Anuario de los testigos de Jehová para 1974
Se necesita fe para andar en el nombre de Jehová, y eso es lo que los testigos de Jehová hicieron durante 1973. Mostraron fe plena en la venidera victoria divina, y dieron “¡ . . . gracias a Dios, porque él nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo!” (1 Cor. 15:57) Saben que Cristo Jesús entró en su gobernación legítima en 1914. Cuando el Diablo y sus demonios fueron echados del cielo después de eso debido a la “guerra en el cielo,” esto verdaderamente resultó en una victoria divina, la victoria de Dios. No hay duda acerca de la furia de parte del Diablo y sus demonios en su esfuerzo por arrollar a los que quedan de la descendencia de la mujer de Dios durante el tiempo en que Satanás está limitado a actividad aquí en la Tierra. Pero nada que él o sus demonios puedan hacer en cuanto a causar sufrimiento a la humanidad, y a los propios siervos fieles de Dios, interferirá con la victoria final de Jehová Dios sobre la organización visible e invisible de Satanás.
Fue muy apropiado y animador, pues, para todos los testigos cristianos de Jehová que andaban en el nombre de Jehová, su tema de asamblea de 1973, “victoria divina.” Como culminación del año hubo cuarenta y una prósperas Asambleas Internacionales “Victoria Divina,” con una concurrencia general máxima de 1.402.238 personas. ¡Qué gozo fue, también, ver que se bautizaron 39.313 personas en estas asambleas! Están resueltas a seguir andando en el nombre de Jehová “hasta tiempo indefinido, aun para siempre.”—Miq. 4:5.
Durante todo el año los testigos de Jehová estuvieron proclamando diligentemente el reino de Dios como la única esperanza para la humanidad, e instando a los individuos de corazón honrado a ser discípulos de Jesucristo, poniendo su confianza en Jehová y huyendo de Babilonia la Grande y lo demás de este sistema de cosas. Nunca antes han disfrutado los testigos cristianos de Jehová de una respuesta a su hacer discípulos como la que tuvieron en los doce meses desde septiembre de 1972 hasta agosto de 1973 inclusive. En ese período de tiempo, 193.990 personas de todas las naciones y lenguas se bautizaron después de haber dedicado su vida a hacer la voluntad de Jehová, con la expectativa de compartir su victoria divina.
Todos los del resto ungido, junto con los de la “grande muchedumbre” que están declarándose ahora de parte de Jehová, “por el poder de Dios y mediante la fe sois guardados para una salvación que está pronta a ser revelada en el tiempo postrero.” (1 Ped. 1:5, Versión Latinoamericana) Por supuesto, aquí el apóstol Pedro se dirigía a los cristianos ungidos por espíritu, pero el mismo principio aplica a todos los que han dedicado su vida a Jehová Dios. Tienen que cifrar su fe plena en Jehová y en su victoria divina, que él producirá para su propia vindicación y para la salvación de ellos. El dedicar la vida de uno a Jehová y bautizarse no son ciertamente todo lo que hace al cristiano. El cristiano tiene que probar su lealtad y devoción a Jehová. El andar en integridad les traerá pruebas y dificultades a los que se ponen de parte de Jehová. Los cristianos nunca deben olvidar que la serpiente, el Diablo, ha descarriado a todo el mundo y que, desde que fue echado del cielo, “el diablo ha descendido a vosotros con gran furor, sabiendo que el tiempo que le queda es corto.” (Apo. Rev 12:12, LA) De modo que habrá pruebas, especialmente para los que se han puesto de parte de la soberanía de Jehová y que han declarado que andarán en su integridad delante de Jehová.
Los cristianos que saben que la salvación “está pronta” y será revelada “en el tiempo postrero” aprecian esto que dijo el apóstol Pedro: “En lo cual os regocijáis, aunque ahora por un poco de tiempo hayáis de ser afligidos por diversas pruebas, a fin de que la pureza de vuestra fe, mucho más preciosa que el oro que, aunque perecedero, se prueba por medio del fuego, redunde en alabanza, gloria y honra al revelarse Jesucristo.” (1 Ped. 1:6, 7, LA) Los testigos cristianos de Jehová tienen que pelear una dura pelea por la fe y ser vigorosos en la declaración de las buenas nuevas del reino de Dios, así como lo fue Cristo Jesús. Han estado haciendo esto durante el año de servicio de 1973. Hoy hay más de 1.758.000 ministros de Dios declarando las “buenas nuevas” por todo el mundo, en 208 diferentes países, tierras e islas del mar. Pensamos que les interesarán algunas de sus experiencias, porque muestran que “por diversas pruebas” la fe de ellos está siendo probada. Pedro pasó a decir: “Por tanto, ceñid vuestro entendimiento, sed sobrios.” (1 Ped. 1:13, LA) Eso es exactamente lo que los testigos cristianos de Jehová están tratando de hacer: mantenerse en buena condición para servir a su Dios Jehová fielmente hasta el mismo fin. No se van a preocupar en cuanto a lo difíciles que se pongan las condiciones por todo el mundo. Saben que las condiciones empeorarán.
¿No dijo Habacuc: “Aunque la higuera misma no florezca, y no haya fruto en las vides; la obra del olivo realmente resulte un fracaso, y los terraplenes mismos realmente no produzcan alimento; el rebaño realmente sea cortado del aprisco, y no haya vacada en los cercados; sin embargo, en cuanto a mí, ciertamente me alborozaré en Jehová mismo; ciertamente estaré gozoso en el Dios de mi salvación”?—Hab. 3:17, 18.
Repasemos brevemente algunas de las penalidades y experiencias de los testigos cristianos de Jehová en diferentes partes del mundo. A medida que emprendemos esta gira de país en país, ¿por qué no usar los mapas en las hojas terminales del frente y de la parte posterior de este libro para ubicar los lugares a los cuales viajamos?
ÁFRICA OCCIDENTAL
Senegal, junto con sus países africanos vecinos más abajo del Sáhara, está en las garras de la más seria sequía del siglo. Esta amenaza la vida misma de hombres y bestias. El clero de casi todas las religiones del país ha estado ocupado haciendo arreglos para toda clase de servicios religiosos y días de oración, pero en vano. Como dice la Biblia: “Ay de la tierra y del mar, porque el Diablo ha descendido a ustedes, teniendo gran cólera, sabiendo que tiene un corto período de tiempo.” (Rev. 12:12) La gente del África tiene sed, pero no solo de agua literal; también hay una sequía espiritual, y esto es más serio. Es verdad que los africanos tienen inclinación religiosa, pero no necesariamente hacia las enseñanzas cristianas.
En Senegal un joven fue criado en una familia de adoradores de fetiches. Aunque era católico nominal, diariamente hacía sacrificios a los espíritus. Con el tiempo obtuvo un ejemplar de las Escrituras Griegas Cristianas, y diariamente las leía. Esto lo ayudó a comprender que la Biblia contenía una esperanza maravillosa, y entonces conoció a un testigo de Jehová. Inmediatamente se comenzó un estudio de la Biblia con él, pero, como había sido practicante del fetichismo así como católico, el librarse de sus objetos de adoración le presentó un gran obstáculo. Su padre le había dado el cuerno de una cabra como protección, explicándole que si alguna vez lo tiraba, moriría. Él sabía de personas que se habían ahogado en el río al librarse de sus yuyus. Todas las noches hacía primero una oración a Dios y entonces ofrecía un sacrificio al cuerno de la cabra. Pero cuando estudió en el libro La verdad que lleva a vida eterna el capítulo acerca de los espíritus inicuos, se libró del cuerno. Para esto necesitó fe, y él admite que estaba asustado y se preguntó si llegaría a salvo a una asamblea de los testigos de Jehová. Lo hizo. Su fe se hizo fuerte y reconoció que Jehová es el único Dios verdadero. Poco después de esto se bautizó.
