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  • Siguiendo tras mi propósito en la vida
    La Atalaya 1958 | 1 de febrero
    • a El Salvador y con ella otra sorpresa deleitosa. Yo había de ir a Nueva York para partir. Mientras estaba en Nueva York, mi nueva compañera, la hermana Bowin (que también había trabajado en Méjico), y yo pasamos una semana en Betel, ayudando algo en la casa y en la fábrica, y también visité a Galaad y la estación radiodifusora WBBR en la Isla de los Estados.

      En alta mar encontramos que algunos de entre los oficiales y nuestros compañeros de viaje se interesaron en el mensaje del Reino. Atravesamos a Guatemala y El Salvador por tierra, viendo mucho del país que había de ser nuestro hogar. Nuestra habitación nos aguardaba en la ciudad de San Salvador. Aquí durante nuestros primeros tres años una estación radiodifusora local nos dió una hora cada semana gratis; de manera que transmitimos lo que contenían los libros “Sea Dios veraz” y “Esto significa vida eterna”, también muchos artículos de La Atalaya. Pronto aprendimos mucho acerca del modo de vivir en el trópico; pero sobre todo, aprendimos que nuestra obra consta más del enseñar a personas de buena voluntad a ser testigos maduros que de colocar grandes cantidades de literatura. Lo de ver en las reuniones el rostro feliz de testigos firmes a quienes uno ha ayudado a aprender la verdad es de veras una recompensa grande, la cual siempre me incita a continuar siguiendo tras mi propósito en la vida.

  • Preguntas de los lectores
    La Atalaya 1958 | 1 de febrero
    • Preguntas de los lectores

      ● ¿Fué correcto el que Jesús dejara que ciertos demonios entraran en una piara de cerdos y los destruyeran, según se registra en Mateo 8:28-32, puesto que los cerdos no eran propiedad de él?—A. P., Estados Unidos.

      Este registro es uno que a los críticos de la Biblia les gusta atacar y usar como excusa para dudar de la autenticidad de las Escrituras. Eso explica por qué la Interpreter’s Bible comenta como sigue sobre los varios relatos que nos hacen de este incidente los escritores de los Evangelios: “La noción de que la legión de demonios pudiera entrar en los cerdos (v. 13) era superstición popular, sin duda; pero parece mejor dejar la narración como está, como una leyenda popular corriente en una vecindad pagana.” “La narración es legendaria.” “Difícil es creer que Jesús negociara con los demonios y les permitiera poseer los cerdos, y quizás estos detalles hayan sido añadidos al relato.”

      Sin embargo, los que han aceptado las pruebas abrumadoras de la autenticidad de la Biblia, como se han citado repetidamente en las páginas de las publicaciones de la Watch Tówer, no experimentarán ninguna dificultad en aceptar el registro como histórico. Según la ley de Dios los cerdos eran animales inmundos, y no sólo se les prohibía a los israelitas comer su carne o usarlos para sacrificios, sino que el tan sólo tocar el cuerpo muerto de un cerdo hacia inmundo al israelita. El que ellos criaran cerdos era por lo tanto un voluntarioso desprecio a la ley de Dios. Puesto que ellos no tenían ningún derecho a criar cerdos ni siquiera para propósitos comerciales, bien podían considerar esta destrucción de su piara como una reprimenda justa. Además, no se requería que Jesús ejerciera presciencia en cuanto a lo que harían los demonios una vez que entraran en los animales inmundos. También, podría argüirse razonablemente que un hombre vale más que una piara de cerdos, especialmente cuando se considera que los cerdos no habían de tener ningún valor comercial entre los judíos. De manera que no puede hallarse nada malo en la acción de Jesús de dejar que los demonios entraran en los cerdos.

      ● Adjunto un recorte de nuestro periódico Journal de Milwaukee del 10 de enero de 1957. Es una fotografía de pastores del Jordán llevando sus rebaños a las dehesas en las montañas cerca de Jerusalén. Esta es una fotografía de la United Press y parecería desacreditar el argumento de que el nacimiento de Cristo no fué en el invierno.—B. B., Estados Unidos.

      Se han recibido otras cartas en las que se ha dicho algo parecido, que en vista del clima de Palestina el hecho de que las ovejas estuvieran afuera de noche no podría tomarse como prueba de que Jesús no pudo haber nacido el 25 de diciembre. No obstante, obsérvese que aunque se pueden llevar los rebaños a las dehesas en Palestina durante la estación de las lluvias, cuando lo permite el tiempo, sin embargo esto no cuadra con las condiciones detalladas en Lucas 2:8, a saber, que los pastores estaban afuera vigilando sus rebaños de noche; es decir, que se habían alejado alguna distancia de los apriscos originales y permanecían con las ovejas en los campos de día y de noche. Esto no sería el caso durante la estación de las lluvias, cuando el tiempo sería inestable. Respecto a esto el Dr. Clarke declara:

