Nota
b Las dos monedas que echó la viuda eran leptones. El leptón era la moneda judía más pequeña y de menos valor que había en circulación. Dos leptones equivalían al salario que ganaba un trabajador en 15 minutos. Esas dos moneditas no alcanzaban ni siquiera para comprar un gorrión, el ave más barata que comían los pobres.