Los que son librados de la religión falsa tienen que asirse firmemente de la verdad para aguantar toda clase de oposición de su familia. Una musulmana aceptó la verdad después de estudiar con una testigo de Jehová. Antes de estudiar la Biblia ella dominaba a su esposo, pero ahora en su nuevo papel como cristiana se hizo sumisa a su esposo. Ahora él empezó a oponérsele, tratando de evitar que asistiera a las reuniones del Salón del Reino. La encerró en la casa para que ella no pudiera salir. Cuando regresó halló que ella le había preparado su pastel favorito. Esto lo avergonzó. No obstante, no hizo que su oposición menguara. Debido a que la señora insistió en apegarse a la verdad, él decidió divorciarse de ella y le dio la acostumbrada notificación con tres meses de anterioridad antes de llevarla al tribunal. El esposo la llevó ante el juez, pero cuando vio que su treta no haría que ella cambiara de opinión y que ella se mantenía firme, le dijo al juez que se olvidara del divorcio y dijo que trataría de arreglar los problemas con su esposa. Invitaba a la familia de su esposa a su casa en los días de las reuniones precisamente una hora antes de la hora en que ella normalmente había de salir. Pensaba que ella no se atrevería a dejarlos a todos, pero ella lo hizo. Debido a la posición firme de ella, se le hizo posible comenzar un estudio con una de sus propias hermanas que se preguntaba por qué estaba dispuesta a padecer toda esta persecución por su nueva religión. Esta hermana también fue afligida por algún tiempo por diversas pruebas, pero ahora es hermana bautizada y ha resultado ser una fuente de gran estímulo a otros en la congregación.
Una señora de Gambia fue visitada por una misionera en Dakar, la capital de Senegal. Mostró interés, tuvo un estudio bíblico y se preparaba bien. Pero tenía muchos problemas. Estaba separada de su esposo debido a la conducta inmoral de éste. Acababa de tener un quinto hijo. Su hija de ocho años se interesó profundamente en la verdad y esto fue un estímulo a su madre. La niñita asistió celosamente a todas las reuniones y adelantó con rapidez. El entusiasmo de la hija afecto a la madre y ella, también, se sintió impulsada a asistir a la celebración del Memorial. Decidió regresar a su propio país, Gambia, para atender a sus otros hijos, a los cuales había dejado en aquel país con su familia. La misionera se dio cuenta de que cuando regresara tendría mucha dificultad de parte de su familia, de modo que la preparó para la oposición. Sucedió como se esperaba. No obstante, la señora recientemente interesada rehusó ceder ante la presión de la familia, y pronto el hijo mayor de ella aceptó la verdad, y ahora está dando un excelente testimonio en Gambia. Esa señora, su hija y su hijo, asistieron a una asamblea en Dakar y todos se bautizaron. Han dedicado tiempo a testificar no solo en esa ciudad, sino también en la región boscosa donde hasta ahora ningún Testigo había visitado a la gente.
En Sierra Leona hay 2.520.000 personas agradables y felices, pero hablan más de veinte idiomas. Por eso, los misioneros y otros se enfrentan a un problema al testificar a todos los habitantes del país. La organización está haciendo excelente trabajo en cuanto a lograr la meta de ayudar a más personas a leer y a escribir. Los registros muestran que en Sierra Leona, un país con población que es casi 90 por ciento analfabeta, el 75 por ciento de todos los testigos de Jehová ahora leen y escriben. ¡Qué gozo es para estos hermanos y hermanas africanos leer la Biblia ellos mismos y participar en el ministerio!
En la República de Guinea dos nuevos precursores especiales fueron asignados a Conakry durante el año pasado y ellos, junto con diez hermanos locales, están tratando de llegar a la mayor cantidad de personas que sea posible en la capital. Tuvieron una concurrencia de 626 al Memorial, de modo que hay personas que muestran interés. En una asamblea de circuito reciente celebrada en una aldehuela, 225 personas disfrutaron de un excelente programa. Durante el año se bautizaron veintisiete personas.
En Liberia se está logrando progreso en la construcción de Salones del Reino. En Monrovia, la capital, se terminó uno nuevo recientemente. En Tappita un jefe tribual poseía una excelente porción de terreno cerca de la carretera principal, pero estaba convencido de que en un árbol de aquella propiedad vivía un genio (o espíritu) que acostumbraba viajar por su propiedad a otro árbol. Por años nadie tuvo el valor de usar aquella propiedad. Finalmente vendió el terreno a los testigos de Jehová, y en pocos meses ellos completaron su Salón del Reino sin perturbación de parte del “genio.” El salón está cerca del “árbol,” y esto ha librado a muchos de la superstición. La gente ve que los testigos de Jehová tienen fe en la Biblia.
La congregación de Kakata en Liberia estaba construyendo un nuevo Salón del Reino, pero se les acabaron los fondos antes que todo el trabajo estuviera hecho. Por eso, un grupo de hermanas enérgicas se puso a trabajar e hizo pan casero, recogieron madera e hicieron arreglos para obtener varios otros artículos y pronto, personalmente, estuvieron “vendiendo cosas,” y de esta manera obtuvieron suficientes fondos para contribuirlos para completar el Salón del Reino.
El superintendente de la sucursal informa que los Salones del Reino se llenan bien en Liberia, y en muchas de las reuniones hay una concurrencia que es hasta de dos a tres veces la cantidad de los publicadores.
Uno de los principales problemas de Costa de Marfil envuelve el matrimonio legal En los últimos años el gobierno ha exigido el matrimonio legal. No obstante, la mayoría de los hombres de Costa de Marfil consideran peligroso el casarse legalmente con una muchacha, porque temen que ella use esta posición segura para ser rebelde y dominar a su esposo. También se acostumbra postergar el matrimonio hasta cuando la muchacha tiene por lo menos un hijo, puesto que los hijos son muy importantes en el modo de vivir africano. Este problema tuvo que ser resuelto por un hombre que era católico firme y que vivió por muchos años con una muchacha con la cual no tenía intenciones de casarse. Los testigos de Jehová lo visitaron en su ministerio de casa en casa, y él mostró interés. Aceptó el libro La verdad y se comenzó un estudio bíblico con él. Dejó de asistir a la iglesia y en seis meses hizo que removieran del registro de la iglesia su nombre. Ahora le quedaba un gran obstáculo a este hombre, el de legalizar su matrimonio. La esposa, que no tenía hijos, no era aceptada por la familia del esposo, y él, por ser de una tribu diferente, no era aceptado por los padres de la esposa. Sin embargo, la verdad venció todos estos obstáculos. Por eso, con oposición de ambas familias, sin hijos, bajo la mofa de sus amigos, todavía siguieron adelante y se casaron legalmente. Aquella misma semana empezaron a participar en el servicio del campo, predicando las buenas nuevas del reino de Dios, y en abril se bautizaron en la asamblea de circuito, uniéndose alegremente a la gran muchedumbre de testigos de Jehová. Todo esto exigió fe, pero produjo gran felicidad.
