Nota
b Según Génesis 2:17, Dios mandó a Adán que no comiera del árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo. En la nota al pie de la página, la Biblia de Jerusalén, 1975, explica lo que este conocimiento representa: “Es la facultad de decidir uno por sí mismo lo que es bueno y lo que es malo, y de obrar en consecuencia: una reclamación de autonomía moral, por la que el hombre no se conforma con su condición de criatura, cf. Is[aías] 5: 20. El primer pecado ha sido un atentado a la soberanía de Dios”.