atención de la gente estas buenas nuevas. Se han distribuído centenares de millones de libros, Biblias, revistas y tratados y se han empleado otros medios para anunciar esta verdad incontrovertible.

Como resultado del diluvio de información publicada el mundo ha experimentado un sacudimiento, y gente de toda nación, tribu y lengua ha venido a la sociedad del Nuevo Mundo y ha ejercido fe en el Dios de ella. Sólo en el año pasado, más de 63,640 individuos se declararon de parte del nuevo mundo por medio de la inmersión en agua, de este modo llegando a ser nuevos proclamadores activos de las buenas nuevas. Estos, junto con centenares de miles de otras personas, forman una sociedad que no es parte de este mundo. Ellos forman una sociedad del Nuevo Mundo por medio de la Palabra y el espíritu de Jehová. Como tal sociedad, ellos han dejado atrás las normas del viejo mundo, las tradiciones políticas y religiosas, las riñas, los odios raciales y religiosos, los orgullos y rivalidades, y un sinnúmero de otras cosas divisivas. Se mantienen sin mancha del mundo.

Estas personas, como pueblo limpio y sano del Nuevo Mundo, tienen la promesa de Dios de sobrevivir a la guerra universal de esta generación—el Armagedón—y, como pueblo unido, pasarán al justo nuevo mundo de Dios, para gozar allí de las bendiciones de Dios para siempre jamás. Esta gran perspectiva puede pertenecerle a usted. Hágala suya por medio de prestar atención a estas buenas nuevas del Reino que ahora se están predicando.

Historia moderna de los testigos de Jehová

Parte 31—Terminando la cuarta, comenzando la quinta década de funcionamiento del Reino

EL “REINO de los cielos” con Jesucristo en poder como Rey a la diestra de su Padre completó en 1954, alrededor del 1 de octubre, su cuadragésimo año de dominio en medio de sus enemigos. Comenzó a reinar en medio de la I Guerra Mundial en 1914; terminó su año cuadragésimo en medio de la “guerra fría” que siguió después de la II Guerra Mundial entre los bloques oriental y occidental de enemigos del Reino. Los testigos de Jehová, conociendo bien los tiempos y las sazones de los propósitos de Dios, se acercaron al año cuadragésimo del Reino y entraron en él sin unirse a las predicciones horrendas que algunos religiosos hacían respecto a 1954, basándose éstos en sus ideas acerca de períodos paralelos de tiempo en los acontecimientos históricos. Entraron en 1954 haciendo planes y arreglos para desempeñar obras todavía más grandes en el servicio del Reino.

Su larga lucha en la provincia de Quebec, Canadá, para establecer el derecho de predicar las nuevas del Reino a la población católica allí había sido recompensada con un fallo de mayoría de cinco jueces en la Corte Suprema del Canadá, en Ottawa, el 6 de octubre de 1953, la cual falló que los testigos de Jehová tienen el derecho de distribuir su literatura religiosa en Quebec.a Los pasos subsiguientes que dieron los adversarios de la libertad de palabra y libertad de adoración en Quebec en su esfuerzo por impedir la aplicación de este fallo de la Corte Suprema mostraron que lo aceptaron con disgusto, como enemigos entre quienes Cristo tenía que gobernar con vara de hierro.

El que los Estados Unidos de América hicieran estallar dos modelos nuevos de bombas de hidrógeno en el Océano Pacífico en marzo de 1954 no llenó a los testigos de Jehová de pavorosos presagios del futuro. Serenos, procedieron a dar un testimonio aun más grande acerca del reino establecido de Dios por medio de poner en el campo más ministros predicadores. En ese marzo en los Estados Unidos se alcanzó un nuevo número máximo de publicadores cuando 154,367 ministros informaron haber dedicado tiempo a la predicación,b lo que fué seguido por un máximo más alto todavía de 169,015 en abril.c En otras naciones, también, se estaban logrando aumentos. De modo que para el fin del año de servicio de 1954 se alcanzó un nuevo máximo mundial de 580,498 predicadores, un aumento de 60,516 sobre el año anterior.d Ahora se recomendó especialmente que se pronunciaran sermones de casa en casa de tres a ocho minutos basados en la Biblia, y también sermones de diez a quince minutos al volver a visitar a personas interesadas. Todas las congregaciones se hallaban funcionando de la misma manera armoniosa al emprender un programa de entrenamiento en que ministros experimentados, capacitados, daban entrenamiento personal a los que eran irregulares o a los que tuvieran menos éxito o a personas recién interesadas tocante a las maneras más eficaces de predicar en el campo. También comenzó a darse más atención a la distribución en toda oportunidad de ejemplares sueltos de La Atalaya y ¡Despertad!, en adición a la consecución de suscripciones para estas revistas.

El 3 de abril de 1954 se inició una nueva actividad, la proyección de la película intitulada “La Sociedad del Nuevo Mundo en Acción,” cuya presentación toma una hora y veinte minutos. Esa noche esta película se exhibió por primera vez fuera de la casa matriz de Brooklyn a un auditorio de 1,110 personas en una asamblea de circuito en la ciudad de Nueva York. Hasta la fecha ha resultado ser un poderoso instrumento para familiarizar visualmente a todos sus espectadores con la magnitud de la organización de la Sociedad, sus instituciones, sus actividades en el campo, sus asambleas en grande escala, su funcionamiento eficiente y suave, y el espíritu que la impulsa. En los territorios de las oficinas sucursales de la Sociedad Watch Tówer, aun en Taiwan durante la proscripción de los testigos de Jehová que duró dieciocho años, la película se exhibió a grandes auditorios agradecidos. Para el fin del año de servicio de 1955 esta película cinematográfica, con el comentario acompañante, se había exhibido ante 2,379,549 personas.e

El año 1954 resultó ser uno notable para asambleas. Durante el verano, comenzando con la asamblea de Boston (Massachusetts) el 24 de junio de 1954, asambleas de distrito y nacionales de cuatro días se celebraron alrededor del globo, incluyendo asambleas hasta en tales lugares como Pakistán, Tailandia, Indonesia, Corea del Sur, además de otros lugares en seis continentes y en las islas de los mares. Ochenta de estas asambleas atrajeron a un auditorio público total de más de 427,000 y un total de 14,509 fué bautizado. La asamblea de Berlín, en que hubo 22,500 personas presentes para escuchar “El amor de Dios al rescate en la crisis del hombre” y 1,022 se bautizaron, llevó la delantera. En la asamblea de distrito en Toronto (Ontario,