Por varios años en el Alto Volta hubo un solo publicador efectuando la predicación. Ahora se le han unido seis misioneros y varios precursores especiales, y durante el año se formaron dos congregaciones. El último abril setenta y cuatro personas asistieron a su celebración del Memorial, y ahora conducen ochenta estudios bíblicos.
Un precursor especial iba de casa en casa en el ministerio y se encontró con un policía. El agente de la policía le dijo al precursor: “Ustedes los testigos de Jehová no tienen derecho a trabajar de casa en casa.” El policía le dijo al precursor que se metiera en su automóvil y lo llevó a la comisaría de la policía. Cuando entraron en la comisaría, el capitán levantó la vista y exclamó: “J——, ¿cómo está?” refiriéndose al hermano precursor. El capitán continuó: “Deseaba verlo. ¿Cuánto dijo que costaba la suscripción a las revistas La Atalaya y ¡Despertad!?” El precursor le dijo, y el capitán inmediatamente tomó las suscripciones a ambas revistas. Convenció a su secretario de que él también debería tener estas suscripciones, y éste también se suscribió. El hermano pudo dar un excelente testimonio a las otras personas en la oficina, y colocó entre ellas varios libros y muchas revistas. Durante todo este tiempo el policía que lo había arrestado sencillamente se quedó plantado allí, escuchando y viendo cuanto pasaba. Entonces el capitán le dijo al policía que había llevado allí al hermano: “Tome su auto y lleve a J—— a su casa. Hace demasiado calor para que él esté caminando al sol.” De camino a casa el hermano precursor le dio al policía una revista y lo estimuló a leerla. Nunca se sabe en qué resultará la oposición.
La nueva imprenta de la Sociedad en Ghana terminó su primer año de operación; se imprimieron más de 240.000 ejemplares de La Atalaya en tres idiomas, twi, eve y ga.
A principios de marzo, catorce jóvenes escolares hijos de testigos de Jehová fueron expulsados de las escuelas en Ghana porque no participaban en ceremonias patrióticas que hubieran violado sus conciencias cristianas entrenadas por la Biblia. La prensa pública hizo un esfuerzo concentrado por desacreditar a los testigos de Jehová delante de las autoridades y el público. No obstante, esta publicidad extraordinaria dio prominencia al nombre de Jehová y ayudó a muchas personas del país a ver la diferencia entre la religión verdadera y la falsa.
En la República de Togo, al comenzar el año había seis de nuestros hermanos en prisión. Ya habían estado en prisión por un año sin que se les celebrara juicio. El aprisionamiento se debió a que rehusaron comprar tarjetas o cédulas de afiliación al único partido político del país. Se les acusó de no tenerle respeto al gobierno. Se incluyeron en su caso también las cuestiones del saludo a la bandera, el himno nacional y las transfusiones de sangre. La situación se les hizo muy difícil a los testigos de Jehová por todo el país debido a que el gobierno hizo grandes esfuerzos por obligar a toda persona a comprar una cédula partidista. Cerraban las carreteras e investigaban todos los automóviles de los nativos para ver si los individuos tenían las cédulas partidistas. Si no tenían cédulas los llevaban a la fuerza a la oficina del partido político para obligarlos a comprar las cédulas. Esto hizo muy difícil el viaje y las visitas de nuestros superintendentes de circuito a las congregaciones. Aun así, se las arreglaron para cumplir con sus horarios. Oficiales del partido hasta iban de casa en casa para investigar a la gente en sus hogares.
Con el tiempo se esparció una ola de violencia por todo el país. Algunos precursores especiales fueron expulsados de algunos pueblos, a otros no se les admitió en los hospitales. No podían comprar ni vender su alimento en los mercados. Los precursores especiales no podían cambiar los cheques de sus mesadas en las oficinas del correo. A los individuos a quienes se empleaba les preguntaban si eran testigos de Jehová. Parecía que se proscribiría la obra de los testigos de Jehová.
A pesar de toda esta dificultad, los hermanos se mantuvieron en calma. Se reunieron con regularidad en sus Salones del Reino, salieron al servicio ministerial en el campo y continuaron predicando las buenas nuevas del Reino.
El gobierno y los oficiales del partido no fueron severos solo con los testigos de Jehová, sino también con las personas que no eran Testigos y que no compraban cédulas partidistas. En un pueblo de 15.000 personas el gobierno hasta llegó al extremo de pedirle a la gente un pago retroactivo hasta el mismo tiempo de la fundación del partido. Eso fue demasiado para la gente. Las mujeres del mercado se declararon en huelga por cuatro días. Puesto que la gente no esta acostumbrada a almacenar alimento, sino que compra un surtido fresco en el mercado cada día, toda la gente tuvo que sufrir, incluso los funcionarios del gobierno, los oficiales del partido, la policía y los soldados en el campamento. Esto hizo que la situación necesitara una rápida solución, y poco después la radio y los periódicos anunciaron que a nadie se le debía obligar a comprar una cédula de afiliación partidista. Solo se obtendría la afiliación por solicitud escrita y con aprobación del comité del partido. Desde aquel tiempo no ha habido investigación en las carreteras en busca de personas que no lleven cédulas, no ha habido investigación en los hospitales, mercados ni lugares de empleo. De hecho, desde febrero de 1973 ha habido solo un caso en que las autoridades han hostigado a los hermanos. La obra del Reino se efectúa ahora en paz.
Jehová ha continuado bendiciendo la obra de los testigos de Jehová en Nigeria. El trabajo de construir una nueva fábrica y una extensión de Betel continuó durante la mayor parte del año. Cincuenta y dos trabajadores del campo de los precursores fueron llamados a este trabajo, y miembros misioneros de la familia de Betel que tenían experiencia también fueron utilizados en la obra de construir. Además, hermanos y hermanas anuentes, muchos de Lagos, se ofrecieron voluntariamente para trabajar en los fines de semana. Ahora hay miembros de la familia de Betel viviendo en el nuevo edificio. Dos nuevas prensas de letras de Heidelberg que se pidieron de Alemania, junto con otro equipo enviado desde Brooklyn, ahora han sido instaladas en la nueva fábrica de 929 metros cuadrados. La impresión misma empezó el 17 de mayo de 1973, con el Ministerio del Reino en el idioma yoruba. Ahora la nueva imprenta ha comenzado a imprimir La Atalaya en lenguajes vernáculos.
Durante el año unos opositores del reino de Dios se esforzaron por agitar dificultad por la cuestión de cantar el himno nacional en las escuelas en los estados del centro de Nigeria, y más tarde en los estados del sudeste. Varios jóvenes testigos de Jehová fueron expulsados de las escuelas en estas zonas.
Camerún todavía tiene proscrita nuestra obra, pero desde mayo de 1970 ha habido una constante edificación y consolidación de la organización clandestina, y los testigos de Jehová siguen predicando. Aunque las autoridades continúan aplicando mucha presión a los hermanos, es manifiesto que los hermanos han sido probados en cuanto a su amor a Jehová y su lealtad a Su organización. Las congregaciones están organizadas y reciben el alimento espiritual.
