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“Sálganse de ella, pueblo mío”La Atalaya 1980 | 1 de diciembre
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“Sálganse de ella, pueblo mío”
“Sálganse de ella, pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas.”—Rev. 18:4.
1. ¿Cuándo salió la llamada para salir de Babilonia la Grande, y por qué fue apropiado que se hiciera esa llamada entonces?
“SÁLGANSE de ella, pueblo mío.” Esa llamada se ha estado proclamando desde 1919, año en que las naciones que estaban peleando en la guerra mundial de 1914 a 1918 firmaron el tratado de paz. La religión organizada del mundo había apoyado aquella lucha mundial. ¿Qué hay de aquellos a quienes el Dios de la Biblia llama “pueblo mío”? Estos cristianos pacíficos habían entrado en servidumbre, hasta el punto de encarcelamiento, a Babilonia la Grande y a sus amantes políticos que se envolvieron en la I Guerra Mundial.
2. ¿Qué llamada parecida se había dado más temprano por medio de Jeremías?
2 La llamada para que ‘se salieran de ella’ se había puesto por escrito en Revelación 18:4. Una llamada parecida se había puesto por escrito más temprano en Jeremías 51:45, donde dice: “Sálganse de en medio de ella, oh pueblo mío, y provéale cada uno escape a su alma de la ardiente cólera de Jehová.”
3, 4. (a) Según Jeremías 50:8–10, el “escape” de ellos sería ¿de dónde? (b) Para cuando llegó el tiempo en que había de cumplirse esta última profecía, ¿tenía Babilonia con Jehová la misma relación que tenía durante el régimen de Nabucodonosor? ¿Por qué?
3 ¿“Escape” de dónde? Jeremías 50:8-10 responde claramente con las siguientes palabras: “‘Emprendan su huida de en medio de Babilonia, y salgan aun de la tierra de los caldeos, y háganse como los animales que sirven de guías delante del rebaño. Porque aquí estoy suscitando y haciendo subir contra Babilonia una congregación de grandes naciones desde la tierra del norte, y ciertamente se dispondrán en orden contra ella. Desde allí será tomada. . . . Y Caldea tiene que llegar a ser un despojo. Todos los que la despojen se satisfarán,’ es la expresión de Jehová.”
4 Para el tiempo en que se cumplieran aquellas palabras proféticas, el rey Nabucodonosor de Babilonia habría muerto. Uno de sus sucesores reales, a saber, Belsasar, hijo de Nabonido, estaría rigiendo en el Imperio Babilonio, en 539 a. de la E.C. Así, para aquel entonces lo que Babilonia había simbolizado proféticamente desde el principio del régimen de Nabucodonosor en 625 a. de la E.C. habría cambiado. Jehová había llamado a Nabucodonosor “mi siervo.” (Jer. 27:6) Además, durante el tiempo en que el profeta judío Daniel había estado desterrado en Babilonia, Jehová había tenido tratos con el emperador Nabucodonosor respecto a dos importantes sueños proféticos. (Dan., caps. 2 y 4) Las hazañas del rey Nabucodonosor fueron predichas en las profecías hasta el año 592 a. de la E.C. (Eze. 29:17-20) Así, por lo menos durante aquellos años el Imperio Babilonio bajo Nabucodonosor fue el instrumento que Jehová utilizó para imponer Su venganza sobre el reino desleal de Judá y las naciones vecinas. El trabajo que Nabucodonosor hizo en armonía con la voluntad de Jehová prefiguró el trabajo que Jesucristo realiza durante este “tiempo del fin,” en el cual nos hallamos actualmente.
5. Según Isaías 44:28 a 45:7, para el tiempo de la caída de Babilonia la obra de Jesucristo fue prefigurada por la obra ¿de quién? ¿Cómo armoniza la explicación que Daniel dio de la escritura en la pared con lo que Isaías predijo?
5 Según lo declarado en Isaías 44:28 a 45:7, durante el tiempo en que la caída de Babilonia era inminente, Ciro el Grande, el gobernante del Imperio Medopersa, asumió el trabajo que prefiguraba lo que el glorificado Jesucristo haría durante el “tiempo del fin.” En la mismísima noche en que cayó Babilonia en 539 a. de la E.C., el profeta Daniel interpretó con las siguientes palabras la escritura que le había aparecido en la pared al rey Belsasar: “PERES [la forma singular de la tercera palabra de la escritura enigmática], tu reino ha sido dividido y dado a los medos y los persas.” El relato del testigo ocular Daniel pasa a decir: “En aquella misma noche Belsasar el rey caldeo fue muerto, y Darío el medo mismo [como socio de Ciro] recibió el reino.”—Dan. 5:28-31; 9:1, 2.
6. (a) ¿En qué libro de la Biblia se expone lo que representó la Babilonia del día de Belsasar, y qué es hoy día? (b) ¿Quién fundó a aquella Babilonia simbólica, y qué religiones abarca ésta?
6 Lo que la antigua Babilonia representó en sus últimos días como señora del mundo queda expuesto en el libro de Revelación escrito por el inspirado apóstol Juan alrededor de 96 E.C., cuando los restos de la antigua Babilonia todavía estaban en pie. De lo que Juan escribió en Revelación 16:12 a 19:3 se hace patente que la Babilonia del día de Belsasar condenada a destrucción representaba al imperio mundial de la religión falsa que todavía existe. Dicho imperio, que actualmente se compone de todas las religiones del mundo condenado a destrucción, recibió su comienzo de un “poderoso cazador en oposición a Jehová.” Este fue Nemrod, bisnieto de Noé, y él fundó la ciudad de Babel a orillas del río Éufrates. (Rev 16:12; Gén. 10:8-10) El imperio que actualmente se llama Babilonia la Grande abarca a todas las religiones que están “en oposición a Jehová,” y ahora está en su “tiempo del fin.”—Dan. 12:4.
7. (a) ¿Cuándo salieron de la antigua Babilonia los “escapados”? (b) ¿Cuándo salen de Babilonia la Grande los escapados, y por qué entonces?
