-
La oración... ¿rito vacío o comunicación significativa?¡Despertad! 1981 | 22 de febrero
-
-
La oración... ¿rito vacío o comunicación significativa?
DESDE el 1 hasta el 3 de enero se celebra la fiesta más importante del Japón. Durante los días de esta fiesta, toda persona procura comenzar bien el nuevo año. En los primeros tres días del año 1979 mucho más de la mitad de la población del Japón visitó algún santuario o templo para orar por éxito y buena suerte durante el año que entraba.
Si usted hubiera acompañado a estas personas, ¿qué habría visto?
Considere a una persona que está efectuando el rito de lavarse la boca y las manos en una fuente que se halla cerca del portón de entrada de un santuario de la religión sintoísta. Ahora se acerca al santuario y coloca algo dentro de una gran caja de colectas. Luego levanta el brazo y agarra un grueso cordón multicolor. Cuando lo sacude, un bloque de madera choca contra una campana y produce un disonante “¡Clang! ¡Clang!” La persona suelta la cuerda y bate las palmas de las manos varias veces, y luego las mantiene unidas mientras se inclina en señal de reverencia. Ahora da la vuelta y se va. Así queda dicha una oración.
Pero, ¿quién la oyó? ¿Fue aquello meramente un rito vacío? El adorador sinceramente cree que su oración ha sido oída.
Antes de dejar la zona del santuario, esta persona se abre camino a codazos entre la multitud para llegar a un puesto donde compra un talismán o amuleto, que tal vez sea un simple pedazo de papel en el cual estén escritas letras chinas, o quizás compre una flecha de la cual cuelguen dijes para la buena suerte.
¿Qué ha pedido en su oración esta persona? Muy probablemente pidió paz, seguridad, felicidad y prosperidad material. Un sacerdote de la religión sintoísta se expresó como sigue: “Ofrecen 100, 1.000 ó 10.000 yenes [50 centavos, $5, $50, E.U.A.] pero en sus oraciones piden cientos de miles, hasta millones, de yenes. Dan poco, pero quieren mucho.”
Aunque muchos japoneses visitan templos solamente al principio del año nuevo, de la misma manera que ciertos cristianos nominales visitan las iglesias solamente durante la época de la Pascua Florida, los japoneses devotos hacen visitas con regularidad. En muchos hogares se encuentra un kamidana, una repisa para las imágenes de la religión sintoísta, y un butsudan, altar familiar de la religión budista, o una de estas dos cosas. Es aquí donde los miembros de la familia ofrecen oraciones por medio de encender una vela, la cual utilizan para encender incienso. Arrodilladas ante este tipo de altar, estas personas primeramente tocan un carillón con un palito de madera y entonces recitan vez tras vez una oración escrita o algunas palabras que hayan aprendido de memoria, como: “Namu-Amida-Butsu” (Gloria a Amida Buda). Quizás repitan este rezo en tono monótono por 20 minutos, y hasta por horas.
¿Qué hay de los japoneses que profesan ser cristianos? Puede ser que se les vea entrar en una iglesia, donde se arrodillan por unos cuantos minutos y oran en silencio o en tono bajo. Hay quienes leen sus oraciones de un libro. Entre estas personas hay algunas que oran en la iglesia frecuentemente, mientras que otras van solamente cuando están pasando por alguna prueba excepcional. Otras utilizan cuentas ensartadas, las cuales van tocando con los dedos una por una a medida que recitan una expresión aprendida de memoria. A intervalos, durante este rito, puede ser que fijen la vista en un crucifijo o en una imagen de cierto santo en particular.
¡Son muchísimas las maneras en que la gente ora! No cabe duda de que haya personas devotas y sinceras haciendo estas oraciones. Pero con respecto a todas estas oraciones, hacemos bien en preguntar: ¿Está lográndose comunicación significativa... o se trata simplemente de un rito vacío?
-
-
¿Importa por qué ora y cómo lo hace?¡Despertad! 1981 | 22 de febrero
-
-
¿Importa por qué ora y cómo lo hace?
“OH, KAMI-SAMA,a por favor ayúdame a pasar el examen. Puesto que no me he preparado bien para el examen, estoy dependiendo enteramente de ti.” Oraciones escritas como ésta se ofrecen en templos religiosos por todo el Japón cuando se acerca el tiempo para los exámenes de mucha competición. Abuelos que se preocupan por sus nietos hacen ofrendas de 10.000 yenes ($50, E.U.A.) a fin de que se pronuncien oraciones diariamente durante todo un año a favor de los esfuerzos escolares de sus nietos.