ÁFRICA ORIENTAL
En Kenia el año de servicio comenzó con la más excelente asamblea que se había celebrado fuera de Nairobi, con un auditorio de 2.161 concurrentes al discurso público. Mes tras mes la obra progresó. Se hicieron planes para celebrar la Asamblea Internacional “Victoria Divina” en Nairobi, del 26 al 30 de diciembre de 1973. Centenares de testigos de Jehová de Europa, los Estados Unidos y África hicieron planes para asistir. Se dedicó el primer Salón del Reino de Nairobi, y 605 personas asistieron a la actividad especial del fin de semana. Todo parecía muy favorable para mucha más actividad sin estorbo.
¡Entonces vino un anuncio sacudidor! En los periódicos del 16 de abril de 1973 se dijo que el gobierno se proponía tomar medidas contra los testigos de Jehová. Dos días después el periódico oficial del gobierno publicó un aviso proscribiendo a los testigos de Jehová. No se dio razón para aquel acto. Por eso, representantes de la oficina sucursal y de las congregaciones de toda Kenia se comunicaron con funcionarios del gobierno y miembros del parlamento, tratando de averiguar por qué se tomaba aquella acción tan drástica. Nadie parecía saber. Se hizo todo esfuerzo por lograr que se removiera la proscripción. Entonces vino otra decisión, el 5 de julio... expulsar del país a treinta y seis misioneros. En la medianoche del 11 de julio salieron los últimos misioneros. Pero ¡qué maravillosa despedida recibieron! Centenares de sus hermanos se reunieron en el aeropuerto en un despliegue afectuoso de amor fraternal.
Súbitamente, el 20 de agosto de 1973, el periódico del gobierno anunció que la proscripción había sido revocada. Todavía no se sabe por qué se hizo esto, pero estamos seguros de una cosa, a saber, de que Jehová dio la victoria. Una vez más los hermanos tenían libertad para reunirse en sus Salones del Reino y la obra de predicar siguió adelante sin restricciones. Se estaban haciendo arreglos para celebrar la Asamblea Internacional “Victoria Divina” según el arreglo original, usando el Estadio Municipal de Nairobi.
Se espera que muchos de nuestros hermanos de Etiopía puedan asistir a la asamblea de Nairobi, pero no estamos seguros de lo que sucederá. En los últimos tres años la Iglesia Ortodoxa Etíope ha intensificado sus esfuerzos por evitar toda actividad cristiana por los testigos de Jehová.
Poco antes del comienzo del año de servicio en Etiopía varios hermanos fueron llamados por la policía para ser sometidos a interrogatorio. Se les advirtió que se sabía de su actividad y que pronto se darían pasos contra ellos. Súbitamente, el 27 de agosto de 1972, mientras se celebraban las reuniones regulares del domingo, dos reuniones de los testigos de Jehová fueron interrumpidas por la llegada de grandes camiones, y 207 personas fueron arrestadas. En ese grupo había tanto hermanos como personas que habían mostrado interés. Aunque la ley no permite que un esposo y una esposa sean arrestados a la misma vez, por consideración a los niños, aquel día se les arrestó juntos. Noventa y seis de los prisioneros fueron llevados al tribunal de distrito y, sin que se les permitiera defenderse, fueron sentenciados a seis meses de prisión. Las otras personas padecieron mucha más penalidad. Se les acusó de establecer una asociación religiosa ilegal. Hermanos y hermanas tuvieron que sufrir la humillación de que les afeitaran todo el cabello.
Los hermanos predicaron la verdad denodadamente a otros prisioneros, edificando interés en algunos. La primera noche en prisión fue pacífica. Hubo consideración de muchos temas. Estos hermanos solo sirvieron un mes de su sentencia, porque se hicieron arreglos para pagar fianza.
Poco después de haber sido puestos bajo fianza, los hermanos fueron llamados de nuevo al tribunal de distrito, que rehusó escuchar toda evidencia, declarando que el juicio no se celebraba por asuntos religiosos. Después de muchas suspensiones de sesiones el tribunal sostuvo las sentencias de seis meses. Todo el procedimiento había sido tan antagónico que los hermanos estaban seguros de que tendrían que completar sus sentencias en la cárcel. Por eso, hicieron arreglos para guardar sus muebles en los hogares de hermanos para no pagar una acumulación de alquileres. Se hicieron arreglos para atender a muchos niños, y algunos hermanos les preguntaron a las empresas en las que ellos trabajaban si otros Testigos podían trabajar en lugar de ellos durante sus términos en la cárcel. De nuevo hubo muchas oportunidades de predicar en la prisión antes que al fin se les pusiera en libertad bajo fianza después de doce días. La decisión final fue suspender la sentencia de aproximadamente la mitad de los hermanos. No obstante, se dio la advertencia de que si estos hermanos se reunían se les obligaría a cumplir con sus sentencias.
A pesar de todas estas dificultades, el celo de los hermanos no se apaga. Continuarán tratando de lograr que la obra sea reconocida oficialmente. En la capital, Addis-Abeba, ha habido un aumento en el número de publicadores de 475 a 577 durante el año. Según dijo un hermano, “se nos ha perseguido, pero no se nos ha dejado sin ayuda.”
En Uganda el año comenzó de manera muy prometedora para el pueblo de Jehová. Cinco nuevos misioneros acababan de ser admitidos al país. Entonces, el 8 de junio de 1973, sin advertencia previa, doce sectas religiosas fueron colocadas bajo proscripción, entre ellas los testigos de Jehová. Para el 17 de julio los doce misioneros que quedaban en el país tuvieron que partir de allí. A los hermanos no se les permite predicar y reunirse públicamente, pero los testigos de Jehová en Uganda continuarán apegándose firmemente a su integridad y efectuarán sus estudios bíblicos con las personas que muestran interés.
La actitud de las autoridades para con la obra cristiana de los testigos de Jehová en Tanzania permanece igual. Se hicieron muy buenos esfuerzos durante el año por hablar a funcionarios gubernamentales y solicitar que la proscripción de siete años fuera removida. Al fin de mayo los hermanos que estaban haciendo otro esfuerzo recibieron aviso de que el gobierno no consideraría el registro de la obra de la Sociedad y que toda actividad de parte de los testigos de Jehová tenía que cesar. Durante el año cinco hermanos fueron sentenciados a un año de prisión, y en la actualidad hay otros diez esperando un fallo.
La mayor dificultad a que se enfrentan los testigos de Jehová en Tanzania ha sido el desempleo. Muchos han comenzado sus propios negocitos para ganarse el sustento. Ahora el gobierno está rehusando expedirles licencias a menos que consigan una cédula política. El Estado viene antes que la adoración de uno a Dios, dicen.
ÁFRICA CENTRAL
En muchas parte de Zaïre nuestros hermanos disfrutan de libertad relativa. Pueden reunirse y pueden predicar las buenas nuevas. Por otra parte, hay muchas zonas donde hay mucha oposición. Esta oposición se debe a funcionarios locales y a su aplicación de leyes locales que prohíben el funcionamiento de toda religión excepto las que tienen reconocimiento legal. Pero en la mayoría de los casos la persecución viene debido a que los hermanos adoptan una posición neutral en cuanto a los asuntos políticos. Hay unos 240 hermanos en prisión en Zaïre, la mayoría de ellos sin juicio o fallo. Algunos han recibido sentencias de dos o tres años y se les han impuesto multas de hasta 600 dólares. Misioneros que han estado trabajando por el territorio también se han enfrentado a muchas dificultades con los funcionarios locales, y algunos han sido arrestados. A pesar de las dificultades que aumentan por todo el país, la oficina sucursal ha continuado funcionando, y se han atendido las necesidades de los hermanos por todo el país.