7 Es de ese imperio religioso de alcance mundial de donde se llama al pueblo de Jehová para ‘que salga,’ y sin demora. Ese imperio es lo que fue prefigurado por la Babilonia acerca de la cual Jeremías habló en los capítulos 50 y 51 de Jer. En el caso del antiguo Imperio Babilonio, los judíos que se hallaban desterrados allí y sus compañeros no podían ‘salir’ sino hasta después que ese Imperio cayera en manos de los medos y los persas en 539 a. de la E.C. (Isa. 14:12-17) Pero, ¿qué hay acerca de este siglo veinte? ¿Qué hay de aquellos a quienes Jehová hoy llama “pueblo mío”? A éstos se les manda ‘salir’ de la moderna Babilonia la Grande antes de que ésta sea destruida en la venidera “grande tribulación” predicha por Jesucristo. (Mat. 24:21, 22; Rev. 1:1; 7:14, 15) La razón por la cual se les manda salir es que estos que escapan tienen que evitar que les sobrevengan plagas y destrucción junto con Babilonia la Grande, el imperio mundial de la religión falsa que todavía se mantiene en pie.—Rev. 18:4.
8. ¿Qué denota el hecho de que aquellos a quienes se mandó salir de Babilonia la Grande hayan salido desde 1919, y quién facilitó su liberación?
8 No habrá modo de salir de Babilonia la Grande después que sus antiguos amantes políticos se vuelvan en contra de ella y la eliminen de la existencia. (Rev. 17:15-18) El pueblo dedicado de Jehová se ha salido de ella desde el año posbélico de 1919 E.C. Esto denotó que en cierto sentido Babilonia la Grande ya había caído. ¿Cómo? De modo figurativo. En 1919 fue roto el poder esclavizador que ella tenía sobre el pueblo de Jehová. Desde entonces éstos nunca han vuelto a estar en servidumbre religiosa a Babilonia la Grande, como lo estuvieron durante la guerra mundial de 1914 a 1918. Su liberación debe atribuirse a Aquel que inspiró a Jeremías a predecir dicha liberación como parte de Su propósito. El que lo inspiró fue Jehová. Para efectuar dicha liberación Jehová se valió de su Ciro Mayor, el glorificado Señor Jesucristo. Este Ciro antitípico empezó a reinar en el reino celestial en 1914, después del fin de los “siete tiempos” predichos en el sueño de Nabucodonosor. (Dan. 4:1-37) Desde 1919 el Ciro Mayor reinante ha liberado de Babilonia la Grande a millones de personas que buscaban libertad religiosa. Si estas personas permanecen fieles a Su reino, él las mantendrá a salvo, bien protegidas. A estas personas no las controlan ni el clero de la cristiandad ni los líderes de las religiones no cristianas.
PREDICHO EL REGRESO A LA CAPITAL EN LA CIMA DE LA MONTAÑA
9, 10. ¿Fue accidental el que el resto fuera liberado de Babilonia la Grande en 1919? ¿Qué muestra Jeremías 50:4, 5, 28 en cuanto al propósito de dicha liberación?
9 Que nadie ahora, más de 60 años después, vaya a imaginarse que la liberación religiosa de un pequeño y despreciado resto del pueblo de Jehová ha sido simplemente accidental. Esta vino en cumplimiento de las propias profecías bíblicas de Jehová. En su profecía, la cual dio por medio de Jeremías en 614 a. de la E.C. para predecir la caída de Babilonia en 539 a. de la E.C., leemos:
10 ‘En aquellos días y en aquel tiempo,’ es la expresión de Jehová, ‘los hijos de Israel, ellos y los hijos de Judá juntos, vendrán. Andarán, llorando al andar, y a Jehová su Dios buscarán. Seguirán preguntando el camino a Sión [el lugar de la capital en la cima de la montaña], con sus rostros en aquella dirección, diciendo: “Vengan y unámonos a Jehová en un pacto indefinidamente duradero que no será olvidado.” [¿Con qué propósito?] Hay el sonido de los que huyen y de los que escapan de la tierra de Babilonia para anunciar en Sión la venganza de Jehová nuestro Dios, la venganza por su templo.’”—Jer. 50:4, 5, 28.
11. ¿Está relacionada la profecía de Jeremías con el Movimiento Sionista de los judíos? ¿Qué indican los hechos hoy día?
11 Esto no se refiere de modo alguno al Movimiento Sionista organizado por el judío austriaco Teodoro Herzl en 1897. La Jerusalén que los judíos ocupan actualmente fue ganada por ellos por fuerza de armas en la Guerra de Seis Días de 1967, y el monte que el templo ocupaba está coronado por la “Cúpula de la Roca” islámica que no llama atención al nombre de Jehová. ¿A qué “Sión” ha regresado pacíficamente el resto desde 1919?
12. ¿A qué Sión ha regresado pacíficamente el resto desde 1919?
12 Es al monte Sión visto por el apóstol cristiano Juan en visión 26 años después que la Jerusalén judía sufrió destrucción total a manos de las legiones romanas en 70 E.C. Respecto a este monte Juan escribe: “Y vi, y, ¡miren! el Cordero de pie sobre el monte Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que tienen escrito en sus frentes el nombre de él y el nombre de su Padre. . . . y el sonido que oí fue como el de cantantes que se acompañan a sí mismos con el arpa tocando sus arpas. Y están cantando como si fuera una canción nueva delante del trono [de Dios] y delante de las cuatro criaturas vivientes y de los ancianos; y nadie pudo aprender esa canción sino los ciento cuarenta y cuatro mil, que han sido comprados de la tierra. . . . Estos son los que van siguiendo al Cordero no importa adónde vaya. Estos fueron comprados de entre la humanidad como primicias para Dios y para el Cordero.”—Rev. 14:1-4.
13. (a) Unos cuantos versículos después, ¿qué informa el apóstol Juan respecto a Babilonia la Grande? (b) ¿A causa de qué suceso de 1919 recibió ella una sacudida?
13 Es de interés el hecho de que, solo unos cuantos versículos después de habernos dado esa descripción, el apóstol Juan escribe lo siguiente: “Y otro, un segundo ángel, siguió, diciendo: ‘¡Ha caído! ¡Babilonia la Grande ha caído, la que hizo que todas las naciones bebieran del vino de la cólera de su fornicación!’” (Rev. 14:8) A pesar de haber cometido fornicación religiosa con todos los políticos de las naciones, en 1919 Babilonia la Grande sufrió una caída, en lo que tiene que ver con influencia y poder, que la sacudió. Sufrió una sacudida cuando el Ciro Mayor, el Cordero Jesucristo, consiguió la liberación del resto de israelitas espirituales y los puso a trabajar en reconstrucción espiritual.
