5 Vi un muro que rodeaba el templo* por fuera. El hombre tenía en la mano una caña de medir de seis codos (a cada codo se le había añadido un palmo menor).* Él empezó a medir el muro, que tenía una caña de ancho por una caña de alto.
5 Y, ¡mire!, había un muro fuera de la casa todo en derredor. Y en la mano del hombre había la caña de medir* de seis codos, por un codo y un palmo menor.* Y empezó a medir la anchura de la cosa construida,* una caña; y la altura, una caña.