Puesto que la obra de testificar está proscrita, en Zambia los hermanos no pueden tocar en tantas puertas como solían hacerlo. Por eso ahora descubren que hay más personas buscándolos. Personas de algunos vecindarios que anteriormente estaban acostumbradas a las visitas de los testigos de Jehová en sus hogares salen y le preguntan al hermano que está haciendo una visita particular informal cerca de ellos cuándo las va a visitar. Hay personas que han telefoneado a la oficina sucursal pidiendo que alguien las visite y conduzca un estudio bíblico con ellas, porque sus parientes tienen un estudio bíblico en algún otro lugar del país. Así que, aunque el gobierno impuso una proscripción a los testigos de Jehová y su actividad de casa en casa, la gente del país sabe que los testigos de Jehová están disponibles y que están efectuando estudios bíblicos particulares con los que muestran interés. Muchas personas de Zambia piensan que los testigos de Jehová no los visitan con suficiente frecuencia.
De manera que nuestros hermanos se están comunicando con la gente por todo el país de un modo u otro, porque en el Memorial de 1973 hubo una concurrencia de 194.133 personas. Esto quiso decir que en el Memorial había una persona por cada veintitrés personas del país. ¿Cómo les va a ustedes en su territorio?
Rodesia, al sur, informa que están construyendo su propia oficina sucursal. La Sociedad tenía un hogar sucursal allí, pero era demasiado pequeño. Por eso, el edificio de la sucursal fue derribado y ahora se ha construido un edificio de tres pisos con diez dormitorios, un excelente salón de descanso y comedor y una espaciosa oficina y departamento de envíos. En los fines de semana hubo hasta setenta y cinco obreros, hombres y mujeres, todos voluntarios, ayudando en la construcción. La Sociedad ciertamente aprecia la maravillosa cooperación y anuencia de parte de todos los hermanos que ayudaron a construir este nuevo hogar Betel en Rodesia. Por medio de esta oficina se rendirá mejor servicio a los intereses del Reino en Rodesia.
Durante el año pasado ha habido un aumento notable en la actividad terrorista en la frontera septentrional de Rodesia. El superintendente de distrito informa que los publicadores siempre llevan consigo las publicaciones de la Sociedad, hasta cuando trabajan en las haciendas. Muchas veces se les ha detenido y se les ha pedido que se identifiquen, y cuando los hermanos presentan la literatura de la Sociedad los dejan en paz.
Malawi todavía hiede por haber perseguido cruelmente a los testigos de Jehová. El pueblo de Jehová escapó de sus perseguidores huyendo a través de la frontera a Zambia y Mozambique. Ustedes han leído en las publicaciones de la Sociedad que los que huyeron a Zambia fueron víctimas de un engaño y repatriados a Malawi. Cuando se encontraron de vuelta en su país natal, varios de los representantes prominentes de los testigos de Jehová fueron enviados a prisión. Puesto que los testigos de Jehová fueron hostigados de nuevo después de haber sido repatriados de Zambia, una vez más tuvieron que huir del país. Esta vez la mayoría huyó a Mozambique. Las autoridades de ese país los han recibido muy favorablemente. En la actualidad hay más de 36.000 de nuestros hermanos y sus hijos, junto con personas que han mostrado interés, ubicados en más de diez diferentes campamentos de refugiados.
Las autoridades de Mozambique han suministrado a nuestros hermanos terreno que ellos pueden cultivar, así como alimento y medicinas. El gobierno también ha suministrado soldados para proteger los campamentos de terroristas y jóvenes criminales de la juventud del Partido Congreso de Malawi, de los cuales se ha sabido que han cruzado la frontera en un esfuerzo por introducirse en los campamentos y causar molestia a nuestros hermanos.
En el campamento Mlangeni, en Mozambique, hay varios departamentos similares a los departamentos de nuestras asambleas para encargarse de los asuntos del campamento. El departamento de cuentas atiende la distribución del dinero de socorro y el pago de cuentas. Hay un departamento de transportación, que tiene varios camiones, automóviles y motocicletas que los hermanos lograron traer consigo al huir de Malawi a Mozambique. Estos vehículos se utilizan para transportar árboles y hierba para construir casas y para transportar la harina de maíz que sirve de alimento, y así por el estilo. El almacén de comestibles atiende la distribución de alimento según se recibe de las autoridades portuguesas.
Las autoridades les han permitido a los hermanos continuar teniendo reuniones semanales y asambleas regulares dentro del campamento de refugiados, y en Mlangeni hay un departamento que planea los programas para estas reuniones. Se ha apartado una gran zona de asamblea con este fin, y los hermanos se reúnen allí para considerar el texto del día. Hacen esto a las cuatro de la tarde cada día. Antes de la consideración, se conduce una sesión de canto por una hora, y los hermanos y hermanas entonan cánticos del Reino. Han olvidado algunos de ellos debido a que no han podido cantar públicamente en Malawi desde que la obra fue proscrita en 1967, pero a nuestros hermanos de Malawi ciertamente les gusta cantar los cánticos del Reino. Antes de la proscripción en Malawi, al tiempo de las asambleas todos los que asistían iban como muchedumbre al lugar del bautismo entonando los cánticos, y lo mismo hacían al ir al servicio ministerial en el campo y volver. De modo que uno puede imaginarse lo desilusionados que quedaron al no poder cantar los cánticos después de 1967. Ahora de nuevo están realmente disfrutando de lo que les gusta.
Además de la gran plataforma principal, que nuestros hermanos han edificado en el campamento de refugiados, el gobierno de Mozambique les ha permitido a los hermanos construir muchos Salones del Reino. Ahora tienen más de treinta lugares de reunión para las congregaciones, y con el tiempo tendrán más de cien.
Nuestros hermanos y hermanas también han aprovechado el tiempo que tienen juntos para concentrarse en mejorar su aptitud en lectura y escritura. En todos los Salones del Reino se celebran clases de lectura y escritura tanto para niños como para adultos. En Mlangeni hay 110 de esas clases ahora. Hay maestros de escuela capacitados entre los refugiados.
El campamento de Mlangeni tiene también un departamento médico a cargo de hermanos que son auxiliares capacitados en asuntos de la salud. Los hermanos han construido una muy excelente clínica de piedra y concreto. La mayoría de los refugiados de los primeros días del campamento llegaban con heridas, cortes y magulladuras debidos al cruel trato que habían recibido en Malawi. Hasta en la actualidad son miles los casos que se tratan cada mes. También hay que considerar los cuarenta y seis infantes que, como promedio, nacen cada mes.
La vida en los campamentos es semejante a la vida en las aldeas de Malawi. Nuestros hermanos se levantan temprano y van a su trabajo en los diferentes departamentos del campamento, mientras que las hermanas se encargan de preparar las comidas y atender las necesidades de sus familias. Al fin del día regresan al campamento para practicar los cánticos y para la consideración del texto del día.