14. (a) ¿Obró el resto liberado en armonía con el lema de que “la religión es el opio de los pueblos” o con lo que se afirmaba que lograría la propuesta Liga o Sociedad de las Naciones? (b) ¿A la capital en la cima de qué montaña se dirigieron ellos?
14 Los revolucionarios que para 1919 habían conseguido el ascendiente político en el este de Europa obraron en conformidad con su lema: “La religión es el opio de los pueblos.” Pero el camino de ellos no era el camino por el cual debería ir el resto de Jehová, que entonces había sido liberado de la religiosa Babilonia la Grande. Además, se había propuesto una Liga o Sociedad de las Naciones para que recibiera consideración y fuera adoptada en la Conferencia de Paz de 1919, y el Concilio Federal de las Iglesias de Cristo en los Estados Unidos la favoreció, llamándola “la expresión política del reino de Dios en la Tierra.” ¿Opinaba el resto de Jehová que ése era el camino que ellos deberían tomar? ¡No! Cuando éstos celebraron su asamblea general en Cedar Point, Ohio, E.U.A., del 1 al 8 de septiembre de 1919, desenmascararon aquella Sociedad como una falsificación del reino de Dios y declararon públicamente que fracasaría. Rechazando todos los sustitutos que los hombres proponían, los del resto se dirigieron al monte Sión celestial, porque allí veían por fe al Cordero de Dios, Jesucristo, puesto de pie como Rey reinante.—Rev. 14:1-3; Heb. 12:22.
15. ¿Por qué iba llorando el resto cuando buscaba el monte Sión espiritual, y desde qué punto de vista nuevo estudiaron la Biblia?
15 Por eso, con lágrimas por estar “llorando” de gozo, el resto liberado se apartó de Babilonia la Grande y buscó el monte Sión espiritual, donde su Rey celestial había estado de pie reinando desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914. En armonía con el propósito teocrático de ellos, estudiaron la Biblia desde un punto de vista nuevo, fresco, porque entonces podían ver el cumplimiento de una cantidad creciente de profecías bíblicas que estaban relacionadas con el reino de Dios mediante Cristo.
16. ¿Cómo puede decirse que la venganza que el resto proclamaba era “por su templo,” y qué “hechos de justicia” podían relatar como de realización segura?
16 Con denuedo el resto restaurado empezó a declarar “la venganza de Jehová nuestro Dios, la venganza por su templo.” (Jer. 50:28) Ellos mismos formaban parte de un templo espiritual de Dios, un templo figurativo compuesto de Jesucristo, la Principal Piedra Angular, y de los 144.000 miembros de la clase del templo bajo él. (1 Cor. 3:16, 17; Efe. 2:19-22) Durante la I Guerra Mundial el resto de la clase del templo había recibido mucho maltrato, y ese esfuerzo malvado que se hizo por destruirlos suministró a Jehová razón válida para expresar a su debido tiempo su venganza contra Babilonia la Grande y sus amantes. En esa ocasión cumplirá a cabalidad la larga profecía de Jeremías contra Babilonia. Con fe dinámica en que de seguro los demás rasgos de la profecía de Jeremías se cumplirán, y como si en realidad ya se hubieran cumplido, el resto restaurado adopta las palabras de Jeremías 51:10 y dice: “Jehová ha sacado para nosotros hechos de justicia. Vengan y de veras relatemos en Sión la obra de Jehová nuestro Dios.”
17. ¿Para qué obra de pagar de vuelta tiene Jehová lista su propia agencia oportuna?
17 Como Vengador, Jehová tiene a la mano su propia agencia, y, con las siguientes palabras de Jeremías 51:24, anuncia su propósito de utilizarla: “‘Y ciertamente le pagaré de vuelta a Babilonia y a todos los habitantes de Caldea toda su maldad que han cometido en Sión ante los ojos de ustedes,’ es la expresión de Jehová.”
18. Debido a todo el oprobio que se ha lanzado sobre el nombre divino, ¿desde el punto de vista de quién puede el resto expresar un deseo justo respecto a la violencia y derramamiento de sangre ocasionados por Babilonia la Grande?
18 Recordemos todo el oprobio que el sistema mundial de religión de características babilónicas le ha acarreado al nombre del único Dios vivo y verdadero, especialmente al perseguir a las personas dedicadas que llevan y honran el nombre de Dios. Entonces podemos comprender por qué es el propio propósito de Jehová obrar con justicia y eliminar la agencia terrestre que su principal adversario, Satanás el Diablo, ha utilizado de modo especial. Por eso, aquellos que en la Tierra representan a la Sión celestial simplemente adoptan el mismo punto de vista que Jehová tiene de los asuntos y convienen en el propósito que él ha declarado cuando dicen: “‘¡La violencia hecha a mí y a mi organismo venga sobre Babilonia!’ dirá la moradora de Sión. ‘¡Y venga mi sangre sobre los habitantes de Caldea!’ dirá Jerusalén.”—Jer. 51:35.
19. ¿Qué comparación hay entre la crueldad expresada en estas oraciones, según las objeciones de algunos, y lo que Jehová dice, hablando por sí mismo en Jeremías 51:36, 37?
19 No vaya a imaginarse ningún objetante que impute crueldad a esas oraciones que hacen Sión y Jerusalén que Jehová Dios sería injusto si contestara esas oraciones contra Babilonia la Grande de hoy día. Él no pasa por alto el hecho histórico de que ella ha recurrido a la violencia contra los adoradores de Jehová, y que hasta ha vertido la sangre inocente de ellos. Que él hable por sí mismo en las siguientes palabras de Jeremías 51:36, 37: “Por lo tanto esto es lo que ha dicho Jehová: ‘Aquí estoy conduciendo tu causa judicial, y ciertamente ejecutaré venganza para ti. Y realmente secaré el mar [de tráfico comercial] de ella, y de seguro haré que queden secos sus pozos. Y Babilonia tiene que llegar a ser montones de piedras.’”
20. ¿Qué testimonio presta, relacionado con las obras de Jehová, el estado actual de las cosas en el lugar antes ocupado por la antigua Babilonia?
