Nota
a La Biblia permite el divorcio sobre la base de la inmoralidad sexual, lo cual deja al cónyuge inocente en libertad para volver a casarse. (Mateo 19:9.) Para una consideración sobre algunas de las razones serias que pudieran resultar en la separación, véase el artículo “Cuando los lazos matrimoniales están a punto de romperse”, en el número del 1 de febrero de 1964 de nuestra revista La Atalaya.