Los hermanos de Malawi continúan manteniendo su integridad y, como los cristianos primitivos, se regocijan porque se les ha considerado dignos de ser deshonrados a favor del nombre de Jesús.—Hech. 5:41.
En el sur del país de Mozambique, cerca de la capital de Lourenço Marques, la obra del Reino también adelanta rápidamente. Hay aproximadamente 1.200 publicadores en aquella zona. Aunque la obra de los testigos de Jehová no está reconocida en Mozambique, continúa creciendo. Las autoridades conocen bien la posición neutral del pueblo de Jehová y comprenden que pueden ser buena influencia para la gente en las zonas donde viven. No hay duda de que las autoridades de Mozambique han tomado un punto de vista humanitario al tratar con los miles de nuestros hermanos que han bajado al país como refugiados, por interés en su seguridad.
REPÚBLICA SUDAFRICANA
En noviembre de 1972 la oficina sucursal sudafricana comenzó a imprimir La Atalaya y ¡Despertad! en inglés. Este fue un excelente paso por la Sociedad. No solo recibieron los publicadores de la República Sudafricana las revistas por lo menos dos semanas más temprano que antes, sino que el promedio de distribución de las revistas aumentó por 30.000 al mes.
Bajo la oficina sucursal sudafricana está el país de Botswana. Hace más de un año se exigió que todas las organizaciones, incluso los cuerpos religiosos, solicitaran registro bajo una nueva ley llamada el Acta de la Sociedad. Los testigos de Jehová solicitaron, y parecía que se otorgaría el registro. Pero súbitamente, a principios de julio de 1973, el registrador del país les informó a los hermanos de la localidad que el gobierno no registraría a los testigos de Jehová, y se le dio a la organización hasta el 20 de julio para terminar sus actividades. Después de esa fecha se consideraría ilegales a los testigos de Jehová. Por la bondad inmerecida de Jehová se habían fijado dos asambleas de circuito para antes de esa fecha y por eso hubo buena oportunidad para hablar a los hermanos y prepararlos para las pruebas que vendrían. Al mismo tiempo se buscó ayuda legal para tratar de evitar la proscripción, pero la proscripción vino de todos modos. En la actualidad los hermanos están negociando con los funcionarios gubernamentales en un esfuerzo por lograr que la proscripción sea removida de modo que se puedan predicar las buenas nuevas sin más estorbo.
Todavía se predican las buenas nuevas en la isla de Santa Elena. Hay un publicador por cada sesenta y seis personas en la isla. De manera que todo el mundo ha tenido oportunidad de oír la verdad, y durante el año se bautizaron nueve discípulos nuevos. Por primera vez hubo niños de escuela entre los que se iban a bautizar.
En Suazilandia el superintendente de circuito no tenía dónde exhibir sus diapositivas. A última hora se obtuvo un auditorio. La cuestión era cómo informar a la gente de la comunidad acerca de la reunión. El superintendente de circuito fue a ver al maestro de la escuela local y le pidió que les pidiera a los niños que invitaran a todos los padres a la reunión aquella noche del viernes. El maestro de la escuela concordó, y en pocas horas todo el mundo sabía acerca de la reunión, y 120 personas se presentaron para ver la exhibición de las diapositivas.
ASIA
Cristo Jesús nació en Asia, pero en este gran continente hay menos personas que crean en sus enseñanzas que en cualquier otro continente del mundo. No obstante, los testigos de Jehová se han esforzado solícitamente por predicar las buenas nuevas en este vasto continente. Comenzando al extremo opuesto de donde Jesús comenzó a predicar, dirigimos la atención a las islas del Japón.
En los últimos años el pueblo japonés ha tenido un oído para la verdad. Para satisfacer la necesidad existente, se abrió una nueva imprenta en Numazu, que se encargará de la impresión de las revistas La Atalaya y ¡Despertad!
La Asamblea Internacional “Victoria Divina” celebrada en Osaka fue el acontecimiento sobresaliente del año pasado. Hubo una concurrencia de 31.263 personas, lo cual muestra el gran interés que tienen en la verdad los japoneses.
Los testigos de Jehová en Corea han tenido una excelente oportunidad de participar en un intercambio de estímulo durante el año pasado. Como en el Japón, también tuvieron una Asamblea Internacional “Victoria Divina.” Muchos visitantes de otros países vinieron a Corea y disfrutaron de la hospitalidad de los hermanos de Corea.
Otras personas, también, están disfrutando de la hospitalidad de los testigos de Jehová. Por ejemplo, un hombre de una familia católica devota obtuvo por casualidad el libro La verdad que su madre había adquirido. Nadie en la casa se había molestado en mirarlo. Él leyó la porción que explica el alma. Esto lo sacudió y le interesó. Por un mes no fue a la iglesia católica, sino que meditó en lo que había leído. Entonces buscó el Salón del Reino y pidió más información. Quedó impresionado, pero pensó que debería escuchar el otro lado de la cuestión de nuevo. Fue a su sacerdote católico y le hizo una pregunta directa, a saber: ¿Va el alma humana al cielo o al infierno después de la muerte? Para sorpresa de él, la respuesta que obtuvo fue: “Cuando uno muere uno encomienda su alma a Dios. Eso es todo. No se preocupe demasiado en cuanto al cielo o el infierno.” El sacerdote no trató de defender la posición católica. El interesado hizo otra pregunta directa: ¿Fue creado el hombre, o evolucionó? El sacerdote le dijo que era un hecho establecido científicamente que el hombre había evolucionado y que el relato de Génesis acerca de la creación era solo un mito. Entonces el sacerdote le preguntó si había estado en comunicación con los testigos de Jehová y le advirtió que no dejara que lo adoctrinaran. Eso fue suficiente para este católico sincero. Fue al Salón del Reino de nuevo, esta vez para pedir un estudio bíblico de casa. Desde entonces, él, su esposa, su madre y once de su familia han llegado a ser testigos de Jehová, y ahora la familia de su hermano también está estudiando.
Una de las hermanas que se bautizó en la asamblea de Corea dijo: “Yo pensaba que podía limpiar seis días de hacer mal por medio de asistir a la iglesia un día. Me conocían por mi mal genio y por pelear con mis vecinos y mi esposo. Cuando empecé a estudiar el libro La verdad no tardé mucho tiempo en darme cuenta de que era necesario que hiciera algunos cambios en mi personalidad. Dejé de ir a la iglesia y empecé a asistir a las reuniones del Salón del Reino. Realmente podía ver el contraste entre los cristianos verdaderos y los falsos, y quise ser como los hermanos y hermanas del Salón del Reino. Nunca me perdí una reunión desde que empecé a asistir, y comencé a tratar de copiar las personalidades apacibles de los hermanos. Mis vecinos y mi esposo notaron inmediatamente el cambio que hubo en mí. Mi esposo ahora cooperó llegando a casa temprano en las noches de las reuniones para atender la casa de modo que mis hijos y yo pudiéramos atender a las reuniones. Ahora, después de haberme bautizado en la Asamblea ‘Victoria Divina’ siento que soy cristiana siete días de la semana, no solo el domingo. Mi deseo es entrenar a mis dos hijos en el camino de Jehová, y estoy segura de que mi esposo también verá la verdad con el tiempo.”