20 Al tiempo de proclamarse esta profecía en 614 a. de la E.C., o 75 años antes de que Babilonia fuera tomada, su realización parecía imposible. En 614 a. de la E.C. Babilonia estaba ascendiendo al apogeo de su poder y gloria. Pero hoy día el lugar donde la antigua Babilonia estuvo plantada orgullosamente a orillas del río Éufrates da testimonio de que Jehová no se equivocó en lo que profetizó. Solo quedan allí unas cuantas de las piedras originales de Babilonia. Las palabras con que Jehová dio seguridad a Su pueblo maltratado se hicieron realidad. Ciertamente él se encargó de la “causa judicial” de ellos en el tribunal del universo; ciertamente ejecutó venganza divina para ellos. Con justicia se encargó de que se saldaran las cuentas.
21, 22. Según Salmo 137:8, 9, ¿qué felicidad tendrá el Ciro Mayor en el futuro cercano?
21 En el futuro cercano el antitípico Ciro, el glorificado Jesucristo, tendrá la feliz función oficial de encargarse de que sean saldadas las cuentas con Babilonia la Grande de hoy día. Los adoradores de Jehová que han sufrido a manos de ella adoptan el punto de vista divino de la justicia y por eso pueden unirse al inspirado salmista al decir:
22 “Oh hija de Babilonia, que has de ser despojada violentamente, feliz será el que te recompense con tu propio tratamiento con que tú nos trataste. Feliz será el que agarre y de veras estrelle a tus hijos contra el peñasco.”—Sal. 137:8, 9.
23. ¿Se utilizarán agencias terrestres en el derrumbamiento de Babilonia la Grande? No obstante, ¿quién toma la responsabilidad por ello?
23 Al debido tiempo se dará rienda suelta a agencias humanas terrestres para que arruinen a Babilonia la Grande. (Rev. 17:15-18) Pero Jesucristo se alegrará de aceptar la responsabilidad por eliminar a dicho imperio mundial de la religión falsa. La profecía bíblica le atribuye a él, en su papel del Ciro Mayor, el derrumbamiento merecido de Babilonia la Grande. Tanto él, cuando estuvo en la Tierra como hombre, como los que han seguido sus pisadas han sufrido violentamente a manos de ella.—Rev. 18:24.
24. (a) ¿Cómo se muestra presuntuosa Babilonia la Grande en lo que tiene que ver con regir? (b) ¿De quién es “hija” ella, y qué cosas calamitosas le sobrevendrán pronto, y cómo?
24 Babilonia la Grande ha sido la Presunción personificada. (Jer. 50:31, 32) Lo que ella considera como su rival ahora no es la Jerusalén o Sión terrestre donde está la “Cúpula de la Roca” islámica, sino el monte Sión celestial, porque allí reina como Rey el Ciro Mayor. Para mostrar que existe esa rivalidad, ella dice: “Estoy sentada reina.” (Rev. 18:7) Si a ella se le ha de llamar “hija” como se le llamó a la antigua Babilonia, eso ella realmente lo es de Satanás el Diablo. (Juan 8:44; Jer. 50:42; 51:33) Se predice que dos cosas desastrosas han de sobrevenirle repentinamente a esta fornicadora religiosa, a saber: “Pérdida de hijos y viudez.” (Isa. 47:9; Rev. 18:7, 8; Jer. 50:9) O se dará muerte a los miembros de su organización religiosa en la venidera “grande tribulación,” o éstos se convertirán en muertos para con ella al abandonarla, al no confesar religión alguna. ¡Esto hará que ella se lamente!
25. Si ninguno de nosotros queremos que se nos clasifique entre aquellos “hijos” de características babilónicas que han de ser estrellados “contra el peñasco,” ¿qué tenemos que hacer sin demora?
25 ¿Hay alguien entre nosotros que quiera que se le cuente entre los “hijos” religiosos de Babilonia la Grande cuando llegue el tiempo señalado de Dios para que a éstos se les estrelle “contra el peñasco”? Si no queremos que se nos clasifique así, especialmente si afirmamos que somos de aquellos a quienes Dios llama “pueblo mío,” entonces ¿qué? Sin demora debemos valernos del tiempo que queda y obedecer el mandato misericordioso que Dios da por medio de su Palabra: “Sálganse de ella, pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas.”—Rev. 18:4; Jer. 50:8.
“Huyan de en medio de Babilonia, y provea escape cada uno para su propia alma. No vaya a dejarlos inanimados el error de ella. Porque es el tiempo de la venganza que le pertenece a Jehová. Hay tratamiento por el cual él le está haciendo el pago.”—Jer. 51:6.
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La calamidad que espera a todos los falsos religiosos del mundoLa Atalaya 1980 | 1 de diciembre
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La calamidad que espera a todos los falsos religiosos del mundo
1. ¿A cuántos se calcula que asciende la población religiosa, y qué impacto tendrá sobre naciones la caída de ese imperio religioso?
LA POBLACIÓN religiosa del mundo es enorme. El World Almanac para 1980 calcula la cantidad de personas religiosas en la elevada cifra de 2.511.417.750. Entre éstos cuenta a los que afirman ser cristianos, judíos, musulmanes, budistas, hindúes y otros. Cuando ese imperio religioso que está interiormente dividido se derrumbe, la mayoría de la humanidad sobreviviente se asombrará. El impacto desconcertante de este suceso se predice en las siguientes palabras: “Al sonido de cuando Babilonia haya sido tomada, a la tierra ciertamente se le hará mecerse, y entre las naciones se oirá un alarido mismo.” “¡Escuchen! Hay un alarido desde Babilonia, y un gran estallido desde la tierra de los caldeos, porque Jehová está despojando con violencia a Babilonia, y ciertamente destruirá de en medio de ella la gran voz, y las olas de ellos realmente estarán bulliciosas como muchas aguas. El ruido de la voz de ellos ciertamente se emitirá. Porque tiene que venir sobre ella, sobre Babilonia, el violento despojador, y los hombres poderosos de ella ciertamente serán capturados. Sus arcos tendrán que ser desbaratados, porque Jehová es un Dios de recompensas. Sin falta hará la paga.”—Jer. 50:46; 51:54-56.
2. (a) ¿Con qué clase de “voz” habló la antigua Babilonia a las naciones, pero cómo fue ahogada su “voz”? (b) Según la describe Revelación, ¿sobre qué está cabalgando la Babilonia moderna? ¿Qué le hará esta montura?