      “Entre los judíos era la costumbre mandar sus ovejas a los desiertos, alrededor del tiempo de la pascua, y traerlas a casa al comienzo de las primeras lluvias: durante el tiempo en que estaban afuera, los pastores las vigilaban de día y de noche. Ya que la pascua acontecía en la primavera, y las primeras lluvias comenzaban hacia principios del mes marchesvan, el cual corresponde a partes de nuestros meses octubre y noviembre, hallamos que las ovejas se mantenían en el campo abierto durante el verano entero. Y ya que estos pastores aún no habían traído sus rebaños a casa, se puede asumir el argumento de que octubre todavía no había comenzado, y de que, por consiguiente, nuestro Señor no nació el 25 de diciembre, cuando no había rebaños en los campos; ni tampoco pudo haber nacido después de septiembre, puesto que los rebaños todavía estaban en los campos de noche. Sobre esta misma base debería abandonarse la idea de que la natividad fuera en diciembre. La alimentación de los rebaños de noche en los campos es un hecho cronológico, que arroja luz cuantiosa sobre este punto en disputa.” (Commentary por Clarke, Tomo 5, página 370) La Cyclopædia de McClintock y Strong presenta un argumento parecido y observa además que el censo, no la imposición de impuestos, “lo cual hizo que fuera necesario viajar (Lucas 2 2 sq.), no habría sido ordenado en esta estación.”—Tomo 4, página 877.

      Así que el hecho de que las ovejas pasten en Palestina en los meses del invierno no prueba de ninguna manera que el nacimiento de Jesús haya podido acontecer en diciembre, porque también se trata de que los rebaños y pastores permanecieran afuera de noche y de día. Entre los hechos que ayudan a determinar la fecha del nacimiento de Jesús como siendo alrededor del 1 de octubre están el que el padre de Juan el Bautista, siendo sacerdote de la clase de Abías, vino a ser padre de Juan más o menos seis meses antes del nacimiento de Jesús, y el que Jesús hizo inválidos los sacrificios del viejo pacto de la ley por medio de su muerte en la mitad de la semana septuagésima, predicha en la profecía de Daniel 9:24-27. Para detalles véase La Atalaya de 1954, páginas 637 a 639; “Esto significa vida eterna”, capítulo 8.

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    La Atalaya 1958 | 1 de febrero
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      PRESENTANDO CURACIÓN A LAS NACIONES—Apo. 22:2.

      La curación espiritual, que resulta en vida eterna en el justo nuevo mundo de Dios, ahora se presenta a la gente de toda nación. No se excluye a ninguna nacionalidad. Desde el reino celestial de Jehová Dios y su Hijo ungido fluye una corriente de curación de la cual pueden beber todos. Sí, “cualquiera que desee” puede tomar “del agua de la vida gratis.” (Apo. 22:17) A todos se les invita, sin importar cuál sea su raza, color o creencia. Por toda la tierra se está efectuando ahora la proclamación de la verdad acerca del Reino, en cumplimiento de las profecías bíblicas, y esto hace disponibles a toda persona sincera las aguas dadoras de vida de la verdad divina y el entendimiento que la acompaña. Durante este mes los testigos de Jehová seguirán visitando a la gente en sus hogares y le presentarán La Atalaya, la revista que bíblicamente es dadora de salud, invitándola a suscribirse por un año por la contribución de un dólar. Todo nuevo suscriptor recibirá tres folletos de efecto espiritual saludable sobre temas bíblicos. A toda persona que ama la justicia se le invita a participar en la obra de presentar curación a las naciones.

      SUSCRÍBASE A “LA ATALAYA”

      Por más de setenta y ocho años Jehová Dios ha usado La Atalaya para suministrar a los cristianos sinceros alimento espiritual al día, en conformidad con Proverbios 4:18, donde se promete que la senda de los justos sería como la luz del sol que aumenta en resplandor hasta que el día está cabalmente establecido. De conformidad con eso La Atalaya publicará los discursos principales que se pronunciaron en las asambleas de distrito “Sabiduría dadora de vida” que se celebraron el verano pasado en muchas ciudades de los Estados Unidos y el Canadá. El primero de éstos se presentará en el número del 1 de marzo y es el discurso público “Se ha acercado la curación de las naciones.” Asegúrese de recibir todos estos discursos por medio de suscribirse ahora. Se obtiene la suscripción de un año por sólo un dólar o su equivalente en la moneda de otros países.

      ESTUDIOS DE LA ATALAYA PARA LAS SEMANAS

      2 de marzo: La confianza del recto, §1-21. Página 68.

      9 de marzo: La confianza del recto, §22-28, y Capacitados para enseñar con confianza, §1-16. Página 74.

      16 de marzo: Capacitados para enseñar con confianza, §17-25, y El aguante sirve para dar pruebas de integridad. Página 82.

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