe y así apagar con éxito los proyectiles encendidos de Satanás, que son la persecución, el materialismo y las tentaciones de hacer lo malo. (Efe. 6:16.)

LOS BENEFICIOS DEL ESTUDIO PERSONAL

2 El estudio personal enriquece nuestro entendimiento de las Escrituras. Nos ayuda a desarrollar una fe fuerte y a comprender la anchura y longitud y altura y profundidad del amor de Cristo. (Rom. 11:33; Efe. 3:16-19.) Como fruto del espíritu, la fe llega a ser una fuerza que nos impulsa en la vida. Se nos ayuda a vestirnos de la nueva personalidad y a portarnos como personas espirituales. (Gál. 5:22, 23; Efe. 4:24.) Estamos mejor equipados para tratar con problemas personales. Permite que pasemos por alto las faltas de otros y promovamos la paz y unidad en la congregación. (Col. 3:10, 13, 14.) Todo esto puede servir de refrigerio a nosotros y a otros.

3 El estudio personal también nos equipa mejor para ayudar a las personas interesadas en la Biblia que encontramos en el ministerio del campo. Con confianza podremos ‘presentar una defensa ante todo el que nos exija razón de la esperanza que hay en nosotros’. (1 Ped. 3:15.) Como nuestro Dechado, Cristo Jesús, podemos hablar como alguien que tiene autoridad, que sabe con exactitud la voluntad de Jehová y que puede señalar clara y lógicamente lo que las Escrituras enseñan. (Mat. 7:28, 29.)

CÓMO Y CUÁNDO ESTUDIAR

4 Nuestra meta debe ser lograr más que sencillamente repasar la información para el estudio. Requiere tiempo reflexionar sobre lo que se lee. Pregúntese: ¿Cómo me aplica la información? ¿Qué revela acerca de Jehová, sus cualidades y caminos? ¿Cómo pudiera utilizar esta información para ayudar a otros? ¿Cómo se relaciona con lo que ya sé sobre el tema? Por medio de investigar para contestar preguntas que se han planteado, obtendremos un entendimiento más amplio de la información que se estudia y veremos cómo esta encaja en el conjunto de verdades bíblicas. Así se adquiere el entendimiento. (Pro. 4:5.)

5 El desarrollar una buena rutina de estudio requiere apartar tiempo para estudiar y apegarse a un horario específico. (Compárese con Filipenses 3:16.) Para algunos esto quizás sea difícil, pero se hace más fácil a medida que pasa el tiempo y se hace el esfuerzo. Y ¡qué remunerador! Tal vez pudiera estudiar antes de acostarse. Hay quienes prefieren levantarse un poco más temprano por la mañana para aprovechar este tiempo de tranquilidad. Puede aprovecharse la hora de almuerzo que se concede en el trabajo seglar. Cuando quiera que sea, busque el ambiente que sea el más propicio para estudiar. Esto hará posible que se concentre y contribuirá a que retenga la información. Así se puede incitar al corazón a seguir el camino de la justicia. (Pro. 15:28.)

QUÉ SE PUEDE ESTUDIAR

6 La preparación para nuestras cinco reuniones semanales debería ocupar una parte prominente en nuestro programa de estudio personal. Además de prepararse para el estudio de La Atalaya y el Estudio de Libro de Congregación, ¿está sacando pleno provecho del abundante alimento espiritual que se prepara para la Escuela del Ministerio Teocrático? Asegúrese de mantenerse al día con el horario de la lectura de la Biblia y aparte tiempo para investigar en las publicaciones de la Sociedad sobre los puntos sobresalientes de la lectura bíblica. Si repasa de antemano la información de los discursos 1, 3 y 4, hallará que las presentaciones en la escuela son más interesantes. La importante instrucción bíblica se le grabará más profundamente en la mente.

7 La preparación para la Reunión de Servicio no requiere una porción muy grande de nuestro tiempo de estudio personal, pero esta también debe incluirse en nuestro horario. Si usted dedica solo unos cuantos minutos cada semana a repasar el programa que se bosqueja en Nuestro Ministerio del Reino, esto le ayudará a mantener su fe fuerte y a expresar su fe a otros en el ministerio del campo.

8 Un programa equilibrado de estudio personal le ayudará a ser ‘hecho poderoso en el hombre que es en el interior’. (Efe. 3:16.) Sí, una fe fuerte, un amor más profundo a Jehová y a Cristo Jesús, un conocimiento más amplio y mayor eficacia en el ministerio —todos estos beneficios y otros más— hacen que valga la pena el estudio personal. ¿Tiene usted un buen programa de estudio personal?

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