Nota
a Los “setenta años” de observar ayunos no pudieron haber empezado después de la primera deportación de los judíos por los babilonios en el año 617 a. de la E.C., porque eso hubiera sido unos nueve años antes que el rey Nabucodonosor comenzara el asedio final de Jerusalén y también unos once años antes que se abriera brecha en los muros de la ciudad (el 9 de Tamuz) y antes de la destrucción de la ciudad (el 10 de Ab) y del asesinato del gobernador Gedalías en el séptimo mes (Tisri), acontecimientos de duelo que observaban por medio de períodos de ayuno. Por lo tanto los “setenta años” de ayunar comenzaron después que estas tres últimas calamidades que produjeron duelo habían acontecido, en el año 607 a. de la E.C. Esto prueba que la desolación de la tierra o país duró setenta años y que estos “setenta años” comenzaron en 607 a. de la E.C. y terminaron en 537 a. de la E.C.—Vea el libro “Antiquities of the Jews,” de Flavio Josefo, Libro 10, capítulo 9, párrafo 7.