2 El cumplimiento de esto será un suceso que cambiará al mundo, un acontecimiento sin paralelo en lo oído hasta entonces. (Jer. 51:2, 60, 64) En su calidad de Tercera Potencia Mundial de la historia antigua, Babilonia habló con “gran voz” de autoridad. Pero en 539 a. de la E.C. su “voz” quedó ahogada por las olas bulliciosas de los invasores que la conquistaron. Lo que hoy día corresponde con ella, Babilonia la Grande, ha hablado con una “voz” más imperiosa todavía. El mundo entero ha escuchado. El libro bíblico de Revelación, capítulo 17, la representa encaramada licenciosamente sobre una bestia salvaje de siete cabezas, la cual bestia de color escarlata simboliza una organización mundial. Las siete cabezas de la bestia representan las siete potencias mundiales que se han sucedido unas a otras hasta llegar a la Potencia Mundial Angloamericana de hoy día. (Rev. 17:1-6) Los 10 cuernos de la bestia “significan diez reyes.” (Rev. 17:12) La tercera de las siete cabezas representó al Imperio Babilonio, y la cuarta representó al Imperio Medopersa. La religiosa Babilonia la Grande ha desempeñado el papel de ramera con las siete potencias mundiales. Ha tratado de cabalgar sobre todas como amante de ellas. Ellas han bebido de la mezcla religiosa que ella tiene en su copa de oro. Al cansarse de ella, por fin la odiarán y la derribaran de sobre sí.
3. (a) ¿Qué declaró Jehová que él traería contra el antiguo prototipo de Babilonia la Grande, y de dónde? (b) ¿Por qué se presentó a los medos de manera tan destacada?
3 Jehová fortalece el argumento a favor de que nos salgamos rápidamente de Babilonia la Grande al declarar su propósito de hacer que contra la que fue el antiguo prototipo de ella suba “una congregación de grandes naciones desde la tierra del norte” para atacarla. Puesto que la “congregación” sería una fuerza militar combinada bajo un solo comandante, a ésta también podría llamársele una “nación . . . del norte.” (Jer. 50:3, 8, 9) La profecía estuvo correcta al predecir que “los reyes de los medos” se destacarían entre aquella “congregación” de naciones. (Jer. 51:11) No se menciona que los persas hayan estado entre la congregación. Esto no fue debido a un descuido accidental, puesto que Ciro el Grande, quien asumió el mando supremo de la “congregación,” ciertamente tenía sangre meda. Después que él hubo conquistado el reino de los medos, incorporó en su ejército principalmente a soldados medos. Ciro llegó al poder después del día de Jeremías.
4. Después de la caída de Babilonia, ¿quién fue el primero que empezó a reinar en aquella ciudad, y cómo tuvo razón Daniel en cuanto al que se encumbraría en el Imperio Medopersa?
4 Cuando Babilonia cayó en 539 a. de la E.C., Darío el Medo, quien empezó a reinar allí, tenía 62 años de edad. (Dan. 5:30, 31) En cuanto al Imperio Medopersa, Daniel 8:3 tuvo razón al mostrar que la parte persa se encumbraría después. Ciro el persa fue quien decretó el regreso de los judíos desterrados a su propia tierra.—Esd. 1:1-4.
5. (a) ¿Con qué dirección se asocia a Jehová en lo que tiene que ver con obras de destrucción? (b) ¿Quién declaró él que le serviría de garrote para hacer añicos a naciones y reinos?
5 Como en el caso de la destrucción de Jerusalén en la fecha más temprana de 607 a. de la E.C., la destrucción le sobrevendría a Babilonia desde el “norte.” (Eze. 1:4; 9:2; Jer. 50:41; 51:48) En cuanto a dirección, Salmo 75:6, 7, parece asociar a Dios con el norte cuando dice: “Ni del oriente ni del occidente, ni del sur hay un ensalzamiento. Porque Dios es el juez. A éste abate, y a aquél ensalza.” Por la ruta del norte, el rey Nabucodonosor de Babilonia vino en 609 a. de la E.C. contra Jerusalén y su rey rebelde, Sedequías. Dos años más tarde, “la moradora de Sión” pudo exclamar: “Nabucodonosor el rey de Babilonia . . . me ha tragado como una culebra [o dragón].” (Jer. 51:34, 35) En cuanto a lo que Jehová Dios tuvo que ver con la destrucción de Jerusalén, Dios dijo allá en 614 a. de la E.C., según lo cita Jeremías, las siguientes palabras respecto a Nabucodonosor como su instrumento de ejecución: “Tú eres para mí un garrote, como armas de guerra, y por medio de ti ciertamente haré añicos a naciones [a Judá, Egipto, Moab, Amón, Edom y otras], y por medio de ti verdaderamente arruinaré a reinos. . . . y por medio de ti de veras haré añicos a gobernadores y gobernantes diputados.”—Jer. 51:20-23.
6. Después de las palabras ya citadas, ¿qué declaró Jehová que pagaría de vuelta a los habitantes de Caldea?
6 Después de eso, ¿qué, oh Jehová? “Ciertamente le pagaré de vuelta a Babilonia [no a Nabucodonosor] y a todos los habitantes de Caldea toda su maldad que han cometido en Sión [o Jerusalén] ante los ojos de ustedes.”—Jer. 51:24, 59, 60.
7. ¿Qué grito de guerra levantó Jehová contra Babilonia en 614 a. de la E.C., y quiénes respondieron?
7 En los días de Nabucodonosor y sus sucesores, el Imperio Medo yacía más allá del río Tigris y al este y norte del Imperio Babilonio. Para cumplir la profecía, Ciro el Grande, acompañado del rey medo Darío, vino desde el norte contra la tierra de los caldeos y su capital, Babilonia. Estos despojadores de Babilonia respondieron al siguiente grito de guerra de Jehová que él ya había emitido en 614 a. de la E.C.:
“Alcen una seña en el país. Toquen un cuerno entre las naciones. Santifiquen contra ella a las naciones. Manden a llamar contra ella a los reinos de Ararat, Mini y Asquenaz [hacia el norte]. Comisionen contra ella a un oficial de reclutamiento. Hagan subir los caballos como langostas erizadas. Santifiquen contra ella a las naciones, los reyes de Media, sus gobernadores y todos sus gobernantes diputados y toda la tierra del dominio de cada uno. Y mézase la tierra y esté con fuerte dolor, porque contra Babilonia se han levantado los pensamientos de Jehová para hacer de la tierra de Babilonia un objeto de pasmo, sin habitante alguno.”—Jer. 51:27-29.
