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  • La Biblia y la creación a la luz de la ciencia moderna
    La Atalaya 1965 | 15 de febrero
    • de la entera historia de la arqueología ha sostenido las especulaciones de la evolución. Es exactamente como declaró un artículo en el Harper’s Magazine (julio de 1963): “Todavía tenemos que desenterrar vestigios de los monos inteligentes que dieron origen a la humanidad.” ¡Y este artículo se escribió en apoyo de la evolución! ¡Piense en ello, después de más de un siglo de investigación frenética por hordas de evolucionistas el registro de las rocas grita más fuerte que nunca que “Dios creó”! Los evolucionistas no pueden “desenterrar vestigios de los monos inteligentes que dieron origen a la humanidad” simplemente porque jamás existieron, salvo, como insinuó el Times de Londres, ‘en la imaginación de alguien.’

      27. ¿Qué verdad afirma toda la evidencia?

      27 Ante tal evidencia, las personas de corazón honrado se convencerán, pero los escépticos jamás, puesto que quieren aferrarse al error que encaja en su propósito. “Por eso es que Dios deja que una operación de error vaya a ellos, para que lleguen a creer la mentira, a fin de que todos ellos sean juzgados porque no creyeron la verdad, sino que se complacieron en la injusticia.” (2 Tes. 2:11, 12) Las personas temerosas de Dios no son embaucadas por especulaciones satánicas que tienen en poco la Biblia, la Palabra de Dios, y adulteran su efecto; que hacen a Dios innecesario como Creador, Sostenedor y Proveedor; y que descartan la realidad de la caída del hombre en el pecado y su necesidad de redención. Los humildes dicen como dijo el salmista de tiempos antiguos: “¡Cómo amo tu ley, sí! Durante todo el día es mi interés.” (Sal. 119:97) Estos saben con certeza, como muestra la evidencia de la ciencia moderna que “Jehová es Dios. Es él quien nos ha hecho, y no nosotros mismos.”—Sal. 100:3.

  • La Palabra de Dios, la guía verdadera para el hombre
    La Atalaya 1965 | 15 de febrero
    • La Palabra de Dios, la guía verdadera para el hombre

      “Tu palabra es una lámpara para mi pie, y una luz para mi calzada”—Sal 119:105.

      1, 2. ¿Qué justipreciación correcta podemos hacer de la ciencia?

      SE CREE que la ciencia, en sus diferentes ramos, también tiene la respuestas a muchos de los problemas cotidianos de la vida. Muchos creen que las respuestas que no tiene ahora las conseguirá pronto, de modo que con el tiempo los problemas del hombre, como los que tienen que ver con el alimento, ropa, alojamiento, enfermedad y hasta problemas sociales y morales, todos serán resueltos.

      2 No hay duda de que la ciencia ha hecho bien en algunos de estos campos. Ha elevado las normas de vida para algunos y ha provisto muchas comodidades. Ha inventado asombrosos mecanismos, como el avión para viajar rápidamente; teléfonos para comunicarse eficazmente; así como otros aparatos que ahorran tiempo y trabajo. En la medicina el progreso ha tenido como meta el aliviar algo el sufrimiento del hombre. Nada de este progreso se tiene en menos. Pero al mismo tiempo la ciencia también ha ayudado a producir una era de máquinas muy desequilibrada que ha resultado en tensión aterradora, enfermedad mental, delincuencia, altercación marital, crimen y violencia. Mientras más “adelantada” ha llegado a ser una nación científicamente, más han aumentado estos problemas. Algunos cálculos muestran que tan solo en los Estados Unidos de Norteamérica, uno de los países más adelantados de esta era científica, ¡tantos como 18 millones de personas necesitan alguna clase de ayuda mental! ¡Una de cada dos camas de hospital en ese país está ocupada por un paciente con alguna enfermedad mental!

      3. ¿Qué recursos usa mal la ciencia, con qué consecuencias?

      3 Además, es la ciencia la que ha inventado las armas que han segado la vida a más personas en dos guerras mundiales que las que fueron muertas en las guerras combinadas de toda la historia previa. ¡Es la ciencia la que ha inventado máquinas de destrucción en nuestro día que podrían destruir la mayor parte de la vida sobre la Tierra en unos minutos! Así, la gente vive en constante miedo a estas armas monstruosas que poseen tanto naciones orientales como occidentales. Para proveer para todo esto, como indicó el Times de Nueva York en su número del 13 de marzo de 1962, hay “más de 50,000,000 de personas en uniforme o produciendo para estos uniformados, un número mayor que la población total de Francia.” También notó que el total de gasto militar mundial anualmente “ahora asciende a 120,000,000,000 de dólares, o más de los ingresos totales de todos los países subdesarrollados.” ¿Qué podría efectuar todo este dinero y toda esta gente si se usaran para el bien de la humanidad? ¡Se calcula que se podría proveer alojamiento adecuado para aproximadamente 240,000,000 de personas, los hambrientos entre los tres mil millones de habitantes del mundo podrían alimentarse, y a los enfermos del mundo se les podría suministrar atención médica!

      4. ¿Cómo reconocen otros el fracaso de la ciencia en cuanto a resolver los problemas básicos del hombre?

      4 Muchos reconocen que la ciencia no ha resuelto los problemas básicos del hombre. Una publicación médica alemana informó: “La salud mental de todos los pueblos civilizados está en peligro hoy en día a un grado jamás conocido antes. . . . Lo que el hombre ha conseguido por medio de la ciencia, conocimiento técnico, industria y organización . . . está en peligro de perder más del triple a causa de la fuerte amenaza contra el apropiado equilibrio físico y mental.”a Dijo el Saturday Evening Post (15 de junio de 1963): “La ciencia y la tecnología continúan dejando atrás el progreso social, político y filosófico a una velocidad aterradora.” El hecho de que la ciencia contribuye a los males sociales y morales se puede ver por las condiciones que predominan en muchas de las grandes ciudades industriales a través del mundo. El Guardian de Mánchester del 16 de mayo de 1963 informó: “Nuestras grandes ciudades . . . son una deshonra para cualquier cuerpo de hombres que se llame civilizado: la premura, la velocidad, el apiñamiento, la irritación son tan grandes que las sensibilidades de los automovilistas tienen que cauterizarse. Aun los conductores considerados se ven obligados . . . a portarse subhumanamente. Estas condiciones operan en nosotros gradual e imperceptiblemente. La máquina está incivilizándonos: las actitudes que engendra tienen que derramarse en otros departamentos de la vida.”

      5. Muestre por qué la ciencia no es una guía verdadera para el hombre.

      5 Verdaderamente, la ciencia no ha resuelto los males sociales, morales y espirituales del mundo, sino que ha agregado a ello. No ha resultado ser una guía verdadera para el hombre en el pasado, ni en la actualidad, ni resultará ser tal guía en el futuro. Como declaró un famoso encargado de una columna de periódico: “No sabemos que esta era de la ciencia tenga límites naturales, y lo que estamos empezando a comprender ahora es que también es incontrolable. La ciencia simplemente no sabe qué está haciendo ni adónde va, en ningún sentido universal; y si el bien que hace es fundamental, el daño que causa es absolutamente irreparable.”b Esta responsabilidad

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