Nota
d Generalmente se entiende que la palabra griega aión se deriva de aeí, que significa “para siempre; siempre.” No obstante, la página 202 del libro New Testament Synonyms, por el arzobispo R. C. Trench (1901), dice: “Tenemos que rechazar la etimología de aion que propone Aristóteles (De Caelo 1. 9): el sustantivo derivado se tomó de la palabra aei. Más probablemente está conectada con ao, áemi, respirar. Como kosmos, tiene un sentido primario y físico y luego, superimpuesto en éste, uno secundario y ético. En lo primario, significa tiempo, corto o largo, en su duración ininterrumpida; frecuentemente en el griego clásico la duración de una vida humana . . . pero esencialmente tiempo como la condición en la cual existen todas las cosas creadas, y la medida de su existencia; . . . Significando así tiempo, en el presente llega a significar todo lo que existe en el mundo bajo condiciones de tiempo; . . . y entonces, más éticamente, el derrotero y corriente de los asuntos de este mundo.”