Nota
a Para una evidencia más clara en cuanto a por qué esta profecía tiene un cumplimiento mayor más allá de su aplicación inicial al emperador babilonio Nabucodonosor II, sírvase ver el libro “Babylon the Great Has Fallen!” God’s Kingdom Rules!, págs. 174-181, (o La Atalaya de 1965, págs. 315-317); también el libro Aid to Bible Understanding, págs. 94-96.