Una graduación diferente
LAS ceremonias de graduación han despertado el interés de la gente desde el siglo XIV, pero ninguna ha sido tan importante para el futuro de la familia humana como las que comenzaron a celebrarse hace más de 40 años en una comunidad agrícola del nordeste de los Estados Unidos. El 23 de junio de 1943 se graduó la primera clase de misioneros de la Escuela Bíblica de Galaad de la Watchtower. El 4 de marzo de 1984 se graduó la clase número 76. Y entre esas fechas, los graduados de la Escuela de Galaad han encabezado la predicación de las “buenas nuevas” del Reino establecido de Dios hasta “la parte más lejana de la tierra”. (Mateo 24:14; Hechos 1:8.)
Cuando se envió a campos en el extranjero a la primera clase, compuesta de 94 misioneros, había 126.000 Testigos predicando las “buenas nuevas” en 54 países. Pero ahora hay más de 2.500.000 Testigos que publican con regularidad las “buenas nuevas” en 205 países. Los 40 recién graduados unirán sus voces a la declaración de las “buenas nuevas” que se están predicando en 16 de esos países.
¿En qué se diferencia?
¿Qué distingue a una graduación de la Escuela de Galaad? “Varias cosas —contesta Frederick W. Franz, actual presidente de la Escuela—. Una de ellas es que los graduados de otras escuelas han completado cursos que ellos mismos han seleccionado y que los han preparado para emprender una carrera en un campo que ellos mismos han escogido. Pero en la Escuela de Galaad todos los graduados participan en los mismos cursos y otras personas escogen por ellos la que ha de ser su asignación misional. El Cuerpo Gobernante escoge el curso, además del territorio al cual se enviará a cada misionero.”
Al principio, los estudiantes de la Escuela de Galaad no se enteraban de cuál sería su asignación misional sino hasta el día de la graduación, pero en los últimos años lo han llegado a saber a mediados del curso, que dura cinco meses. Eso no presentó ningún problema para Dominic y Tjitske Busciglio. Cuando ellos recibieron la invitación para asistir a la Escuela de Galaad, no tenían la menor idea de que serían asignados al país africano de Senegal. “Recordábamos a Abrahán y a su esposa Sara, quienes también recibieron una asignación de Jehová y no sabían adónde irían a parar —dijo Tjitske, cuando se refirió al día en que les llegó la invitación—. Mi esposo y yo meditábamos en Hebreos 11:8, donde dice: ‘Por fe Abrahán, cuando fue llamado, obedeció saliendo a un lugar [...] aunque no sabía adónde iba.’”
Las metas son otra razón por la que una graduación de Galaad es diferente. Para explicar esto, remontémonos en la historia a la primera ceremonia de graduación de la Escuela de Galaad. Note lo que Nathan H. Knorr, primer presidente de la Escuela, dijo a los presentes:
“Los hombres de este antiguo mundo, y sus mujeres y niños, atesoran riquezas en la tierra, para asegurarse un lugar de seguridad. Pero ¿realmente prosperan? Nunca pueden estar seguros contra la destrucción inevitable que vendrá sobre el mundo entero. Sin embargo, los que han entrado en pacto con Dios atesoran riquezas en el cielo, que no pueden enmohecerse ni destruirse. Son de valor para con Jehová Dios, que está en el cielo.
”De modo que el trabajo que hacen ustedes, los graduados [de la escuela bíblica], al ir [...] proclamando el mensaje del Reino [...] donde el mensaje nunca se ha dado [...] es trabajo vital y preliminario al establecimiento del [Nuevo Orden] de justicia”.
La meta de los graduados de Galaad no es conseguir riquezas materiales o prestigio por medio de un empleo. En vez de eso, ellos esperan con ansias la graduación como medio de satisfacer su deseo ardiente de predicar las “buenas nuevas” del Reino de Dios y ‘hacer discípulos de gente de todas las naciones’. Y su asignación misional puede extenderse hasta el nuevo sistema de cosas, donde habrán de poder enseñar a los resucitados las “buenas nuevas”. (Marcos 13:10; Mateo 28:19; Juan 5:28, 29.)