Tailandia es un país donde el cristiano tiene que ser especialmente paciente y perseverante. Después de muchos años de duro trabajo el año de servicio comenzó con 436 publicadores y terminó con un máximo de 468. Cuarenta y cinco personas se bautizaron durante el año. De modo que se puede ver que unas cuantas aceptaron las enseñanzas de Cristo Jesús.
En Vietnam, cuando se mira atrás al año 1957 cuando había solo cinco Testigos anunciando el reino de Jehová, hay causa para alegrarse por el hecho de que ahora haya noventa Testigos predicando las buenas nuevas del reino de Dios en ese país. El progreso no se ha logrado sin obstáculos, porque este país no ha conocido la paz desde 1939. Muchas personas han nacido y muerto en Vietnam sin conocer un solo día de paz en su corta vida. Varios de nuestros hermanos y hermanas dedicados han sido echados de sus hogares budistas y católicos por sus padres por haber aceptado la verdad bíblica. Otros todavía viven en hogares divididos pero mantienen su integridad a Jehová. Aquí, como en otras partes de Asia, los testigos de Jehová se dan cuenta del hecho de que la obra no está progresando con la misma rapidez que en otras naciones. Pero con los medios que tienen a su disposición hacen todo esfuerzo por magnificar el nombre de Jehová y declarar las buenas nuevas del Reino.
Singapur, aunque tiene a los testigos de Jehová bajo proscripción, continúa oyendo las buenas nuevas del Reino. Los hermanos se sienten libres porque la verdad hace libre a uno. Los siervos de Jehová utilizan prudentemente la literatura para hacer revisitas y conducir estudios bíblicos de casa. Usan solo la Biblia en su ministerio de casa en casa, y comienzan un buen número de estudios bíblicos.
Un publicador informa que después que se impusieron las restricciones en la obra ellos siguieron la dirección de los superintendentes y utilizaron solo la Biblia en la obra de casa en casa. Uno informa lo que hacía después de pronunciar un sermón: “Yo volvía una vez a la semana para dar más ayuda al individuo. De esta manera he comenzado más estudios de los que puedo atender. El mes pasado he tenido el privilegio de conducir unos veinte estudios por semana. Tres de estas personas han dicho que desean hacerse testigos cristianos de Jehová.”
En Malaysia el punto principal del año fue la Asamblea de Distrito “Gobernación Divina.” Hubo una concurrencia de seiscientas personas, entre ellas 150 de Singapur. La asamblea se celebró en medio de condiciones algo difíciles, sin embargo, porque las autoridades les negaron a los hermanos el permiso policíaco requerido solo un día antes del tiempo en que la asamblea había de comenzar. Se bautizaron 31 personas durante esta asamblea de ‘derrotar la persecución.’
Yendo más al oeste llegamos a la India, y aquí los hermanos han dado expansión a la obra llevándola hasta territorios que hasta ahora no habían sido tocados. Ahora se han organizado cuatro congregaciones en las islas Andamán, y sirven precursores en Nepal y Sikkim. Puesto que hay una población de 550 millones de personas por toda la India y solo 4.000 publicadores, pudiera parecer imposible hallar a todas las “ovejas” que todavía están esparcidas en este vasto subcontinente. Pero, como lo expresó el superintendente de sucursal: “Sabemos que los ángeles están supervisando la obra del recogimiento, y ellos saben dónde hallar y recoger a los que son merecedores.” Relata lo siguiente: “Cierto día dos extraños se presentaron en nuestra oficina sucursal y dijeron que querían suscribirse a La Atalaya en hindi. Venían de un pueblo donde no había Testigos, y donde no se había hecho ningún trabajo. Uno de estos hombres había estado en Calcuta para recibir algún entrenamiento especializado y uno de los instructores era testigo de Jehová y les testificaba informalmente a las personas a quienes entrenaba. Este hombre, al regresar a su pueblo, comenzó a hablar a sus compañeros de trabajo acerca de lo que aprendía.” Dijo a los hermanos de la sucursal que ahora hay un grupo de doce que se reúne cada semana para estudiar la Biblia con la ayuda del libro La verdad. La sucursal no sabía nada de esto, pero ahora el superintendente de circuito los visitará con regularidad.
El ahora autónomo Estado de Bangladesh es parte del territorio de la sucursal de la India, y la sucursal está tratando de introducir precursores de habla bengalí en esa parte del mundo. Es necesario vencer algunas dificultades técnicas, pero ahora se han dado pasaportes a dos precursores indios.
En Sri Lanka, la isla al sur de la India, se ha progresado durante el año. Se bautizaron cincuenta y seis personas, y 907 estuvieron presentes en la Cena del Señor en abril. Los mejores resultados en cuanto a ayudar a la gente a obtener un conocimiento de la verdad se han alcanzado en la zona donde la mayoría de las personas son cristianos nominales, especialmente católicos romanos. Muy pocas personas todavía tienen ejemplares de siquiera el “Nuevo Testamento,” pero sí quieren leer. Puesto que los testigos de Jehová los visitan y les ofrecen enseñarles con la Biblia, se han producido unas experiencias muy interesantes. La verdad ha penetrado en la aldea de Bopitiya. Se comenzó un grupo de estudio y no pasó mucho tiempo antes que hubiera treinta personas asistiendo a las reuniones. La asistencia a la reunión en el hogar que se usaba como Salón del Reino en Jaela también ha aumentado a noventa. La bendición de Jehová se manifiesta sobre la obra en esta zona, y nuestros hermanos allí creen que habrá un muy excelente aumento durante el año venidero.
En el país de Paquistán, al noroeste de la India, las buenas nuevas del Reino continúan siendo predicadas, y una hermana precursora especial informa que en la obra de casa en casa se puso en comunicación con una familia católica romana de siete miembros. Ella usó el libro La verdad en inglés para estudiar con la familia junto con los mismos capítulos del libro que estaban impresos en La Atalaya en urdu. Semana por semana consideraron las doctrinas fundamentales, y grande fue el asombro y el aprecio de la familia por lo que estaban aprendiendo. En dos semanas dos de las hijas empezaron a asistir a las reuniones. Poco tiempo después el padre empezó a asistir con la tercera hija, y en solo seis meses estos cuatro miembros de la familia que anteriormente era católica romana estuvieron participando en declarar las buenas nuevas y se matricularon en la Escuela del Ministerio Teocrático.
Siguiendo adelante más al oeste, llegamos a los países de lenguaje árabe, y aquí hallamos grupitos de testigos de Jehová, como 22 personas en Irán, 11 en Irak, 14 en Kuwait, 35 en Jordania. Hay números mayores, como 161 en Siria y 1.483 en el Líbano. Todos estos están predicando las buenas nuevas del Reino, pero bajo muy graves dificultades. El tratar de presentar el mensaje del reino de Dios a los musulmanes es muy difícil. Además, las condiciones siguen siendo muy tensas en el Oriente Medio. Estos países colindantes de Israel han visto que hay considerable lucha de tipo de guerrilla en varias partes del país e incursiones de comandos. No hay duda de que la gente de esos países siente mucho la necesidad de paz y seguridad. Y por eso los testigos de Jehová están ocupados tratando de decirles como pueden tener estas condiciones.