Muchos de los alumnos que acuden en tropel a los templos durante esta época del año tienen poca fe en Dios. Dijo uno de ellos: “No; por lo general no creo en Dios. Suelo orar por ayuda divina solamente cuando me veo en dificultades.”
Esta actitud ilustra el dicho japonés: “Apóyese en Dios cuando tenga algún problema.”
Pero, ¿qué sucede cuando ha pasado la crisis? Lo común es que Dios quede olvidado hasta que surja la siguiente crisis.
¿Qué se pide en oración?
Usualmente la gente ora porque desea algo. Un artículo de una revista occidental citó oraciones de algunos niños, la mayoría de las cuales eran peticiones: “Estimado Dios: Necesito que se me aumente el dinero de bolsillo. ¿Podrías hacer que uno de tus ángeles se lo dijera a mi papá? Gracias.” “Por favor, ¿podrías enviar dinero a nuestra familia?” “Te ruego que me ayudes en la escuela.”
En el Japón se acostumbra visitar los templos a principios del año nuevo y ofrecer oraciones a Ebisu, el Dios de la Riqueza. Muchísimos japoneses hicieron eso el año pasado para orar por dinero para los meses venideros; tan solo en las ciudades de Kyoto y Tokio más de tres millones de personas visitaron ciertos templos con ese fin.
Las personas que desean recibir protección contra los accidentes o los desastres visitan templos japoneses dedicados a Kannon, la Diosa de la Misericordia, así como santuarios de la religión sintoísta.
Católicos de las Filipinas tal vez oren al “Santo Niño” para tener buena suerte. Cierto hombre compró para su Santo Niño una corona de oro de 14 quilates llena de rubíes y diamantes legítimos en gratitud por la ayuda financiera que, según él, la imagen le había otorgado.
Algunas oraciones son expresiones de aprecio, pero el grueso de las oraciones son peticiones... por casi cualquier cosa.
¿Será contestada la oración?
Por cada persona a quien le parece que sus oraciones por éxito o dinero han sido contestadas, hay muchas que quedan desilusionadas. En la ciudad de Tokio muchísimos estudiantes oran por ayuda durante los exámenes a fin de entrar en escuelas privadas de segunda enseñanza, pero solo el 22 por ciento de los estudiantes reciben notas suficientemente altas como para que se les admita. La mayoría no entra. ¿Por qué no son oídas las oraciones de estos estudiantes?
Una familia de cinco personas visitó un templo de la religión sintoísta para expulsar los demonios de su automóvil con el fin de protegerlo contra accidentes. Cuando la familia se retiraba del templo en su automóvil, el vehículo se estrelló contra un contrafuerte de un puente y los cinco miembros de la familia murieron. ¿Por qué no los protegió la oración? Considere lo siguiente:
¿A quién está orando usted?
Los estudiantes japoneses frecuentemente dirigen sus oraciones a Michizane Sugawara, a quien se ha venerado por largo tiempo como “Dios de la Erudición.” El Sr. Sugawara fue poeta japonés y erudito durante el siglo noveno. Ha estado muerto por mil años. ¿Es lógico creer que él realmente pueda ayudar a mejorar las notas que alguien reciba en su examen?
En lo que tiene que ver con los exámenes de fuerte competición que se dan en el Japón, la verdad es que no son contestadas las oraciones de la mayoría de los estudiantes que oran al Sr. Sugawara. Eso no debería ser motivo de sorpresa. A este respecto, el sentido común está en armonía con la Biblia. Pues ésta dice acerca de los muertos: “No están conscientes de nada en absoluto . . . no hay trabajo ni formación de proyectos ni conocimiento ni sabiduría en el Seol [la tumba].” (Ecl. 9:5, 10) El Sr. Sugawara, quien actualmente está en el Seol, no puede ayudar a ningún alumno, sea que éste haya estudiado o no haya estudiado cuanto sea necesario para pasar los exámenes.
¿Qué hay de las oraciones que se ofrecen a imágenes, como la imagen budista llamada Kannon, o cualquier otra imagen? Basta con simplemente ser observador para darse cuenta de que el mundo está lleno de personas que oran a tales imágenes para tener éxito y felicidad y sin
-