8. ¿A quién santifica Jehová para servicio contra Babilonia la Grande, y cuándo llega la destrucción de ella? Después de la liberación ¿de quién?
8 Jehová procedió a ‘santificar’ al persa Ciro el Grande para Su servicio militar contra Babilonia. Las palabras de Jehová en Isaías 44:28 a 45:7 se refieren a Ciro por su nombre personal como “mi pastor” y como un “ungido.” Él representó al “Pastor” Mayor de Jehová, Jesucristo, por medio de quien Jehová destruye lo que la Babilonia de la antigüedad representó, a saber, a Babilonia la Grande, el imperio mundial de la religión falsa. Por medio de su Ciro Mayor, Jehová ya ha liberado a su pueblo dedicado de servidumbre a la imperial Babilonia la Grande, desde el año 1919 en adelante. La destrucción total de ella vendrá por medio de este mismo Ciro Mayor en la venidera “grande tribulación” predicha en Revelación 7:13, 14.
EL FRACASO DE LOS “DIOSES” Y LAS “DIOSAS”
9. ¿Qué deidades tenía la antigua Babilonia, y por la manera en que éstas hicieron frente a la calamidad que le sobrevino a ésta, qué se ve prefigurado respecto a Babilonia la Grande en la “grande tribulación”?
9 La antigua Babilonia tenía sus deidades, entre ellas Bel, Merodac (Marduc), Sucot-benot, Nebo, la diosa Istar (Astoret) y otras, además de los sacerdotes practicantes de magia. (Jer. 50:2; 51:44; 2 Rey. 17:30; Isa. 46:1, 2) ¿Por qué no acudieron éstos al socorro de la vieja Babilonia? La respuesta es que aquellas deidades idolátricas no eran dioses. (1 Cor. 8:5, 6) El fracaso de éstas prefigura que ninguna de las deidades de Babilonia la Grande podrá salvarla de la calamidad que se ha fijado para sobrevenirle en la “grande tribulación.” No le faltan dioses y diosas. En el caso del hinduismo, se informa que hay 330.000.000 de deidades, entre ellas la trinidad de Brahma, Visnú y Siva. (The Americana, página 196, edición de 1929) Además hay los dioses de las tribus africanas y de los practicantes del voduismo, las deidades de los budistas y de los confucionistas, y no debe hacerse caso omiso del “Dios trino y uno” de la cristiandad. Estos no tienen poder para salvar.
10. En la venidera demostración de divinidad, ¿quién resultará ser el que verdaderamente la posee?
10 En la venidera demostración de Divinidad, el Dios Todopoderoso Jehová estará en contra de todos los dioses y diosas del imperio mundial de la religión falsa de características babilónicas. Satanás el Diablo, el dios invisible de este sistema de cosas, no podrá demostrar que es a las deidades de Babilonia la Grande a las cuales se debe acudir para salvación. (Efe. 2:2; 2 Cor. 4:4) Solo Jehová permanecerá victorioso en el campo de contienda como el único Dios vivo y verdadero, el Salvador.
11. ¿A quién utiliza Jehová visiblemente para la destrucción de Babilonia la Grande, y qué dice Revelación 17:11 acerca de esa agencia?
11 En la venidera ‘contienda de los dioses,’ Jehová no utilizará visiblemente a su Ciro Mayor, Jesucristo, para derribar a Babilonia la Grande. Dejará que los representantes visibles de la Octava Potencia Mundial de la historia bíblica obren agresivamente contra Babilonia la Grande. Esa potencia mundial más reciente es la agencia que las naciones mundanas han ideado y empleado desde 1919 al tratar de conservar la paz y seguridad del mundo, y es ahora las Naciones Unidas. Esa institución hecha por el hombre tiene una “congregación” de 152 naciones que la apoyan en la actualidad. Se le caricaturiza como una bestia salvaje de color escarlata con siete cabezas sobre las cuales hay 10 cuernos, acerca de la cual Revelación 17:11 dice: “Ella misma es un octavo rey, pero proviene de los siete [las siete cabezas], y se va a la destrucción.” Antes de la destrucción de esta potencia en “la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón, Dios deja que esta Octava Potencia Mundial se apunte una victoria pasmosa, pero no en contra de él.—Rev. 16:14, 16.
12. Desde que la “bestia salvaje” llegó a existir por votación en 1919, ¿quién la ha estado guiando?, pero según Revelación 17:15–17, ¿qué le hará la “bestia salvaje” a la que cabalga sobre ella?
12 Desde que la simbólica bestia de color escarlata llegó a existir por votación en el año posbélico de 1919, ha permitido que la “ramera” religiosa, Babilonia la Grande, haya cabalgado sobre su lomo como una reina y la haya guiado. (Rev. 17:18) Durante la “grande tribulación” y cuando llegue la hora de Dios para ello, de las palabras de Dios en Revelación 17:15-17 podrá derivarse la señal de proseguir: “Las aguas que [tú, Juan] viste, donde está sentada la ramera, significan pueblos y muchedumbres y naciones y lenguas. Y los diez cuernos que viste, y la bestia salvaje, éstos odiarán a la ramera y harán que quede devastada y desnuda, y se comerán sus carnes y la quemarán por completo con fuego. Porque Dios puso en sus corazones el llevar a cabo el pensamiento de él, aun el llevar a cabo el solo pensamiento de ellos al dar el reino de ellos a la bestia salvaje, hasta que se hayan realizado las palabras de Dios.”
13, 14. (a) Según el conocimiento que Jehová tiene por anticipado, ¿qué permite que le hagan a la “ramera” los elementos políticos? (b) Inmediatamente después de conseguir la victoria sobre ella, ¿qué harán éstos respecto a los testigos de Jehová, y en qué resultará su proceder?