Israel, por supuesto, es el país donde anduvo Jesucristo hace más de mil novecientos años, predicando las buenas nuevas del reino de Dios. En este país hoy hay solo 181 personas que afirman ser testigos de Jehová, y éstas están efectuando el ministerio del reino de Dios de casa en casa. ¡Que extraño al comparar esto con el día del Pentecostés en que 3.000 personas fueron bautizadas en Jerusalén solamente! Pero es muy interesante el hecho de que durante el verano de 1973 la gran cantidad de 3.500 testigos de Jehová aprovecharon unas giras organizadas por la Sociedad Watch Tower y visitaron esa parte del mundo. Los viajeros no solo aprendieron mucho acerca de la historia antigua de la tierra de Israel, sino también algo acerca de la actividad moderna de los siervos de Dios allí, al reunirse con los hermanos israelíes.
EUROPA
El espacio no permite dar todos los detalles de la maravillosa obra que se hace en Europa. Pero solo para mencionar unos cuantos sucesos del año pasado, se le puso un magnífico nuevo anexo a la oficina sucursal de Finlandia. Ha habido sobresalientes aumentos en la cantidad de publicadores del Reino en España, y los hermanos efectúan su comisión de predicar tranquila y pacíficamente allí. Disfrutan de la protección y cooperación de todas las autoridades. Detrás de la Cortina de Hierro se está haciendo mucho trabajo excelente. En los países escandinavos al norte de Europa y en Europa en general se ha logrado buen progreso durante el año. De la zona del Mediterráneo hay que decir que en Grecia, Italia y en Portugal al oeste de España la obra ha prosperado y ha seguido adelante maravillosamente bien.
Las Asambleas Internacionales “Victoria Divina” en Alemania, Francia, Inglaterra, Bélgica, los Países Bajos e Italia fueron bendiciones de Jehová, y la información ha sido escrita en la revista La Atalaya. Todos fueron acontecimientos sobresalientes del verano de 1973, y dieron culminación apropiada a la obra del año.
En cuanto al año pasado se pueden dar las mismas descripciones a la obra en las Américas del Norte y del Sur y las islas del mar. La abundante bendición de Jehová ha estado sobre sus testigos en todos estos lugares, y se ha logrado excelente progreso. Todo lo que uno tiene que hacer para obtener una idea de la obra excelente que se ha hecho es repasar la tabla que comienza en la página 24. Analizando las cifras que allí se presentan para cada país en cuanto al máximo de publicadores y el número de publicadores bautizados, las horas que se pasaron en el ministerio del campo, los estudios bíblicos de casa que se condujeron, uno verá lo que se hizo mundialmente en la predicación de las buenas nuevas del reino de Dios.
En cuanto a las experiencias individuales de muchos de los publicadores en muchos de estos países, algunos han tenido que soportar muchos problemas y dificultades. No obstante, nuestros hermanos de África ciertamente han sufrido hasta el extremo en muchos casos. Surgen problemas constantemente debido al nacionalismo en la mayoría de los países del mundo. Los testigos de Jehová por todas partes adoptan una posición neutral y están a favor del reino de Dios. Predican esto mundialmente y esperan la victoria divina. Ciertamente han disfrutado de un abundante banquete de cosas pingües durante el año pasado en sus Asambleas “Victoria Divina” por toda la Tierra, y esta serie internacional todavía continúa en el hemisferio sur durante la última parte de 1973 y la primera parte de 1974.
Brevemente, pues, veamos el cuadro general de los logros de los testigos de Jehová por todo el mundo.
INFORME MUNDIAL DE 1973
Probablemente se puede resumir de la mejor manera diciendo que alrededor del mundo 193.990 individuos dedicaron su vida a servir a Jehová y se bautizaron. Esto en sí mismo cuenta una historia tremenda. En comparación con el año pasado, cuando se bautizaron 163.123 personas, se ve que la obra siguió adelante a un paso muy acelerado, todo para honra del nombre de Jehová. Para conseguir el cuadro general de lo que los testigos de Jehová hicieron durante el año de servicio de 1973, se sugiere que se examine la tabla que empieza en la página 24. Si se desea, se puede analizar cada país y ver qué aumentos o disminuciones hubo en publicadores durante el año, cuántos fueron bautizados, el tiempo que se dedicó a la predicación, el número de estudios bíblicos que se condujeron, y esto le dará a uno alguna idea de la tremenda cantidad de trabajo que se logró.
Un resumen breve de lo que aconteció mundialmente muestra que se pasaron 300.468.676 horas en la predicación de las buenas nuevas. Los 1.656.673 publicadores que salieron al ministerio del campo cada mes, como promedio, durante el pasado año de servicio condujeron 1.209.544 estudios bíblicos de casa cada semana. Revisitaron para ayudar a muchas otras personas también, puesto que durante el año hicieron 131.657.832 revisitas. Todo esto requirió mucho trabajo, y se puede ver que los testigos de Jehová estaban interesados en volver la mente de la gente a la Palabra de Dios.
Para ayudarles en esto también dejaron literatura en los hogares de la gente. Colocaron 21.761.877 libros encuadernados y 9.965.259 folletos que consideraban temas bíblicos. Las revistas La Atalaya y ¡Despertad! desempeñaron un papel importante en el suministro de material de lectura para las personas que mostraban interés, porque se distribuyeron 235.468.427 revistas. Y además de eso, se obtuvieron 1.894.457 nuevas suscripciones para La Atalaya y ¡Despertad! Los testigos de Jehová instan a toda persona a suscribirse a estas revistas para que obtengan entrega inmediata y continua, directamente a sus hogares, de la excelente información de las revistas.
La noche del martes 17 de abril de 1973 fue el día sobresaliente del año para los testigos de Jehová. Ese fue el día de la celebración de la Cena del Señor. En sus Salones del Reino en aquella noche hubo 3.994.924 personas en concurrencia mundialmente, y 10.523, que profesaban ser cristianos ungidos por espíritu, participaron de los emblemas, el pan y el vino. Durante el año pasado 1.758.429 de estos individuos que concurrieron participaron en el servicio del campo. Este es el número máximo de personas que hasta ahora ha participado en la obra del Reino de alguna manera, de casa en casa o en las calles o hablando a amigos y vecinos y que informaban su actividad a las congregaciones de los testigos de Jehová. De esta cantidad un promedio de 94.604 participaron en la obra de precursor cada mes.
Bajo la dirección de 95 oficinas sucursales que atienden la obra en 208 diferentes países e islas del mar, hay 31.850 congregaciones establecidas, en comparación con 28.407 hace solo un año. Por eso, se establecieron y ampliaron muchas congregaciones más debido al gran ingreso de personas que han huido de Babilonia la Grande y ahora desean proclamar las buenas nuevas del Reino.
Los testigos de Jehová por todo el mundo tienen buena razón para regocijarse. “Aunque la higuera misma no florezca,” y ‘aunque ahora por un poco de tiempo hayan de ser afligidos por diversas pruebas,’ todos ellos tienen ‘en lo cual regocijarse’ y cada uno dirá: “Me alborozaré en Jehová mismo.”—Hab. 3:17, 18; 1 Ped. 1:6, LA.
[Tabla de las páginas 24 a 31]
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)
INFORME DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ POR TODO EL MUNDO PARA SU AÑO DE SERVICIO DE 1973