25 Los danitas le contestaron: “No nos levantes la voz, no sea que algunos hombres furiosos* se les echen encima y eso te cueste la vida a ti y a los de tu casa”.
25 Ante esto, los hijos de Dan le dijeron: “No dejes que tu voz se oiga cerca de nosotros, por temor de que hombres amargados de alma+ los acometan a ustedes, y tengas que pagar con la pérdida de tu propia alma* y el alma de tu casa”.