Los estudiantes de la Escuela de Galaad no llegan a ser ministros ordenados por primera vez al graduarse. Eran ministros ordenados mucho antes de asistir a la Escuela de Galaad. Lo que N. H. Knorr dijo a la primera clase, en el mismísimo primer día de clases, aún es cierto hoy. Dijo:
“NO es el propósito de [esta escuela] equiparlos para ser ministros ordenados. Ya son ustedes ministros y han estado activos en el ministerio por varios años. Este es un requisito para ingresar [...] El curso de estudios en [la escuela] tiene por único propósito el de prepararlos para ser ministros más capaces en los territorios adonde van”.
Los graduados de la clase número 76 han estado sirviendo individualmente como ministros ordenados por más de 12 años, como promedio, y 8 de esos años los han pasado en el servicio de tiempo completo. Es interesante el hecho de que 1 de cada 3 de los graduados, un total de 14 estudiantes, había servido como ministro de tiempo completo en los hogares Betel de Gran Bretaña, Canadá o los Estados Unidos.
Sam Gjesdal, asignado a Brasil, señaló a un rasgo de la Escuela de Galaad que contribuyó a que la graduación fuera especialmente significativa. “Las universidades mundanas dan información y el estudiante capta lo que puede —dijo él—, pero aquí [los instructores] se interesan realmente en uno y quieren ver que a uno le vaya lo mejor posible. Ellos se toman interés genuino en uno.”
Hasta la ceremonia de graduación fue diferente. No hubo ninguna fanfarria ruidosa para inaugurar el programa. No hubo ninguna procesión pomposa encabezada por directores de facultades universitarias, cuyos rostros mostraran gran seriedad. No hubo nadie que desfilara por los pasillos del Salón de Asambleas al son de música estruendosa. No hubo nadie ataviado con largas togas negras ni birretes cuadrados, adornados con borlas. No, no hubo nada que diera muestra de que se estaba glorificando a criaturas humanas o a sus logros. En lugar de eso, la gloria y el agradecimiento se concentraron en Aquel que lo hizo todo posible, Jehová Dios. Las graduaciones de Galaad son verdaderamente diferentes.
[Fotografía en la página 26]
Escuela Bíblica de Galaad de la Watchtower Clase núm. 76, marzo de 1984
En la lista de abajo, las filas están numeradas desde el frente hacia atrás; y los nombres, alistados de izquierda a derecha para cada fila.
1) Berglund, G.; Cortez, G.; Bartlett, B.; Wilson, M.; Vittum, Z.; Thompson, K.; Thompson, R. 2) Miranda, M.; McNeill, K.; Turincio, A.; Turincio, C.; Busciglio, T.; Donald, S.; Zubeck, M.; Meyer, D. 3) George, D.; Busciglio, D.; Steinlein, A.; Thrasher, D.; Barreira, J.; George, C.; Etheridge, K.; Hackney, R. 4) Bartlett, K.; McKeel, S.; Cortez, E.; Donald, D.; Fleet, R.; Berglund, C.; Williams, C.; Gjesdal, S. 5) Meyer, R.; Chappell, B.; Nobiss, J.; Vittum, P.; Wilson, R.; Crawley, W.; Thrasher, R.; Zubeck, J.
[Recuadro en la página 27]
Descripción de la clase
● Cantidad total de estudiantes ․․․ 40
● Número de países representados ․․ 6
● Número de países adonde fueron
asignados los estudiantes ․․․․․․ 16
● Cantidad de hermanos solteros ․․․ 12
● Cantidad de hermanas solteras ․․․ 2
● Cantidad de parejas casadas ․․․․․ 13
● Edad promedio ․․․․․․․․․․․․․․․․․․․ 30,6
● Promedio de años que llevan
de haberse bautizado ․․․․․․․․․․․ 12,5
● Promedio de años en el servicio
de tiempo completo ․․․․․․․․․․․․․ 8,3