Nota
b Si todavía están criando a sus hijos, recuerden que usted y su cónyuge son “una sola carne” (Marcos 10:8). Además, ellos se sienten más seguros cuando ven que la relación de sus padres es estable.
b Si todavía están criando a sus hijos, recuerden que usted y su cónyuge son “una sola carne” (Marcos 10:8). Además, ellos se sienten más seguros cuando ven que la relación de sus padres es estable.