13 Como se predice en esas palabras, las naciones que se unieron a la Liga o Sociedad de las Naciones dieron primero a ésta y luego a su sucesora, las Naciones Unidas, poder disuasivo en el interés de conservar la paz y seguridad del mundo. Jehová no las movió a hacer eso, sino que, pensando en el futuro, expresó en su Palabra escrita el conocimiento que tenía por anticipado de ello. También predijo que esas naciones, asociadas unas con otras como una “congregación,” se cansarían de la carga que llegaría a ser para ellas la entremetida internacional en asuntos políticos, la ramera Babilonia la Grande. Cuando ésta sea derribada del lomo de aquel organismo internacional interesado en conservar la paz, y por fin sea quemada con fuego, los testigos cristianos de Jehová no se asustarán ante esa “calamidad” que le sobrevendrá a ella. Por la Palabra de Dios saben que, en la Tierra, ellos representan al celestial “Señor de señores y Rey de reyes,” Jesucristo, y que, por esta misma razón, los conquistadores de Babilonia la Grande, exaltados por su victoria, se volverán contra ellos, considerándolos el único estorbo que queda entre ellos y su ejercicio de dominación mundial. Los testigos de Jehová reciben noticia por anticipado de esto en la siguiente profecía de Revelación 17:13, 14:
14 “Estos [elementos políticos representados en las Naciones Unidas] tienen un solo pensamiento, y así es que dan su poder y autoridad a la bestia salvaje. Estos combatirán con el Cordero, pero, porque es Señor de señores y Rey de reyes, el Cordero los vencerá. También, los llamados y escogidos y fieles que con él están lo harán.”
15, 16. (a) ¿Qué significa, en realidad, ese choque final por la dominación mundial? (b) ¿Qué vista por anticipado nos da el apóstol Juan de este acontecimiento, y en qué resulta éste?
15 Este encuentro militar significa la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en la situación mundial que se llama Har-Magedón. (Rev. 16:13-16) Bajo la protección de Jehová sus testigos en la Tierra serán testigos de la “guerra” que se describe en Revelación 19:11-21. En una vista por anticipado de este último choque por las cuestiones que tienen que ver con la dominación mundial, el apóstol cristiano Juan describe el resultado de la guerra como sigue:
16 “Vi a la bestia salvaje y a los reyes de la tierra y a sus ejércitos reunidos para hacer la guerra contra el que iba sentado en el caballo [Jesucristo, el mariscal de campo de Jehová] y contra su ejército [de ángeles celestiales]. Y la bestia salvaje fue prendida, y junto con ella el falso profeta [la Potencia Mundial Angloamericana] que ejecutó delante de ella las señales con las cuales extravió a los que recibieron la marca de la bestia salvaje y a los que rinden adoración a su imagen [las Naciones Unidas]. Estando todavía vivos, ambos fueron arrojados al lago de fuego que arde con azufre. Pero los demás fueron muertos con la espada larga del que iba sentado en el caballo, la cual espada salía de su boca. Y todas las aves [mencionadas en los versículos 17, 18 de Rev 19] se saciaron de las carnes de ellos.”
17. ¿A qué pone fin esta calamidad que cae sobre los elementos políticos ateos, y entonces qué sucede en lo que toca a los elementos invisibles?
17 Esa destrucción de todos los elementos ateos de este sistema de cosas controlado por el Diablo terminará la “grande tribulación” que se menciona en Revelación 7:14. Después de esto se atará y se meterá en el abismo al gobernante invisible del mundo, Satanás el Diablo, y a todos sus ángeles demoníacos, y éstos permanecerán allí por los siguientes 1.000 años.—Rev. 20:1-3.
18. ¿Qué muestra la Palabra de Dios en cuanto a si por esa guerra de todas las guerras la Tierra quedará enteramente despoblada o no?
18 ¿Dejará esa guerra de todas las guerras en Har-Magedón una Tierra totalmente privada de toda vida humana? El diluvio que puso fin al mundo antiguo del día de Noé no despobló la Tierra, porque ocho sobrevivientes humanos pasaron por aquel diluvio que abarcó toda la Tierra. (2 Ped. 2:5) Jehová, el Dios de Noé, formó la Tierra “aun para ser habitada.” (Isa. 45:18) Por medio del profeta Isaías, Jehová predijo, mencionándolo por su nombre personal, al conquistador persa, Ciro el Grande, y este libertador de los judíos desterrados fue levantado para prefigurar al Libertador Mayor, Jesucristo. En la venidera “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón, Jesucristo ganará la victoria sobre todos los enemigos terrestres de Jehová y de su pueblo, y matará a los enemigos del reino de Dios. Jesucristo no realizará esta obra de ejecución a costa de todo miembro del resto de sus seguidores ungidos y engendrados por espíritu que todavía estén en la Tierra, porque en tal caso no habría una victoria completa para el lado del reino de Dios. Además, ¿qué hay de la “grande muchedumbre” de compañeros fieles del resto ungido? Revelación 7:9-15 dice claramente que esta “grande muchedumbre” sobrevivirá a la “grande tribulación” que llega a su punto culminante en Har-Magedón.
SE DA NOTICIA DE LA “CALAMIDAD” VENIDERA
19, 20. (a) Antes de que acontezca la calamidad mundial, ¿a quién hay que notificar esto? (b) ¿Cómo ilustró Jehová esta obra de notificar en el día de Jeremías?
19 ¡La calamidad mundial está justamente adelante! Hay que dar noticia de esto a esa figura dominante del mundo, Babilonia la Grande. Esta obra de notificarle se ilustró allá en el día del profeta Jeremías, sí, allá en 614 a. de la E.C. En cuanto a esto, él nos dice lo siguiente:
20 “La palabra que Jeremías el profeta le ordenó a Seraya hijo de Nería hijo de Mahseya cuando éste fue con Sedequías el rey de Judá a Babilonia en el año cuarto de ser rey; y Seraya era el comisario ordenador. Y Jeremías procedió a escribir en un solo libro toda la calamidad que vendría sobre Babilonia, aun todas estas palabras escritas contra Babilonia. Además, Jeremías le dijo a Seraya: ‘Tan pronto como llegues a Babilonia y realmente la veas, también tienes que leer en voz alta todas estas palabras. Y tienes que decir: “Oh Jehová, tú mismo has hablado contra este lugar, para cortarlo de modo que no llegue a haber en él habitante alguno, sea hombre o aun animal doméstico, sino que llegue a ser meros yermos desolados hasta tiempo indefinido.” Y tiene que suceder que cuando hayas completado la lectura de este libro, le atarás una piedra, y tienes que arrojarlo en medio del Éufrates. Y tienes que decir: “Así es como sé hundirá Babilonia y nunca se levantará a causa de la calamidad que estoy trayendo sobre ella; y ciertamente se rendirán de cansancio.”’”—Jer. 51:59-64.
21, 22. ¿Cómo se imitó proféticamente en el libro de Revelación aquella acción de Seraya, y con qué palabras acompañantes?
21 Lo que se le mandó hacer a Seraya, hermano de Baruc, hijo de Nería, a fin de ilustrar el derrumbamiento de la antigua Babilonia se copió en el libro de Revelación. El escritor, el apóstol cristiano Juan, primero describe la destrucción de la religiosa “ramera” internacional, Babilonia la Grande, y luego pasa a decir:
22 “Y un ángel fuerte alzó una piedra semejante a una gran piedra de molino y la arrojó al mar, diciendo: ‘Así con lanzamiento veloz será arrojada hacia abajo Babilonia la gran ciudad, y nunca volverá a ser hallada. . . . ninguna voz de novio y de novia jamás volverá a oírse en ti; porque tus comerciantes viajeros eran los hombres de primer rango de la tierra, pues por tu práctica espiritista todas las naciones fueron extraviadas. Sí, en ella se halló la sangre de profetas y de santos y de todos los que han sido muertos atrozmente en la tierra.’”—Rev. 18:21-24.
23. (a) ¿Por qué será de corta duración el regocijo de los conquistadores ateos de Babilonia la Grande? (b) Por lo tanto, ¿qué tratarán de hacer entonces aquellos ateos, y con qué consecuencias?
23 El regocijo al cual los “reyes” o gobernantes políticos ateos se entregarán después de lanzar a Babilonia la Grande en el mar de la destrucción será de corta duración. Todavía tendrán enfrente a muchos sobrevivientes adoradores del Dios vivo Jehová, los cuales serán el resto ungido de la clase de Jeremías y también sus compañeros leales, la “grande muchedumbre” que el apóstol Juan previó. Habrá que hacer frente a éstos. Cuando esos gobernantes políticos traten de eliminar de la Tierra toda adoración por medio de tocar al resto y a sus compañeros, será igual a tocar al Amo de éstos, Jesucristo, el Ciro Mayor. Esto significará guerra entre él y ellos en Har-Magedón. La guerra que estallará entonces superará al guerrear moderno con armas de radiación que las naciones actualmente están tratando de evitar entre sí, pues desde la región invisible Jesucristo y su ejército de ángeles celestiales destruirán a estos presuntuosos atacantes de los testigos de Jehová.
24. ¿Quiénes tendrán el privilegio de ser testigos oculares de esa “guerra del gran día,” y sin tener que participar en ella, pero con qué reacción?
24 ¡Qué gran privilegio será el ser testigo ocular de esa “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón! Bajo la protección de Dios y sin tener que tomar parte en la pelea, el resto de la clase de Jeremías y sus compañeros dedicados disfrutarán de ese privilegio aquí mismo en la Tierra, el campo de batalla. Así, el que ellos hayan proclamado “el día de la venganza de parte de nuestro Dios” será ampliamente recompensado; no se habrá hecho en vano. (Isa. 61:2) ¿Quién puede medir ahora lo grande que será entonces su júbilo y el de todos los santos ángeles del cielo bajo Cristo?
25. (a) ¿Qué oportunidad se hará accesible a la “grande muchedumbre” de sobrevivientes después de la “guerra”? (b) ¿Qué incentivo debería dar ahora al pueblo de Jehová la perspectiva de cosas tan grandiosas?
25 Radiantes de alegría, estos ejemplos vivos del poder preservador de Jehová marcharán adelante para entrar en Su nuevo sistema de cosas en una Tierra purificada. Entonces se les hará accesible la oportunidad de comenzar la reconstrucción de un paraíso que se extenderá por todo el globo terrestre, del cual podrá disfrutar para siempre la “grande muchedumbre” fiel. ¿Qué incentivo debería dar la perspectiva de todas estas grandiosas cosas a todos los que actualmente desean ser contados entre el “pueblo mío,” el pueblo de Jehová? ¡Incentivo para obedecer Su mandato resonante de ‘salirse’ de la presuntuosa Babilonia la Grande sin más demora, y luego atenerse firmemente a la neutralidad cristiana para con los amantes políticos de ésta a la vez que sin transigir apoyan y defienden el Reino de Jehová mediante Cristo hasta el glorioso día de la victoria!
(Este artículo concluye la serie de estudios sobre la profecía de Jeremías.)
[Ilustración en la página 18]
La ramera religiosa, Babilonia la Grande, será derribada del lomo de la bestia salvaje
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‘No juzgue a los demás’La Atalaya 1980 | 1 de diciembre
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‘No juzgue a los demás’
Los humanos en su imperfección tienden a compararse unos con otros y a sacar conclusiones en cuanto a la valía de su semejante. Estas conclusiones suelen basarse en preferencia personal o gusto particular o recibir la influencia de una diversidad de antecedentes o educación.
Sin embargo, los cristianos verdaderos tienen que ejercer cuidado para no ver a otros desde un punto de vista incorrecto. Pablo, el apóstol cristiano, en una consideración sobre comer ciertos alimentos, estableció un principio que puede ayudarnos a mantener equilibrio en este importante aspecto de la vida. Escribió: “El que come no menosprecie al que no come, y el que no come no juzgue al que come, porque Dios ha recibido con gusto a ése.”—Rom. 14:3.
Jehová Dios recibe con gusto a todos los que se esfuerzan por hacer Su voluntad. Entonces, ¿por qué debería algún humano despreciar a otros o juzgarlos sobre la base de lo que hagan en cuanto a lo personal? En el caso que se considera, el que comía carne con conciencia tranquila quizás haya tendido a despreciar al que no comía, por considerar a éste como demasiado escrupuloso, extremista. Por otra parte, e incorrectamente, el que no comía quizás juzgara como violador de leyes o pecador al que comía carne. El cristiano que se mantiene equilibrado en estos aspectos de la vida —ya sea en lo referente a comida y bebida, diversión, ropa o cosas semejantes— se da cuenta de que él es simplemente un siervo o esclavo de Dios y que, como tal, no tiene derecho a evaluar a los demás sobre la base de sus propias opiniones privadas. Por eso, en cuanto a cosas que tienen que ver con selección o preferencia personal, no desprecia a sus compañeros de creencia ni los juzga como malhechores.
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